▹ Capítulo 12

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YeonJun se recargó en la entrada de su salón de clases mirando hacia el jardín cercano donde se encontraba Beomgyu jugando con Kai y Soobin, apretó sus labios notando como el omega castaño era quien comenzaba el jugueteo y reía felizmente, se le veía de buen humor... y tan lindo mientras buscaba jugar con el alfa castaño, Soobin.

Sonrió un poco enternecido por lo lindo que se veía Beomgyu de esa manera, nunca creyó verle así, sintió como alguien subía a su espalda y supo de inmediato que se trataba de Wooyoung.

—Es extraño.

—¿El qué?—. Wooyoung balanceo sus pies al sentir como YeonJun no lo dejaría caer mirando hacia donde veía el alfa.

—Beomgyu está de muy buen humor.

—Oh... tal vez su lobo está de feliz, o su celo está cerca, los omegas no podemos resistir al buen humor cuando nuestro lobo se encuentra emocionado.—Explicó Wooyoung posando su mejilla contra los azabaches cabellos del mayor.

—Beomgyu acaba de salir de su celo, dudo sea por eso...

—Entonces es la primera opción, su lobo está de buen humor. —Aseguró el omega rubio aferrándose a su mejor amigos al sentir como este caminaba un poco.—Usualmente los omegas nos ponemos muy sensibles cuando eso sucede, y nuestra resistencia a la voz de mando de un alfa es nula—. Explicó el omega divagando en sus pensamientos.—San aprovecha cuando eso pasa, con una sola orden me tiene a sus pies... es un pervertido.

Mientras Wooyoung se comenzaba a quejar de su pareja y sus mañas, YeonJun miraba con ansias al omega que se mantenía jugueteando con dulzura con sus amigos.

—¿En serio?

—Sip, San siempre se aprovecha de eso.

¡Es mi oportunidad! Gritó su subconsciente siendo manejado por completo por su lobo el cual estaba deseoso de aquel hermoso omega.

Sonrió emocionado y comenzó a saltar en su lugar, mostrando su entusiasmo pero por consecuencia los gritos del omega rubio resonaron por todo el lugar a la vez que se aferraba a él con terror.

—¡Bájame alfa tonto! ¡Ayuda!—. Gritaba Wooyoung cerrando sus ojos con fuerzas, asustado en espera de un golpe al caer de la espalda de aquel alto alfa.

Pero YeonJun se detuvo de inmediato al percibir al alfa castaño, San, frente a él con sus brazos cruzados.

—Baja de una vez a mi omega, alfa idiota—. Gruñó San esperando a que YeonJun acatara su orden, y este no dudó en dejarlo en el piso con cuidado.

—Ya... ya, alfa gruñón—. Murmuró viendo como el omega rubio corría a los brazos de su alfa mientras que este se frotaba un poco contra él en un intento de dejar su aroma impregnado en él.

YeonJun hizo una mueca molesto por eso pero aun así se mantuvo en silencio mirando hacía el omega quien saltaba un poco en su lugar, se veía tan tierno.

No iba a perder su oportunidad.

- ☆ -

YeonJun se asomó por detrás de un árbol como el Beomgyu caminaba con calma con sus auriculares puestos mientras tarareaba con calma una canción, sonrió por ello pues sintió mucha ternura pero aun así no bajó la guardia.

Estaba entrando en una manada que no le permanecía, mientras que Beomgyu permanecía a la manada "Min", YeonJun pertenecía a la manada "Jeon", y si le descubrían entrando sin algún permiso sería echado de ambas manadas pues estaba rompiendo una de las reglas más importantes.

<<No invadas tierras que no sean de tu manada sin autorización.>>

Suspiró sabiendo que se estaba metiendo en problemas pero no quería perder su oportunidad para tener al omega, así que no le importaba mucho.

Miró como Beomgyu se adentraba a una pequeña casa la cual tenía un bonito color blanco con sus vistas pintadas de azul celeste, y al frente tenía un pequeño jardín el cual tenía tiernas flores blancas con algunas azules entre ellas, totalmente el estilo de Beomgyu, a los minutos YeonJun fue hasta ahí y olfateo el interior desde fuera, se colocó el gorro de su sudadera notando como en el lugar estaba el aroma del omega.

Vive solo, genial—. Pensó y tocó de inmediato la puerta.

Habían pasado algunos minutos desde que el omega había entrado, en el momento que este le abrió la puerta pudo notar la expresión de asombro e incrédulidad al verla ahí, pues Beomgyu era consciente de que no eran de la misma manada.

—Tu... ¿Qué... qué haces aquí? No, no, no deberías estar aquí.—Habló con un suave tartamudeo mostrando que estaba nerviosos y asustado por verle ahí.

—¿Puedo pasar? ¿Si? Gracias.

YeonJun se hizo paso al interior de la casa, todo era pequeño y acogedor, había armonía ahí, le parecía un lugar lindo, se giró viendo al omega quien cerró la puerta y le miraba con atención, pudo ver que este llevaba puesta una camisa grande y un short negro de tela suave, se veía cómodo.

—¿Qué haces aquí?, tu no eres de la manada Min.—Acusó el omega aun en la puerta sin querer dar un paso hacia el mayor.

—Si, lo sé... quería visitarte.—YeonJun se quitó su sudadera.

—Vete, yo no te quiero aquí, llamaré al alfa líder.—Amenazó Beomgyu apuntando acusatoriamente al alfa quien sonrió un poco.

—¿Harías eso?—. Preguntó llevando una de sus manos a su pecho—. Que cruel.

El alfa comenzó a caminar con suavidad hacia el omega quien se pegó a la puerta sintiéndose nervioso de tenerle ahí y apretó sus labios al tenerlo a escasos centímetros de su cuerpo.

—Mejor disfrutemos la visita, ¿no?—. Susurró YeonJun posando una de sus manos en la puerta al lado de la cabeza del menor quien le miraba con sus ojos bien abiertos.—Jueguemos, omega.

Beomgyu tragó saliva sintiendo como su cuerpo entero reaccionaba al fuerte aroma del alfa y odio eso pues él deseaba ser tomado por él pero aun así no se sentía listo, aunque una gran parte de él quería entregarse por completo a YeonJun.

Dios, que frustración.












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En el próximo capitulo hay contenido +18, avisados están ùú

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—MOKKA

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