Fake Wedding || Taekook

Cuarenta

- Quiero hablar contigo y en persona.

- Sí, estoy en camino. Iré a verte con Jungkook.

- De acuerdo, está bien. Choi también está aquí.

- También se reunirá con nosotros un amigo mío, Kim Namjoon. Tiene información que nos servirá.

- Está bien.

- Hyung, creo que Heesung está detrás de todo esto.

- Lo sé.

- ¿Lo sabes?

- Bueno, lo sospechaba. Debes venir aquí y hablaremos.

El teléfono quedó en silencio. Taehyung miró la pantalla por unos segundos, como si las palabras de su hermano pudieran adquirir otro significado si las observaba el tiempo suficiente. Heesung estaba detrás de todo esto. Lo sabía en lo más profundo, pero escucharlo en la voz de Jin le daba un peso que no esperaba.

-¿Qué ha dicho? -preguntó Jungkook desde el asiento del conductor, sin apartar la vista del camino.

- Lo sospechaba... -murmuró Taehyung, sin mucho ánimo. Se frotó el rostro con ambas manos-. Hyung lo sabía. O lo sospechaba. No me lo dijo antes.

Jungkook apretó los labios, sus manos firmes sobre el volante mientras aceleraba. El tráfico de la ciudad los retrasaba más de lo que le gustaría, pero llegarían a tiempo. Siempre llegaban a tiempo.

-Taehyung, no tiene sentido darle más vueltas. No estamos aquí para hacer conjeturas, estamos aquí para enfrentar los problemas. Jin también está en esto contigo.

- Sí -Taehyung soltó un suspiro-. Jin sospechaba desde que nuestro padre lo nombró sucesor y Heesung... no hizo nada. Ni siquiera protestó como siempre. ¿Te imaginas? Heesung, el que siempre discutía con papá, de repente se mostró sereno. Eso no es normal en él.

Taehyung asintió, aunque el nudo en su estómago seguía ahí. La idea de ver a Heesung cara a cara después de todo lo que había hecho lo llenaba de una mezcla de ira y decepción. A veces se preguntaba en qué momento exacto su hermano mayor había decidido traicionarlos. ¿Era algo que siempre había estado ahí? ¿O se había gestado con el tiempo, a medida que el poder dentro de Kim Corporation se volvía más atractivo?

-Jungkook... -su voz salió más frágil de lo que había querido-. Si esto sale mal, si Heesung ya nos tiene vigilados...

Jungkook lo interrumpió, sin desviar la mirada del tráfico. 

- No va a salir mal. Estamos listos. Namjoon tiene la información que necesitamos y Choi es el mejor abogado, mi padre también va a ayudarnos. No tienes que enfrentarlo solo. Además, no creo que Heesung sepa que lo hemos descubierto.

> Sabía que era raro -Jungkook asintió-. Seung también lo pensó, por eso se movió rápido para encontrar algo. 

- ¿Seung?

-Ehh.. mi padre... 

Taehyung solo asintió.

El silencio cayó entre ellos nuevamente, aunque esta vez era más tenso, más pesado. El auto avanzaba con mayor rapidez mientras dejaban atrás el centro de la ciudad. La casa donde estaba Seokjin, situada en las afueras, era un refugio discreto. Lo que Taehyung sabía con certeza era que esta reunión sería decisiva. No habría vuelta atrás.

-Jungkook... si Heesung tiene más aliados de los que imaginamos, estamos en problemas. Él siempre ha sido el favorito de los directivos. Puede que esté armando algo y no importa si mi padre les ha dicho que me favorezcan, ellos velarán por sus intereses...