Fake Wedding || Taekook

Cuatro

El aire entrando por su ventana dejaba algunos mechones de cabello sueltos. La noche era tranquila, el recorrido lento pero sin tráfico, la música del auto sonaba de una manera suave.

-El universo tiene una sutil forma de burlarse de mí -pensó Jungkook mientras posaba su vista en la carretera. Scenary le recordaba todo, desde su ex novio hasta lo fantástica que había sido esa boda falsa en la que se metió por su propia voluntad.

Una mezcla de emociones llenaban su cuerpo al cien por ciento, no sabía si sentirse triste o aliviado. Su mente no dejaba de lado el hecho de que en unos días tenía que fingir en aquella fiesta tonta de ex alumnos porque su orgullo no le permitía faltar.

-Ella no me va a dejar en paz hasta que todos vean -golpeó el timón-. Mierda - maldijo ahora con una mirada de ira puesta al frente.

-¿Por qué demonios tenía que buscarme? Tenía que quedarse en Estados Unidos con su noviecito y no venir a joderme la vida. 

La trayectoria seguía en marcha, pero ahora con un sentimiento de impaciencia contra el volante.

-Y ese estúpido de Kim... -gritó dentro del auto y se detuvo. Un puente lo esperaba al lado; silencioso, sin autos cerca, dispuesto a escucharlo...

-¿Qué se supone que haré? -pronunció mirando al cielo para luego bajar la cabeza y posar sus manos en el barandal.

-Yo creo que lo que no debes hacer es saltar -se escuchó una voz femenina a unos pasos cerca-. Tal vez no sepa qué debes hacer, pero no debes saltar -señaló con una mano en dirección al puente. Era una muchacha joven, algo bronceada, de abrigo oscuro y cabello negro largo.

Jungkook alzó la mirada y notó la presencia de la mujer, sonrió y negó suavemente.

-No iba a saltar. No es mi estilo -dijo ofreciendo una pequeña sonrisa.

-Ohh, entonces es genial -contestó la muchacha con cierto alivio y acomodándose el cabello detrás de su oreja-. ¿Cuál es tu nombre?

-Soy Jungkook -estiró su mano-. Jeon Jungkook -completó amablemente.

La mujer aceptó su mano y la estrechó.

-Un gusto Jungkook, que bueno que no pretendías saltar -respondió divertida-. Usualmente paso por aquí para evitar que alguien salte, es un alivio.

-¿Siempre hay gente que quiere saltar?

-La verdad no, pero me he encontrado con un par -con un gesto de molestia por lo que mencionaba, miró hacia el puente-. Nunca sabes que tan desgraciadas pueden ser sus vidas pero los intentas motivar para volver a ellas con un mejor actitud.

Aquellas palabras resonaron en la cabeza de Jungkook... esa mujer hacía un gesto admirable tratando de salvar vidas. ¿Por cuánto tiempo lo hacía?

-En fin... si no venías a saltar... supongo que tendrás algún problema -giró hacia el pelinegro y guardó sus manos en el abrigo pomposo que traía puesto.

-Eh.. sí, supones bien -Jungkook observó el agua calmada que a penas se movía debajo del puente y el ambiente volvió a ser silencioso.

-Bueno, creo que tengo que irme Jungkook... he hecho mi tarea por hoy -pronunció la mujer sacando de sus pensamientos al pelinegro. Sonrió y se movió en su lugar esperando alguna respuesta. Quizás aquel chico no tenga ninguna intención de contarle sus problemas y eso lo entendía a la perfección. Tenía que respetar.

-Ohh, disculpa, pero si quieres puedo llevarte a casa... -sacó del bolsillo de su chaqueta negra las llaves del auto.

-Ehm, gracias, pero vivo muy cerca... no es necesario -cortésmente rechazó- Supongo que... bueno.. adiós Jungkook.