Christopher
Nicholas yace dormido sobre mi pecho desnudo mientras los mellizos ocupan un espacio a cada lado de mi cuerpo.
Mientras que Owen superó la etapa de mirar mal a su hermano cada que está en brazos de su madre o cerca, erróneamente dimos por hecho que sencillamente no podría ser peor. Actualmente quiere sacárselo de encima a toda costa, desafiando nuestra autoridad y manipulando a Rachel con cada método que él considera infalible. Se nos dificulta lidiar con él en ocasiones, pero sabemos que es mejor esto, a que el nuevo bebé hubiera sido una niña, y tener que tratar a la criatura satánica que es Milenka a base de límites con promesas de castigos severos y un sinfín de advertencias.
Descubrimos que presenta reacciones violentas gracias a un acercamiento accidental semanas atrás. Rachel tuvo un antojo que, por mi parte, obligatoriamente debía complacer —no por gusto, sino por conveniencia— así que tomé a nuestra hija, que se abstenía a dormir como una pacífica y obediente niña de su edad, y la llevé conmigo. Estábamos en uno de los pasillos del maldito supermercado a las 2:00 am rodeados de gente cuando una cría un par de años mayor que ella tropezó conmigo. La niña desconocida me sonrió como disculpa, pero antes de que alcanzara a largarse, Milenka se le fue encima como una fiera. No necesitó más que eso. Tiene dos años, pero en ese momento parecía una adolescente desquiciada. Solo alcanzó a arrancarle un mechón de cabello a la otra niña, sin embargo, fue suficiente para darnos cuenta de que era algo que debíamos dedicarle atención, a pesar de que sigue siendo muy pequeña, y que la probabilidad de que haya sido un simple berrinche es realmente alta.
Ignorando deliberadamente la opinión de la psicóloga entrometida amiga de Rachel, mi hija no asistirá a terapias ni mucho menos se verá forzada a aprender técnicas de relajación para garantizar la felicidad de los otros. Si en el futuro el TEI (trastorno explosivo intermitente) se manifiesta, personalmente no quiero que se «cure». Me haré cargo de enseñarle distintos métodos para que ella consiga canalizarlo como desee, no como la sociedad y los médicos lo impongan.
Si es de su necesidad salir a la calle y arrancarle el cerebro con las uñas a cualquiera que se le plante enfrente personalmente me haré cargo de limpiar el desastre. Sin reprimendas, sin decepciones, sin falsos prejuicios convencionalistas.
Opté por llevarla conmigo una vez por semana a la central para probar sus habilidades. Descubrí que sometiéndola a provocaciones graduales responde de forma muy similar a la reacción que tuvo aquella noche. Posterior a sus alaridos recurre a los puños como un mecanismo ineludible para sí misma. Apenas consigue formar oraciones largas, pero un fuego conflictivo vive en ella.
Le gusta el combate, la violencia y el poder que le proporciona manejar una situación. Es salvaje, y obstinada. Al paso que lleva se convertirá en alguien letal, más de lo que cualquiera es capaz de imaginar.
De igual forma, entreno con Owen, que parece tener una afinidad hacia la planeación detallada, la complejidad que requiere y lo práctico que le resulta sin importar los diferentes escenarios con los que está obligado a lidiar. No es de respuestas físicas como su hermana sino de trazar primero y reaccionar después. Es más como el cerebro, y Milenka el músculo.
Momentáneamente entrenan por separado, pero pronto lo harán juntos, que sean hermanos mellizos no significa que deban hacer hasta la más mínima cosa juntos, necesito la independencia de cada uno. Deben saber desempeñarse en equipo, pero también por separado. Eso los hará invencibles.
—¡La cena ya está lista! —anuncia la mujer con la que me casé, apareciendo de pronto.
Trae el cabello sujeto en un moño desordenado hecho sin cuidado, un delantal manchado de lo que asumo son distintas especias y las mangas de la camisa remangadas hasta los codos.
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✯𝑭𝒂𝒏𝒇𝒊𝒄𝒔 𝑪𝒉𝒓𝒊𝒔𝒄𝒉𝒆𝒍✯
Фанфикшн«Somos 𝒍𝒂𝒔𝒄𝒊𝒗𝒊𝒂, somos 𝒍𝒖𝒋𝒖𝒓𝒊𝒂 y somos 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐. Somos 𝒍𝒐𝒔 𝒎𝒂𝒍𝒐𝒔 que no le envidian nada a 𝒍𝒐 𝒃𝒖𝒆𝒏𝒐» - - - - - - - - - - - - -
