Mis amados esposos.

30.-enseñando.

Alicia se puso frente a su familia en la mesa.

-lo he pensado y... necesitamos mucho dinero para este tiempo de crisis, sinceramente no quiero que ustedes se queden sin dinero y recursos...así que he decidido ir a cazar y pescar dos días enteros.-

En aquella mesa se formo un silencio sepulcral, incluso Charlotte se quedó callada y con una mirada sería.

-quedan cuatro días ¿y tú quieres ir a cazar dos? ¡¿De que mierda me hablas?!-

Boreal acostado grito.

-se que es injusto, pero mi prioridad es dejar dinero para que puedan sostenerse... aunque también se perfectamente que ustedes pueden cazar por si mismos, pero quiero disminuir esa opción.-

-exacto, nosotros podemos cazar no tiene sentido que te vayas-

-todos menos Oro-

Oro ajeno a la pelea volteo a sentir miradas sobre el.

-el viaje tiene dos propósitos, conseguir recursos y enseñar a Oro a defenderse y cazar.-

-¡¿Porque tendría que hacer el trabajo de una mujer?!-

-¡Porque va a haber una guerra estúpido!-

Todos quedaron en silencio la última declaración había hecho eco en todos.

[...]

-bien regresare en dos días.-

Alicia llevaba dos hachas, dos cuerdas y su nuevo arco.

Oro llevaba cinco cambios de ropa, una gran bolsa con productos y muchos Vegetales.

-vas a ir a cazar ¿para que quieres llevar esa mierda?-

-eres prostituto que vas a saber-

-¿Porque solo lo llevas a el?-

Ethan no estaba nada contento con la noticia de llevar a Oro, y aún más el no poder ir.

-porque florecita se encargará de la casa y que no mueran por intoxicación, huroncito tiene el pie lastimado y Charlotte es muy pequeña para que ambos vayan mi querido duvalin.-

Ethan hizo una mueca.

-bien entonces ten cuidado estaré esperandote-

Ethan acaricio la mano de Alicia, pero Caspian se acercó y la besó en los labios.

-yo también esperaré a mi amada esposa-

-¡eh el aprovechado es el doble cara, no cambien puestos!.-

[...]

Alicia partió hacia el bosque con Oro, el cual se quejaba del ambiente.

-espero que los mosquitos se existingan dolorosamente, malditos cabrones de mierda-

-no te preocupes de los mosquitos monedita, después de pasar ese árbol la mayoría se van-

-¡¿Enserio?!-

-si, pero empiezan las avispas-

Alicia río al ver la cara pálida de Oro, pero un sonido la alertó, tal parecía que habían invadido el territorio de un oso.

-mierda, monedita disparare una flecha a su ojo y tú vas a subir lo más que puedas al árbol, te daré una hacha.-

-¿Y mis cosas?-

-bueno es tu vida o tus cosas...-

Alicia con rapidez lanzo la flecha al ojo del oso el cual grito del dolor, momento que aprovecho Alicia para poder enlazarlo y subirse arriba de el.