Pollito [ YM ]

Capitulo 18: La Popularidad del Pollito

Los días posteriores al incidente en la pastelería fueron una mezcla de nervios y expectación para Jimin. Cuando llegaron las noticias sobre su transformación, no fue de la manera que él había imaginado. En lugar de miedo o rechazo, hubo curiosidad y, sorprendentemente, un cálido recibimiento.

El primer día después de su revelación, la pastelería se llenó de clientes. El rumor se había esparcido como pólvora: “¡Hay un híbrido en la pastelería de SeokJin y NamJoon!” Las personas llegaron, no solo por los deliciosos postres, sino por la oportunidad de ver al “bonito pollito” que había capturado la atención de todos.

—¿Has visto a Jimin? —preguntaba un cliente a otro mientras esperaba su turno—. Dicen que es adorable. ¡Quiero conocerlo!

Jin y NamJoon intercambiaron miradas sorprendidas y divertidas al ver cómo la afluencia de clientes aumentaba. Las colas se formaban en la entrada, y la pequeña pastelería nunca había estado tan concurrida.

—¿Quién diría que tener un híbrido traería tanto negocio? —bromeó NamJoon, riendo mientras atendía a un grupo de clientes emocionados.

Jin asintió, sonriendo mientras llenaba una caja con pastelitos.

Mientras tanto, Jimin se sentía un poco abrumado por la atención. La primera vez que se acercaron a él, un grupo de niños, con ojos brillantes y sonrisas amplias, se acercó para verlo.

—¡Hola, pollito! —exclamó una niña, con el rostro iluminado por la emoción—. ¡Eres tan lindo!

Jimin sonrió, un poco tímido, y sintió el calor en su pecho. Aunque había temido que su revelación los alejaría, se dio cuenta de que, en cambio, había despertado un sentido de asombro en las personas.

—Gracias —respondió, sintiendo una oleada de calidez al ser aceptado de esa manera.

Los clientes comenzaron a pedirle que se tomara fotos con ellos, y Jimin no podía creer lo rápido que había cambiado su situación. A medida que pasaban los días, él se convirtió en una especie de estrella local. Los visitantes venían de lugares lejanos solo para conocer al pollito de la pastelería.

Una tarde, mientras Yoongi trabajaba en la parte de atrás, Jimin se sentó con un grupo de nuevos amigos en una mesa, riendo y charlando. Por primera vez desde que había llegado a la ciudad, se sentía realmente aceptado.

—No puedo creer que seas un híbrido. ¡Es increíble! —dijo una chica, inclinándose hacia él con curiosidad.

—No es tan diferente de ser humano. —Jimin sonrió, disfrutando de la conversación—. Solo soy un poco más... plumoso.

La risa llenó la habitación, y Jimin sintió que la tensión en su pecho se disipaba. Aquel lugar, que había temido se convertiría en un campo de batalla por su aceptación, ahora era su hogar.

Mientras tanto, desde la cocina, Yoongi observaba la escena con una sonrisa. Su corazón se llenaba de orgullo al ver a Jimin interactuar con los clientes. Cada vez que escuchaba su risa, su pecho se hinchaba de felicidad.

Sin embargo, no todo era perfecto. Aunque la mayoría de las personas eran amables y curiosas, había quienes no veían a Jimin con buenos ojos. Un par de comentarios despectivos de algunos clientes en un rincón del establecimiento hicieron que Yoongi frunciera el ceño.

—No sé por qué la gente tiene que ser así —murmuró, apretando los puños en la cocina.

Pero cuando salió a la sala de exhibición, Jimin estaba allí, rodeado de niños, jugando y riendo. Era como si ninguna de esas palabras hirientes pudiera tocarlo. Jimin había encontrado su lugar y se estaba convirtiendo en alguien especial para la comunidad.

—¿Todo bien? —preguntó Jimin al notar la expresión de Yoongi.

—Sí, solo... me molesta ver que algunos no te aprecian como mereces —respondió, sintiéndose un poco protector.

Jimin sonrió, con una confianza renovada.

—No puedo dejar que eso me afecte. Estoy aquí porque quiero ser parte de este lugar y de su gente. Además, tengo a mis amigos a mi lado —dijo, mirando a Jin y NamJoon, que estaban atendiendo a otros clientes.

Al ver esa determinación en los ojos de Jimin, Yoongi sintió que su corazón latía con más fuerza. La admiración que sentía por él se profundizaba a cada momento, y la idea de protegerlo no solo era una necesidad, sino un deseo.

Días después, la influencia de Jimin comenzó a hacerse notar más allá de la pastelería. Atraídos por su historia y valentía, otros híbridos empezaron a salir de sus escondites, sintiéndose inspirados por la confianza que él mostraba. En el barrio, empezaron a aparecer más híbridos, que antes se mantenían ocultos, mostrando sus verdaderas formas al mundo exterior. La gente, al ver a Jimin ser aceptado, comenzó a reconsiderar sus propias creencias sobre los híbridos.

Los murmullos se transformaron en conversaciones. Una familia que solía evitar a los híbridos se acercó a la pastelería con su hija, quien había escuchado sobre el “pollito”. La madre sonrió al ver a Jimin interactuar con su hija y, poco a poco, se dio cuenta de que las cosas podían ser diferentes.

—Quizás, solo quizás, no son tan distintos de nosotros —comentó la madre a su esposo mientras observaban.

El efecto dominó de la presencia de Jimin estaba claro, y el ambiente en la ciudad comenzaba a cambiar lentamente. Cada día, más híbridos se sentían motivados a salir, a compartir sus historias y a ser vistos. El mundo, que alguna vez se había mostrado como un lugar discriminatorio, estaba empezando a abrir sus brazos.

A medida que la popularidad de Jimin seguía creciendo, él también comenzaba a descubrir la belleza de la vida fuera de las sombras. Cada sonrisa, cada interacción, le recordaba que no estaba solo en este mundo.

Mientras la popularidad de Jimin seguía creciendo, él también comenzaba a descubrir la belleza de la vida fuera de las sombras.

Y con cada día que pasaba, la conexión entre él y Yoongi se fortalecía, llevándolos a ambos hacia un destino lleno de posibilidades.