Pete: (sonriendo mientras abre la puerta) ¡Khum, bienvenida!
Khum: (entra dramáticamente, llevando una mano a su pecho) ¡Bebeeee! ¿Cómo estás? ¡Casi muero de la angustia cuando me dijeron que habías muerto! ¡No te atrevas a dejarme solo en este mundo cruel!
Pete: (le sonríe y le da un abrazo) Tranquilo, todo está bien. Gracias por preocuparte.
Pete: (mirando a Vegas con una sonrisa) ¿No tienes algo que decir, cariño?
Vegas: (con una leve sonrisa, alzando una ceja) Bienvenido a mi hogar, Khum. Aunque con tanto espectáculo parece más tuyo que mío.
Khum: (llevándose teatralmente una mano a la frente) ¡Ah, cómo sufro! ¡Tanto tiempo sin verte y así me recibes! (y le da un manotazo juguetón en la cabeza a Vegas) ¿De verdad pensaste que te librarías de mí tan fácilmente?
Vegas: (fingiendo frustración) ¡Eso dolió! Recuérdame por qué no te he matado todavía...
Top: (ríe y le da una palmada en la espalda a Vegas) Vamos, Vegas, deja de hacerte el duro y ven a ayudarme. Sabes bien que extrañabas a mi esposo.
Macao: (se acerca con curiosidad) ¡Hola, Khum! A ver, ¿dónde está el bebé? ¡Déjamelo ver!
Khum: (señalando a Top y suspirando con aire de mártir) Está en manos de Top... ¡mi pobre angelito, lejos de mí!
Macao: (acercándose con ternura) Ay, pero míralo... ¡es tan pequeño! (mira el bebé con adoración)
Venecia: (sonríe y asiente) Es precioso, Macao. Tan chiquito y ya rodeado de tanto amor y drama.
Macao: (mientras acaricia la manita del bebé) Es un angelito. Tan frágil... (mira a Khum)
Khum: (con falsa modestia) Haré mi mejor esfuerzo por enseñarle a ser tan encantador como yo. ¡Alguien tiene que darle un toque de glamour a esta familia!
Macao: ahora regreso (corriendo de un lado a otro, llamando emocionado) ¡Estiche, Estiche! ¿Dónde te has metido? ¿Qué estás haciendo?
Estiche: (levantando la vista de un libro, sonriendo tranquilo) Aquí estoy, amigo Macao. Estoy leyendo un libro que me regalaron mis hermanos.
Macao: (tomándolo de la mano, lleno de entusiasmo) ¡Ven, ven conmigo! Quiero que conozcas a mi primito. Es tan chiquitito, te va a encantar.
Estiche: (cierra el libro y se levanta con una sonrisa) Está bien, amiguito. Vamos a conocer a tu primito.
Al llegar al cuarto, Estiche observa al bebé con asombro y ternura. Sus ojos brillan, y una suave sonrisa ilumina su rostro, reflejando su bondad e inocencia.
Estiche: (en voz baja y llena de dulzura) Es tan pequeño... y tan lindo. Como un becerrito que teníamos en el ranchito.
Vegas: (riéndose y aprovechando el comentario) ¡Uy, Khum, te dijeron vaca! Muuu... (hace el sonido de una vaca y sigue riéndose) ¡Mira nomás a mi vaquita Khum!
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FUEGO Y DESEO: EL DRAGÓN DOMINANTE (V+18P)
RandomDonde el dolor y el deseo se entrelazan, creando un placer que solo los valientes se atreven a explorar........