Fake Wedding || Taekook

Veinticuatro

-Bien, veamos... -pronunció en voz alta ojeando el portafolio- esta es la agenda... aquí las citas... ¡oh! esta es su información -dijo hablando sola.

-Sí... está casado -bufó- bueno, eso no es problema -sonrió y dijo para sí misma, buscando el nombre de la esposa.

Justo en ese instante, el teléfono sobre el escritorio comenzó a sonar.

-¿Diga? -preguntó en la línea- Ah sí, sí voy en seguida -cortó y tomó unos papeles para entregar en el piso de abajo.

Habían pasado dos días desde que Lisa fue contratada, y gracias al cielo, Hyuna no tuvo que preocuparse por algún error de la chica. En verdad aprendía rápido y por el momento no había intentado nada con Taehyung. Solo porque él no estaba en la oficina la mayor parte del tiempo.

Cuando bajó y dejó su escritorio vacío no se revisó el mensaje de su jefe avisando que llegaba y que, por lo tanto, debía tener listos algunos informes y contratos.

Así que cuando Taehyung llegó en sus deportivos se sorprendió un poco al no ver a la chica nueva en su puesto.

"Quizás fue al baño", pensó.

No importó, entró en su oficina y se puso cómodo. Sacó su teléfono y tecleó un mensaje.

> Jungkookie ❤️

- Estoy en la oficina, Kookie.

Sonrió.

Desde que hablaron, las cosas con Jungkook había estado tranquilas y un poco cariñosas, Taehyung trataba de acercarse lo que más podía si se lo permitía. Así que cumplió con sus palabras y comenzó a informarle donde estaba y demás, así como su esposo lo hacía.

- ¡Qué rápido llegaste!

- Yo también estoy en tu oficina 😅

Taehyung abrió los ojos en grande y se puso de pie de inmediato. ¿Jungkook estaba en su oficina? ¡Acaban de correr juntos!

- Olvidé decirte algo.

Respondió Jungkook, como si leyera la mente de Taehyung y contestara a las preguntas de sorpresa que tenía. Kim solo supo sonreír en su lugar.

- Está bien, te esperaré aquí -respondió por texto.

Jungkook había olvidado decirle que tendría un viaje a Jeju por la tarde, uno de negocios que podía aplazar pero que prefería no hacerlo para librarse de un estrés innecesario.

Y bueno, era cierto, las cosas habían mejorado, eran más tranquilas y dulces con Taehyung. La confianza que tambaleó hace unos días, ahora comenzaba a ser cercana. Le gustaba esa sensación. Aun si no le confirmaba a Tae que quería intentarlo de verdad.

Jungkook caminó un poco más hasta llegar al edificio de Taehyung, llevaba una polera gris de mangas holgadas y unos deportivos muy cómodos. Corrió junto a Taehyung por la mañana, ambos decidieron salir de manera inusual. Su esposo le había asegurado que no tenía mucho trabajo y no era necesario cambiarse, y solo por eso Jungkook se desvió de su camino a casa para poder hablar con él en persona. No le tomaría mucho tiempo, tampoco.

Entró al edificio y fue reconocido por la recepcionista. Lo saludó lo dejó ingresar de inmediato. Tomó el ascensor, y justo cuando se iba a cerrar, un chico se apresuraba a llegar. Jungkook interpuso su mano entre las puertas para ayudar al joven, al parecer era el mensajero. Este le agradeció y entró junto a él al cubículo metálico del ascensor.