Sex Headcanons - BNHA

Yu Hojo - I

La música sonaba fuerte en los oídos de Yu, las luces que parpadeaban alrededor del club ocasionalmente llamaban su atención. Un club nocturno no era el lugar donde esperaba encontrarse, especialmente esta noche. Para empezar, fue únicamente tu convencimiento lo que lo hizo salir de su habitación. Se balanceó torpemente cuando sus ojos vislumbraron tu cuerpo bailando entre la multitud frente a él. Deseó que no estuviera tan oscuro, tal vez pudiera vislumbrarte. Recordó que cuando apareciste con un traje ceñido, casi le dejó sin aliento. No pudo apartar los ojos de ti durante todo el camino hasta aquí. Las fantasías que pasaron por su mente todo este tiempo lo estaban volviendo loco.

Tu mano encontró su cintura mientras te inclinabas cerca de su rostro, el licor en tu lengua era fuerte cuando lo tomaste con la guardia baja. 

Y/N: Necesitas relajarte.

Medio gritaste, tratando de hablar lo suficientemente alto por encima de la música.

Y/N: Baila conmigo.

No tenía mucho que decir al respecto, y tampoco es que le importara que tú tomaras la iniciativa. Guiaste sus manos a tus costados mientras girabas en sus brazos. Presionaste tu espalda contra su pecho mientras él te dejaba moverlo al ritmo que querías. Presionaste intencionalmente tu trasero con fuerza contra su entrepierna mientras frotabas tu cuerpo contra él. Sus dedos presionaron tu piel, una señal reveladora de que sentía exactamente lo que estabas haciendo.

Seguiste frotando tu trasero contra él el tiempo suficiente hasta que sentiste su erección completamente dura contra ti. Sonreíste para ti mismo en la oscuridad antes de girarte en brazos. Tu pecho fue empujado bruscamente contra él mientras alguien detrás de ti te empujaba hacia él en sus caóticos movimientos. Sin embargo, usaste esto a tu favor, rodeando su cuello con tus brazos. Acercaste su rostro hacia ti mientras balanceabas tu cuerpo con la música contra él.

Y/N: ¿Te estás divirtiendo?

Medio gritaste de nuevo, sabiendo que él no quería prestarle atención. Especialmente ahora.

Trató de responder pero no logró hablar lo suficientemente alto. Las luces parpadeantes dejaban entrever su rostro sonrojado, lo que sólo te incitaba a seguir adelante. Sus manos permanecieron ancladas donde las pusiste por primera vez, a pesar de lo mucho que quería pasarlas por todo tu cuerpo. Cerró los ojos, dejándose perder en la música para no pensar demasiado en su situación actual. Sin embargo, era difícil hacer eso, especialmente con la forma en que tu cuerpo increíblemente cálido estaba presionando contra él. Dios, se sentía realmente cálido en este momento.

No notó que tu mano se movía alrededor de su cuello, al menos no hasta que ahuecó su erección a través de sus pantalones. Tuvo que morderse la lengua para evitar que cualquier ruido escapara de su garganta. Sus ojos se abrieron de golpe, su cabeza se apresuró a intentar mirarte a pesar del ambiente oscuro en el que ambos estaban. Tu otra mano se había deslizado entre el cabello, agarrándolo con fuerza para mantenerlo en su lugar. Se quedó allí en completo shock por sólo un segundo antes de que tu voz le susurrara al oído.

Y/N: Sigue moviéndote, no querrás que nadie cercano sospeche, ¿verdad?

Tu voz ronca hizo que sus rodillas se debilitaran, pero obedeció lo que le ordenó. 

Y/N: A menos que eso sea lo que quieras.

Intentó mantener las apariencias, dejando que ambos cuerpos siguieran moviéndose, pero tu mano acariciándolo lo estaba jodiendo demasiado. Todo su cuerpo ardía de vergüenza; qué asco se sentía pero qué emocionado estaba a pesar de sí mismo. Tus dedos soltaron su cabello una vez que supiste que continuaría jugando como un buen chico, riendo entre dientes cuando su cabeza inmediatamente encontró tu hombro. Le arrullaste el oído mientras presionabas tus dedos en la tela contra su punta palpitante y sensible.