14 AARÓN

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Así como es mi ángel de valiente, también lo es de inocente en partes iguales. Al menos aún lo es con respecto a las organizaciones. Un viaje en carretera pasando por cada estado o ciudad que pertenece a alguna organización, mafia, familia o Bratva...

Sí, justo eso no era lo que tenía en mente.

Pero no puedo decirle que no a mi ángel, y eso me preocupa. Porque aún no la he probado y ya me tienen rendido a sus pies.

Afortunadamente, tenemos aliados, bueno, mi padre o mi apellido los tienen. Un aviso a la familia que gobiernan en las vegas fue suficiente para hacerles ver que solo vamos de paso. Un día o dos serán suficientes para que mi ángel conozca todo lo que quiere conocer de las vegas, sin que nos topemos con ningún F.

Esos hombres sí que están locos, pero ahora, pasando todo a la segunda generación, deben de estar ocupados.

"Espera... ¿Es eso lo que Vito está trabarlo de hacer?"

¿Esa es la razón de buscar a su hija veinte años después? No puedo decir que esa idea me guste, y no dejo que se asiente en mi pecho, esta noche no.

—wow, de verdad que es más hermoso que en las películas, y realmente parece que es de día con tantas luces por todos lados. —ver su cara emocionada lo es todo para mí en este momento.

—sí, es muy bonito aquí. No puedo decir que no lo haya visitado, por mi trabajo viajo mucho, pero sí puedo decirte que nunca me di el tiempo para pasear por las concurridas calles de Las Vegas. —le digo y rodeo su hombro para tenerla más cerca. Nos acercamos a uno de los antros más famosos y no quiero arriesgar a que un borracho loco se nos atraviese mientras lo cruzamos.

—¿entonces esto también es nuevo para ti? —me pregunta con los ojos brillosos de emoción. Juro que está cara, no la misma a la de la mujer que pidió cortar las manos derechas de dos tipos hace casi dos semanas.

"¿Y cuál te gusta más?"

No quiero ir ahí.

"¿Por qué no?"

Porque no sé cuál es la respuesta.

—así es Ángel, esto también es una primicia para mí. —adoro su cara, cada parte de ella. La pasión que le pone a las cosas, la intensidad con la que siente, no se parece nada a la mujer que vivió su vida con una máscara. Y no sé cuanto tiempo más me voy a poder resistirme a ella.

"¿Y como por qué nos estamos resistiendo? Ya le has dicho que te enamoraste de ella desde la primera vez que la viste... ¿Entonces qué es?"

Si tan solo lo supiera.

—no podemos venir a Las Vegas y no entrar a un casino, ¿verdad? —no es lo que tenía en mente, pero ha perfeccionado esos ojitos de cachorro atropellado. Y sé que aunque lo intentara, nunca podré decirle que no.

—lo que mi ángel quiere... mi ángel lo consigue. —consiento.

—¡¡sí!! —chilla como una niña y me pregunto de qué tanto se privó durante toda su vida. No hablo de economía, sé que sus padres se establecieron bien, pero hablo de lo que le pide su alma. De lo que le ha pedido la sangre Roselli que corre por sus venas y que nunca supo cómo llenarlo.

Mi ángel, mi bendito ángel caído, mi dulce no tan dulce.

Sacudo las emociones amontonadas en mi pecho, sonrío antes la cara que mi ángel me pone. Quiero mantener esa sonrisa en su rostro para siempre.

•••

Entramos al Bellagio y es tan despampanante como lo esperaba, pero con todas sus luces y candelabros gigantes, ah y con paredes decoradas con Oro... con todo eso no puede brillar más que mi ángel. Su cabello rubio luce casi platinado y su vestido rojo de lentejuelas, lejos de parecer vulgar, la hace la mujer más increíblemente hermosa del mundo entero, esa tela que abraza sus curvas y se extiende hasta la mitad de sus muslos. Y esas zapatillas de infarto... aun con toda la altura que gana, le saco toda la cabeza, pero no voy a negar que tenerla más cerca de mi cara cuando caminamos juntos me hace más accesible respirar el aroma de su cuello, a sol y flores exóticas.

Dulce NO tan Dulce Donde viven las historias. Descúbrelo ahora