Capítulo 32 - Aún faltaba algo

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P.O.V. María


Después de esperar más de media hora sentada en el banco, por fin veo que Pablo sale de la discoteca. Me levanto rápidamente y sonrío tras ver el rostro que él muestra.


- ¿Ya?-dije besando sus labios.


- Ya. ¡Somos libres!


Pablo me cogió en brazos y comenzó a dar vueltas haciéndome reír. Después de unos segundos, Pablo me bajó al suelo y cogió mi mano. Comenzamos a andar dirección a casa y, aunque aún no estaba del todo convencida, sentía que aún faltaba algo para que fuera todo perfecto... Solamente algo.


- ¿Sabes? Tengo una sorpresa para ti, sabía que hoy íbamos a ser libres y... Qué mejor que celebrarlo con una sorpresa.


- Sabes que me encantan las sorpresas-dije ilusionada- Pero no sé si será buena idea aho...


Pablo besó mis labios sin dejarme acabar la frase. Vale, tenía que darle una oportunidad a la vida, todos los cambios son positivos y todos los cambios suceden por algo... Gritemos que la vida es bonita aunque esté del revés.


- Por fin-dijo Pablo entrando en casa.


Detrás mío, me ayudó a quitarme la chaqueta sin problemas y la dejó en el respaldo de la silla que se encontraba en la entrada.


- Tengo que preparar la sorpresa- dijo mordiendo su labio inferior- Cuando acabe te aviso.


- Vale-exclamé.


- Pero prométeme que no vas a mirar... Que te conozco.


Arqueé mi ceja izquierda y reí tras ver que lo decía totalmente en serio.


- ¡Está bien! Está bien... Me voy a mi cuarto.


Corriendo como una niña me adentré en mi cuarto y cerré la puerta para que Pablo confiara en mí. Me dejé caer sobre la cama y comencé a mirar el techo sin pensar en nada... O, mejor dicho, pensé en qué podría ser esa sorpresa.


- Vale, ya puedes venir-gritó Pablo desde el salón.


Me levanté de la cama y salí en busca de aquella sorpresa.


- De pequeño me gustaba jugar a esto-dijo riendo- Así que... ¡Busca el tesoro perdido, princesa!


Comencé a reír tras oír sus palabras. De pequeña también jugaba a esto con mi padre, siempre que él tenía guardado para mí una bolsita de chuches, jugábamos a esto para que fuera más divertido y pasáramos juntos el tiempo.


Comencé a recorrer el salón mirando por encima todos los muebles por si veía algo extraño a simple vista. Después de estar un largo rato pensando en los escondrijos donde pudiera estar la sorpresa, decidí empezar a abrir los cajones, y no recibí recompensa por ello.


- Caliente... Cada vez te acercas más...-escuché a Pablo susurrar.


Miré por las estanterías y fijé mi mirada en una foto mía y de Pablo. Miré a Pablo que él me observaba convencido de que sabía que ahí estaba el premio... Y así era, sabía que estaba ahí solamente sabiendo lo bueno que es conmigo. Cogí el marco de la foto y le di la vuelta, un sobre se encontraba pegado con un poco de celo.


- No me lo puedo creer-dije emocionada al ver el mismo sobre donde estaban mis antiguos billetes de París.


- Está claro cuál es la sorpresa, ¿no?


Tapé mi mano sonriendo y asentí sabiendo lo que era. Sin abrir aún el sobre, me abalancé sobre Pablo y besé tiernamente sus labios.


- Te quiero, te quiero, te quiero.


- El avión sale mañana.


- ¿Mañana?-dije ilusionada.


- Mañana.


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¡Hola familia!
Lo primero de todo... Siento muchísimo haber subido tan tarde este capítulo :( Tenía escrito solamente el comienzo del cap y no se me ocurría cómo seguirlo... Aún así no estoy del todo satisfecha con el final que lo he acabado así sin más. Lo siento muchísimo de verdad. Para el próximo capítulo os prometo por Pablito que será mucho más largo que este :)
¡Gracias por todo! Un beso fuerte :)

Sin ti yo me pierdo [Pablo Alborán]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora