Capitulo 38

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Suena el despertador. ¿Por que odio tanto el madrugar? No lo se. Es lunes y aun sigue aqui Ruben, a mi lado. Despues del maravilloso fin de semana, no quiero volver a la rutina de todas las semnas, pero no se que me hace sentir que con el a mi lado, no va a ver una rutina, como antes, en mi pasado. Miro a mi izquierda y le veo dormido, con media sonrisa de lado. Sonrio inmediatamente y me tapo los ojos con la parte de dentro del brazo derecho, mientras me rio como idiota. ¿Que me hace?. Le vuelvo a mirar y me acerco a el y me acerco aun mas a sus labios tan carnosos.

-¿Que me haces, Ruben?- susurro-.

Le doy un beso y me levanto de la cama. Voy al vestuario, miro la ropa. Opto por lo mas basico, siempre es lo mejor. Cojo una falda de tubo negra, qu eme llega hasta las rodillas, una camisa blanca y unos tacones negros mate. Ya elegido, me voy a la ducha. Tardo poco aunque tengo que lavarme el pelo. Salgo y me seco el pelo y me lo plancho. Perfecto. Me visto y bajo a la cocina. Miro la hora. Las ocho y cuarto. Voy bien. Cojo una taza y me preparo un cafe con leche, para comer me hago una tostada con mermelada de melocon. Como me encanta ese sabor de mermelada. Me tomo el desayuno tranquila, mientras miro e-mails y voy adelantando trabajo que tengo del dia. Nueve menos cuarto. Recojo la taza y la meto en lavavajillas. Subo las escaleras y me acerco a la cama, donde esta Ruben. Esta estirado, con la cabeza girada hacia la derecha, con la boca un poco abierta, suficientemente abierta para poder ver sus perfectos dientes. Tiene la sabana a su alrededor de su cuerpo, pero se puede ver su cuerpo delgado pero con un poco de forma que hace que se vean sus abdominales. Me acerco sin hacer mucho ruido, por los tacones. Le doy un beso en la boca. Y noto que agarra de la cintura y me tira a la cama con el. 

-¡AH! -grito-.

-Buenos dias.-dice sonriendo-.

-Buenos dias.

-¿Te vas ya?

-Por desgracia, si.

-Podrias pedir el dia libre. -doce con cara de perrito abandonado-.

-Podria, ya lo has dicho, pero creo que he faltado mucho ultimamente y no quiero faltar mas.

-Buuuuueno.

Sonrio y le doy un beso. Me levanto de la cama, pero el se queda tumbado y me mira, mientras yo me plancho un poco la falda y me peino un poco. Me acerco a el.

-Luego nos vemos, cielo.

-Adios, cariño.

Me da un beso y me voy a coger la americana. Bajo las escaleras. Cojo el maletin, el movil, las llaves del coche y de casa y me voy. 

Con derecho a besarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora