Era de público conocimiento que la baterista de "The last life", y el capitan del equipo de fútbol se odiaban, después de todo se los podía ver molestandose en cualquier parte.
Pero un mal novio, un grupo de amigos en común y un viaje cambiarán todo...
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La música sonaba extremadamente fuerte, y no, no era la música de la fiesta, sino que era la playlist que había puesto mientras me bañaba, la misma playlist que me estaba permitiendo fingir que no escuchaba como Luke quería entrar al baño porque se estaba cagando encima.
Existen dos baños por algo, Luke.
Tranquilamente, esperando a que desistiera, seguí escuchando "Guaya Guaya" de Don Omar, yo se que la gente piensa que escucho todo el tiempo rock, pero tener gustos variados me hace ser una persona mucho más interesante, o eso creo.
Al escuchar como Luke se iba corriendo por el pasillo mientras gritaba que se cagaba, me surgió la maravillosa idea de que ese seria un momento perfecto para hacer un GRWM. En mi defensa no lo dejaba entrar a Luke porque aun no me cambiaba, y no saldría del baño usando solo una toalla, no soy una depravada.
Así que con una idea en mente coloque mi celular en frente mío y empecé a grabar paso por paso como me preparaba, empezando por el maquillaje, el cual consistió de rímel, un pequeño delineado, iluminador y un gloss en los labios, luego peinando mi cabello y por último colocándome un chaleco negro junto a una mini falda del mismo color y unos borcegos cortos también de color negro.
Una vez terminé aquel video lo descargue y lo pase por el grupo de la banda, el cual compartíamos con nuestro reciente jefe, su asistente y el divino de Luke que se estaba cagando anteriormente y no dudo en insultarme una vez salí del baño, si, me estaba esperando fuera.
–Luke, existen dos baños por algo –fue mi única respuesta para luego dirigirme donde estaban el resto de mis amigos preparando tragos y escondiendo las últimas cosas de valor por si alguien de alguna manera entraba a la casa.
–Escuchen, decidimos junto a Ethan y Nadia que no vamos a tomar alcohol, así estamos atentos por si sucede algún imprevisto –informó Camille tras guardar junto a Nadia un televisor dentro de la despensa.
–Recuerden que el único baño en funcionamiento va a ser el tercer baño de la casa, el de al lado de la pileta, por ninguna razón en el mundo un invitado tiene que entrar a la casa, y eviten ustedes mismos hacerlo también por si alguien decide seguirlos, todas las puertas van a estar cerradas con llave, Ethan y yo tenemos las llaves por si necesitan entrar por alguna razón.
Asentí a las palabras de Nadia, grabando aquellas en mi mente.
–¿Ninguna de las cuatro tiene pensado meterse en la pileta? –cuestionó Adam notando que a diferencia de ellos nosotras no teníamos puestas nuestras bikinis.
–Meterme a una pileta con desconocidos no me es para nada atractivo –se encogió de brazos Camille, la cual llevaba un corto vestido de brillos que la hacia destacar.
–Después no se quejen cuando alguien las tire a la pileta con su ropa linda puesta –respondió Adam con varias botellas en brazo dirigiéndose hacia el patio. Al cargar tantas botellas los músculos de sus brazos se marcaban de sobre manera y me atraía tanto aquello.
