Austin López ha llevado una vida apacible y sin complicaciones, siempre aferrado al control y la organización. Sin embargo, todo cambia cuando la oficial de policía Victoria Wood aparece en su vida con una misión que desafiará su rutina.
Victoria ne...
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Victoria
El vestido azul noche estaba colgado en una barra esperando a ser usado por mi después de la pasarela. Estaba nerviosa pero decidida, modelaría solo una ronda y luego tendría que salir a convivir un poco con los invitados, la mayoría seria todo en español, pero me las apañaría con un traductor en la oreja y a Austin a mi lado reconfortándome.
—Sigues tú, Vic—me hace saber Lissy y me enderezo.
—Si por supuesto.
Llevaba puesto un pantalón blanco a conjunto con una linda blusa del mismo color, ambos eran hechos a medida, era un atuendo elegante de ceremonia, fiesta o incluso para trabajar de manera organizada.
Me posiciono en la tableta que me abrirá la pasarela y me pongo recta con la cabeza en alto y la mirada fría y neutra tal y como me lo enseñaron. Los tacones dorados me sientan de maravilla, incluso pudo sentir la almohadilla que me envuelve el pie, tan cálida y suave.
Comienzo la pasarela, los flashes se hacen presente y la cantidad de personas que me observan es impresionante, no busco a nadie con la mirada, realmente no puedo mis ojos deben de estar siempre en un puntos fijo.
Doy media vuelta cuando termino y me devuelvo, Lissy me ayuda a cambiarme para repetir la pasarela cuatro veces más. Cuando finalizo el vestuario Lissy me espera ahora con el vestido azul para presentarme en la gala. Le brindo una sonrisa sincera y ella me ayuda a vestirme mientras yo me quito los accesorios y me pongo otros de color plateado.
—¿Cómo te sientes ahora? —me pregunta con ilusión la pelirroja.
—Excelente, Lissy—digo la verdad—. Solo que es frustrante no poder ver a nadie, mantener tu mirada fija en un punto es agobiante.
—Estuviste grandiosa—se le iluminan los ojos—. Verte modelar mis diseños se sintió tan bien...
La abrazo por que sé que está a punto de llorar y ella me abraza con más ganas.
—Gracias, Victoria—me dice—. Sin ti nadie hubiera usado mis diseños... Lorena se ocupó de que nadie me escogiera.
—Ya le llegara el karma a esa víbora, no te inquietes.
Aprieto su mano y me giro hacía el espejo para aplicarme un labial rosa ligero que resalta mis ojos oscuros y mi cabello azabache que esta ondulado en las puntas.
—¡Victoria! —me tenso. Enzo Vicerri entra en un impecable traje vino tinto junto a un desconocido que en mi vida había visto.
—Hola—finjo una sonrisa—. ¿Qué tal?
—De maravilla—me muestra una deslumbrante sonrisa y me repasa de arriba abajo con descaro—. Pero eso es algo que debes de saber—dice con seguridad—. Quería presentarte a un socio que trabaja con modelos en Australia...
—Oh—miro al moreno que esta junto a Enzo que me inspecciona el cuerpo como si fuera una especie de atracción—. Un placer.
—El placer es todo mío, preciosa dama. Mi nombre es Josué—comienza a decir—. Mi empresa y yo estamos fascinados con tu entrega y quería presentarme personalmente.
