¡Yuki!

I

Espero que disfruten la historia. El primer capítulo es algo corto, pero quería lograr una lectura fluida, probando una narración bien hecha con la ayuda de mi hermana, que sabe de este tema. Sin más que decir, disfruten el capítulo.

14-04-2019

No sabía en qué momento su vida se había vuelto un desastre por completo. Se sentía cansado; escuchar a sus padres discutir diariamente lo agotaba. Al principio, trataba de ignorar las peleas y culpaba el trabajo pesado que ambos tenían. Sin embargo, todo cambió cuando escuchó una de esas tantas discusiones.

—Se ha vuelto un maricón, y todo es por tu culpa, Sergio —dijo el japonés, señalando al de pecas—. Pasa todo el tiempo al lado de ese chico francés y sonríe como un estúpido. ¿Eres consciente de que bajó sus notas desde que se junta con él? —preguntó con molestia al ver que tenía la atención de su pareja.

—No tiene nada de malo que tenga un amigo; Estoy feliz de que por fin esté hablando con alguien más que Piastri —respondió Sergio, intentando mantener la calma y evitar una pelea—. De todas formas, sus notas siguen siendo buenas. Deberías estar orgulloso de tu hijo, Kamui­-

Decidí alejarme de la cocina; no quería escuchar nada más. Aunque odiaba la idea de dejar a papá Checo solo con papá Kamui, en ese momento no podía soportar el sentimiento pesado que sentía en la boca del estómago, que me hacía tener ganas de vomitar solo de pensar en la posibilidad de decepcionar a mi padre.

Me adentré en mi habitación y me dirigí nuevamente al escritorio, intentando concentrarme en el estudio, pero simplemente no lo logré. Mi mente seguía dando vueltas a las palabras que había dicho el japonés. ¿Acaso le daba asco que tenía un amigo tan cercano como Gasly?

20-02-2020

No lograba comprender; su mente no podía aceptar lo que estaba escuchando. Su padre lo había llamado a la planta baja para hablar de algo importante, pero aquellas palabras lo habían dejado totalmente abrumado. No entendía cómo, después de solo unos meses de haberse separado de papá Kamui, su padre ya le estaba diciendo que salía con alguien y que, ese mismo fin de semana, iba a conocerlo.

—No quiero conocerlo... no me interesa conocer a ese tipo —solté frustrado, levantándome del sofá en la sala, listo para huir a mi habitación.

—¡Yuki! —escuché que mi padre gritaba justo cuando ya había dejado la sala, dejándolo solo.

Solo pude cerrar la puerta y dejarme caer sobre mi cama. Mi cabeza estaba llena de confusión. No entendía por qué había reaccionado así; No tenía nada de malo que mi padre siguiera con su vida, pero aún me resultaba difícil aceptar que mis padres se habían separado.