Who's the winner? N.H #wattys2015

Obsesión.

Narra Niall:

Esa noche, me quedé dormido junto a _____ en la cama de la gran habitación. Una moderna cama con sábanas blancas de madera negra y lisa. Ella aún dormía, pero yo seguía viendo la ventana la forma en la que afuera iba amaneciendo poco a poco. No se escuchaba ningún otro sonido más que las avecillas cantando al amanecer, si cerraba mis ojos, con la imágen de ese gran monte verde con un cielo amaneciendo detrás; una sonrisa se formaba en mis labios, hasta que _____ se movía y me veía obligado a volver a la realidad.

Me gustaría decir que era como antes, cuando ella se dormía sobre mi pecho y no existía nada más en el mundo que ella, no quería hacer nada para molestarla y lo único que me invitaba a mantener mis ojos abiertos era mirarla. Ya no es así, no puedo pretender que volverá a ser así. Estoy asustado, apenas conozco a esta chica ya que el tiempo la cambió, lo sé. Algo me huele mal, para empezar, ella no hubiese venido a mi con un problema tan grande, Walter sabría de esto... Pero basta Niall, debes confiar en ella. Tal vez, es miedo a que todos en quienes confiaba mintieron, ya no es así tal vez.

-Hey- sonó su ronca voz mañanera y le sonreí.

-Hola- contesté y luego el silencio. De verdad me asusta la idea de que está embarazada, es decir, no sé nada con respecto al tema, y en sí, no se si imaginarme a un tierno bebé o a una _____ sometida a vivir de mi dinero, sin luchar por sus sueños... si no que, abandonando todo- ¿Quieres desayunar?- pregunté y asintió dándome la espalda y acurrucándose en las sábanas. 

Me levanté sintiendo el frío en solo segundos, fui al baño donde me di una corta y rápida ducha, para luego ponerme mis vaqueros de todos los días y un sweater negro sobre una remera blanca. Ella aún estaba en la cama, así que fui a la cocina para prepararle unas galletas con tostadas y leche.

-¿A dónde vas?- preguntó su voz que me sobresaltó haciéndome tirar las galletas al suelo.

-Mierda- dije suspirando- a ningún lado ¿por qué?- pregunté sentándome en la mesa y ella se quedó parada en ese lugar, mirandome fijo- De acuerdo- admití dejando la galleta- iré al bar.

-¿Qué?- preguntó frustrada- ahí está esa zorra.

-No la llames así- dije en su defensa, casi que subiendo el tema.

-¡Siempre la defiendes!- gritó dejando que la voz se quiebre.

-¡Pues porque es la única que me acompañó!- grité sobre ella y se me quedó mirando, su rostro se ponía cada vez más rojo de la furia y apretaba sus labios- Ya, sabes que- dije bajando el tono ya que, no le hace bien para el embarazo el estres y sentirse así. Le dediqué una sonrisa y su calmó- Iré para renunciar- me levanté y caminé frente a ella, tomándola de los hombros- todo estará bien ¿si?- besé su frente y la abracé.

-Gracias- dijo en mi pecho mientras en realidad, yo no me sentía tan bien. 

Enseguida que pude irme de esa casa, me sentí de una forma más tranquilo. Así como poder respirar y escuchar música tranquilo.

Me pasé por el bar donde ayudé a Danielle con un par de cosas en el almacén.

-Y no lo sé- estaba diciendole mientras me alcanzaba unas cajas para que las coloque en pila sobre un estante- Ella parece ser la misma, pero cuando habla- me quedé mirando una caja- es otra cosa...- miré a Danielle y abrió su boca- No sé que hacer Dani...- dije y acomodé mejor las cajas.

-Miente- dijo una delicada voz en un susurro y miré enrgeticamente a Danielle.

-Hablaste- contesté emocionado y ella sonrió mirando al suelo- Danielle ¡Hablaste!- chillé feliz tomándola de los hombros mientras ella rascaba su nuca.