Cerré con fuerza la puerta tras de mí, en su cara. Era un idiota, un salvaje un... Agh me mandarían presa por solo decir esa palabra. La puerta se abrió y entró algo tímido, cogí mi móvil que se encontraba al lado de un jarrón. En mi intentó de alcanzarlo Harry cubrió su cara con ambas manos ¿Acaso me tiene miedo? Negué con la cabeza chequeando los mensajes.
Todo el caminó le redacte el diccionario completo de groserias. ¿Porqué tenía que meter la pata? Corrección ¿Porqué tuvo que meterme en la jaula con los animales? Es exagerado que me enojé por eso pero es que... Le pedí que no lo hiciera y aun así no le importó. Ahora perdí mi libreta, las pocas cosas que logré anotar se fueron a la mierda o mejor dicho la tiene un chimpancé con grandes ojos aterradores.
Subí a mi habitación y leí el mensaje de Justin.
*Te recogere a las ocho.
Recuerdo muy bien cuándo le dije sin pensar si quería salir... Como conocidos, claro nisiquiera llgamos a ser "Amigos", apenas lo conozco. Miré mi reloj y solo faltaban 10 minutos, no tenía tiempo de ducharme. Bufé y me puse de pié, cambié mi falda por un jean y recogí mi cabello en una trenza cocida.
Bajé las escaleras para esperar a Justin en el jardín. Necesitaba aire. Antes de tomar la perilla para abrir la puerta la voz del causante de mis recientes problemas habló a mis espaldas.
-¿Dónde vas?- gire y estaba cruzado de brazos con um hombro apoyado sobré la pared.
-Voy a salir.
-¿Con Niall?- negué- ¿Victoria?- volví a negar, frunció su seño- ¿Louis, Liam... Zayn?
-No, no y... NO- eleve un poco el tono de mi voz.
-¿Se puede saber con quien?- vacilé un segundó sin saber si responderle o no.
-Si- Asenti sonriendo- Justin.
-¿Es un chico?
-Daf si- dije obvia- al menos que oculte su feminidad muuuy dentro. En ése caso lo hace espectacular- moví mis manos- porque es guapísimo- sentí como sus músculos se tensaron.
-No saldrás con él- dijo entré dientes, yo solo reí.
-¿Quién eres para prohibirmelo?
-Harry
-No habló de eso- rodé los ojos y una bosina de ollo a los lejos- no haré nada malo... Ahora.
Salí de la casa sin escuchar sus últimas palabras. Algo muy... Muy dentro de mí deseaba ponerlo celoso, talvez asi consiga la verdad mas rápido. Por otro lado ¿Si me equivocó?.
Dejé mis pensamientos de lado y sonreí a Justin que me esperaba junto al vehículo, el mismo que utilizaba la primera vez que lo vi. Lo saludé y emprendimos marcha a quién sabe dónde, su tema de conversación era un poco aburrida por lo que término poniendo la radió.
El auto aparcó fuera de un hospital. Fruncí mi seño con miles de preguntes que hacer y lo miré.
-Sólo sígueme. Ya veras- Sonrió, mordí mi labio inferior, su sonrisa era linda pero no se comparaba en nada a la del rizado.
Avanzamos por los pasillos rápidamente, Justin saludaba a la mayoría de personas con las que nos encontrábamos. Llegamos a una puerta blanca, sacó una tarjeta del bolsillo de sus jeans y la deslizó en un aparato, un sonido proveniente de la puerta hizo que se abriera. Brujería. Miles de dibujos estampados en la pared me llamaron la atención, ya no se trataba de aburridas paredes blancas. Supongo que este es el piso de los niños.
Llegamos al final del pasillo dónde una extensa sala llena de niños con diferentes problemas nos esperaba. Todos sonrieron al ver a Justin y se acercaron abrazarlo mientras el los recibía con una gran sonrisa.
-Jess, acercate- me dijo e hizo un gestó. Mis pies se movieron duros como piedras hasta llegar a su lado. Todas las miradas estaban sobré mí- ellos son mis niños... Bueno en realidad soy solo un ayudante per...
-Son hermosos- llevé las manos a mi boca. Por un lado se me destrozaba el alma por ver aquellos niños posiblemente al borde de la muerte y por otro lado... También se me destrozaba el alma porque la mayoría estaban solos.
-Bueno chicos ¿Que hacen? preséntensen- dijo con un tono mandon. Reí, los trataba como si fuera su padre.
Esos niños eran ángeles caidos del cielo, me hicieron jugar, cantar karaoke, modelar y hasta ¡Carrera en sillas de ruedas! Cómo siempre termine siendo la perdedora.
Tuve que volverme en contra de mi voluntad, casi llore cuando anunciaron que los chicos debian dormir.
Me encariñe con Anabella, Ana. Es una hermosa niña de ojos azules y cabello castaño. Tiene tumor en los pulmones y por su pequeña nariz cruza un tubo de oxígeno, es una luchadora. Prometí volver un día.
-¿En que piensas?- la voz de Justin me sacó de mis pensamientos.
-Nada en... Ana- recargue mi cabeza sobré el respaldar del asiento mientras veía cómo las luces de la ciudad pasaban fugaces por nuestro lado. Estábamos caminó a casa.
-Es una buena niña- asentí.
-Es maravillosa- reí- aun no puedo creer que alguien como TU- lo señala- que recoge a una extrña en plena noche, trabajé con esos lindos niños. Me sorprendes.
-No trabajo. Lo hago porque es algo que me gusta y... Con respecto a lo último, el día que te vi sabía que algo no estaba bien- estaciono el auto en frente de la casa. Oh no Harry- y traté de ayudarte. Luego que me contaste lo de tu amnesia- frunció sus labios moviendo su cabeza a cada costado- todo cobro sentido.
-Que bueno que hayas sido tu y no otro- reí- ¡Justin!- llamé su atención- fue un placer acompañarte a tu no-trabajo, esperó algún día vover a ver los niños y... A ti.
-Eso sería fantástico. A ellos también les agradaría volver a verte.
-Cuándo quieras- suspire mirando por la ventana- debo irme. Adiós- le di un besó en la mejilla y salí con mi destinó ya marcado.
(....)
Tomé una galleta que se encontraba sobré la mesa, al parecer no había nadie, desdé que llegué a casa no hay señal de vida ¿Harry habrá muerto? Asomé mi cabeza a la escalera. Nadie.
El ruido de la puerta delantera llamó mi atención, recorrí el poco espacio que separaba la sala de la cocina y lo que vi me dejó en un completó shock. Harry sin camisa, pantalones cortos, de hombre y sudor callendo de su cabello haciendo un largó recorrido por su abdomen bien, espetacular y perfectamente formado. Mis ojos abiertos como plató y mi boca formando un gigantesco O pareció jugarle gracia porque se rió.
-Yoyoyo...- comencé a tartamudear.
-¿Cómo la pasate con Justin?- se acercó alterando aun mas mis nervios.
-¿Jujustin?¿Quién es Justin?- tragué la poca galleta que quedaba en mi boca hasta que logré recuperar un poco de sentido- ¡Justin!- recordé- genial.
-¿Te cae bien?- tensó su mandíbula y luego sonrió de costado. Maldita sonrisa. Oww mirá sus oyuelos.
Malditas hormonas, maldito chico irresistible al que odio, maldita forma de odiar y bendita mujer que engendró tanta belleza.
Si no aprovechaba esta situación sería un total fraude. Perdóname Dios, perdóname por lo que voy a hacer.
Torcí mi pie a propósito fingiendo un chillido y un proximo golpe con el duro piso. Pero como lo supuse antes de hacer contacto con el concretó caí sobré los brazos de morfeo.
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Aca actúa mas como una niña lose...jajajaja
Ah Justin pueden imaginarlo como quieran, si quieren que sea Justin Bieber, nose. Comenten si quieren que ponga algo en la novela.
No se baño sucia ahno jaja
Ah y gracias. <3
