Levi Ackerman | When You Are Near Me

XXXVI The

Al terminar de escribir, tomo de nuevo pluma le dejaría una última carta a Levi.

Levi.
Se puede intentar hacer canciones
El hombre ha hecho tanto por el arte
Se puede intentar romper paredes
Y luego hacer casas gigantes
Y no llegue aprenderte amar
Aunque quisiera yo no pude
Crucé tus labios con mi boca
Y te entregué mi cuerpo.
Cansada me detengo y pienso
Si esto es lo que merezco
Hoy ya me voy.
Y desearé que tengas un buen viaje
Y no lloraré por que sé bien que yo intenté quererte
Y le dije no a ser feliz por que solo pensaba en ti
Que yo aprendería amarte como tú lo hacías
Y debo decir adiós
Sé que pude quedarme más tiempo
Pero algo me dijo que era tarde
Y que aunque usara yo mi empeño
El final ya era inevitable
Y duele porque fuiste todo lo que desee un día
Pero si no hay amor sé que el deseo ya no bastaría, no
Sufriendo por todo el recuerdo
Viviendo de remordimiento

Raymond Dellaware.

Lo paso por debajo de la puerta de su habitación y empacó pocas de sus pertenencias para luego ir a la capital en dónde explico la situación de su padre.

Dónde los altos mandos ya sabían de la precaria salud del comandante Dellaware y otorgaron su salida del cuartel.

Mientras está iba en su carroza a través del camino su madre ya tenía la carta en sus manos cuando sus empleados anunciaron la llegada de su pequeña hija quien estaba llena de polvo y suciedad por el camino.

Kaya la miro con los ojos ensopados y extendió sus brazos.

-Mi hija mi pequeña bebé que te hicieron?

-Mamá lo siento

-Eso no me importa Raymond lo que me importa es que estás aquí estamos todos reunidos.

Después de llorar en los brazos de su madre y que está la entendiera sin menospreciarla su madre la hiso entrar en razón

-Hija la vida es un subibaja de emociones, pero debo decirte algo debes tomar una decisión nadie te juzgara por la decisión que tomes.

-Tienes razón mamá.

-Lo entiendo si quieres tomarte más tiempo solo toma el tiempo suficiente

-Ya lo decidí mamá.

-Cariño...

-Quiero quedármelo!

Su madre sonrió orgullosa y le dió un abrazo.

-Debemos decirle a tu padre ! -Dijo limpiándose una lagrima- Ahora ve a tomar un baño y ponerte algo lindo el está esperandote.

Fue a su antigua habitación donde todo estaba tal cuál la última vez y tomo un baño reconfortante para luego utilizar un vestido de pétalos rosados lista para ver a su padre.

Al llegar donde el estaba lo vio, vio al hombre del que no quedaba mucho aquel que la crío aquel derrame le había arrebatado la mitad de la vida apenas se movía y hablaba y la mitad de su rostro había perdido la movilidad como la mitad de su cuerpo.

Yacía sentado y ella se acercó con mucho amor.

-Papá, papá no te imaginas lo mucho que te extrañe

-Ray...mond

Las lágrimas brotaron en sus rostros.

-Hi..ja estaba esperandote

-Lo se estoy aquí y nunca más nos separaremos.

-Paradis sigue adelante por ti

-Es por ti papá ! Sin ti jamás lo hubiésemos logrado.

-Mi pequeña hija.