╚≫𝗣𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿𝗮 𝗽𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝗣𝘀𝘆𝗰𝗵𝗼𝗽𝗮𝘁𝗵𝘆 ║𝗦𝗮𝗻𝘇𝘂 𝗛𝗮𝗿𝘂𝗰𝗵𝗶𝘆𝗼. 𝗘𝗿𝗮 𝗱𝗲 𝗧𝗼𝗺𝗮𝗻 𝘆 𝗕𝗼𝗻𝘁𝗲𝗻
╰─➢Dos personas, juntadas de manera remota por el universo cada ciertos años, conocidos desde hace tanto tiempo, pero sólo...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Definitivamente ya no me gustan las misiones de Bonten, debí haber dejado que solo ellos tres vayan, había llegado ya el día donde nos tuvimos que infiltrar en la reunión de aquella organización y matarlos a todos, y vaya que se puso como película de acción.
—Hijo de puta! Me dio en todo el brazo!—grito Rindou, estando detrás de la barra de bebidas, fui rápidamente a su lado sin ser vista, vi como se su brazo empezaba a salir sangre, mire por todos lados para ver algo que ponerle, no había una mierda.
Me corte como pude una parte de mi vestido, apretando aquella zona para detener el sangrado.
—Ten cuidado! No nos podemos permitir a otro herido, son como 30 más que nosotros—respondí, pegué mi espalda al barra, mirando de reojo a un hombre delante mía que estaba disparando en otra dirección.
Aproveché el momento, disparo limpio justo en la cabeza, me quedé mirando como caía, sintiendo como Rindou me agarraba del brazo para que me vuelva a esconder.
—Tu también ten cuidado, te podrían haber dado un tiro en medio de los ojos en esos segundos.
Asentí con la cabeza, viendo de reojo como la mayoría ya estaban en el suelo, Ran estaba detrás de una mesa a metros de nosotros, nos saludó con una sonrisa, girándose al segundo para disparar.
—Donde está Sanzu?!—grite, casi sin poder escuchar por el sonido de los disparos, agache la cabeza al ver como le habían dado a una botella de cristal que estaba sobre la barra y casi nos abre la cabeza a los dos.
—Está allí!—dijo, señalando, a lo lejos pude ver a Sanzu disparando una vez tras otra, como si fuese inmortal para ponerse al menos detrás de algún pilar.
—Ten cuidado!—vi como dejaba de disparar, quedándose sin balas, se escondió detrás del pilar, mirándolos con una sonrisa como si esto fuese la actividad más divertida del mundo.
—Rindou!—gritó Ran, el nombrado rápidamente disparó hacia el último que faltaba, dejándolo en el suelo agonizando de dolor.
Los cuatro nos acercamos al hombre, mirándolo desde arriba, se veía tan asustado que se desmayó al momento, ni siquiera tuvimos tiempo de hacerle algunas preguntas.
—No jodas, tendremos que llevarlo con nosotros así?—preguntó Sanzu, señalándolo, Ran se encogió de hombros, sabiendo que Rindou estaba mal del brazo y yo no tenía la fuerza como para agarrar a un hombre de casi dos metros.
—Me manche el vestido, que asco..—dije, viendo como estaba medio roto y además con sangre sobre él, mirando a los demás frustrada.
—Ya entendí el porqué te llaman Ángel Sangriento, vamos, no me siento muy bien—hablo Rindou, caminando detrás de los dos chicos, mire por unos segundos a mis alrededores, estaba todo hecho un desastre, nunca imaginé acabar metida en estas cosas.