Su voz ronca sonó como una dulce melodía para mis oídos. Bien, en este momento tengo dos opciones, correr hasta estar completamente segura de haberme alejado de el o girarme y enfrentarme a directo a sus ojos. Por un lado no tengo donde ir, estamos en el medio de la nada y la nieve no me permitirá avanzar tanto. Apreté mis puños mientras tomaba una profunda respiración, cerré mis ojos con fuerza como si eso me permitiera desaparecer.
-¿Esta bien?- se vuelve a oír- oye...-su voz se quedo en silencio cuando me gire, si, lo hice. Lo primero que vieron mis ojos fueron los suyos, su tamaño cambio tan pronto me vio. Podría jurar que mi corazón en este momento se encontraba en una constante carrera, entreabrió sus labios para hablar pero los volvió a juntar en silencio. Giro su cabeza unos grados a la izquierda y trago saliva.
-Hola- susurre haciendo un mueca con mis labios tratando de que parezca los mas cercano a una sonrisa.
-Jess- dijo en el mismo tono en el que había hablado anteriormente-¿Qué... que haces aquí?- lo primero que se me ocurrió fue elevar mis manos a los aires, la carpeta que sujetaba entre mis dedos me hicieron recordar la verdadera razón por la que estaba allí.
-Trabajo- bien, esa no fue la mejor respuesta de todas, podría haberlo echo mejor.
Su semblante expreso un cierto desconcierto -Oh- frunció su seño- emm...
-No te preocupes- retrocedí unos pasos- puedo irme si eso es lo que... deseas.
-¡No!- su respuesta me hizo exaltar parpadeando varias veces- puedes pasar- se aparto de la puerta indicando la entrada con un ademan, dude unos segundos hasta que asentí y camine hacia el interior. Su aroma llego a mis fosas nasales al instante que pase por su lado, sus ojos no se despegaban de los míos, al igual que lo míos de los de el. El miedo gano haciendo apartar mi vista- puedes esperar en el sofá, voy por un café- volví a asentir y me senté, sintiendo la suavidad del mismo. Un bulto rápido que venia en mi dirección llamo mi inmediata atención, Aceituna.
-Hermosa- me levante a acariciar su cabeza, me incline hacia atrás cuando empecé a recibir afecto de mas de parte del animal- ¿Cómo has estado?- sacudí sus orejas.
-Bien- mire a Harry parado junto a la puerta con una taza de café en cada mano- y...¿A qué trabajo te refieres?- apoyo ambas tazas sobre la mesa ratonera.
-Oh- me puse de pie sacudiendo mis pantalones, fui hasta la mesa y cogí la carpeta. Tome asiento a una distancia considerada y comencé a revisar los papeles- veras, tengo una empresa de publicidad World Star-
-Lose- su respuesta me sorprendió por unos instantes pero aun así proseguí.
-Okay- suspire, esto iba a ser ma difícil de o que creí. Y aquí nos encontramos, actuando como completos desconocidos, apenas puedo hablar y tengo miles de cosas por decirles, pero no encuentro el valor que me permita dar el primer paso- comenzamos. ¿Como... te- mis labios comenzaron a temblar al mismo ritmo que mi mano- te...ha?-¡Genial! lo que me faltaba. Tartamudear. Levante mi vista, su mirada tenia miles de expresiones en una sola, apostaría a que en este momento no me esta escuchando, la conexión se mantuvo por unos largos minutos hasta que no pude mas y me derrumbe por completo- lo siento- cerré de golpe la carpeta llevándola sobre mi pecho con fuerza- no puedo- me puse de pie y camine, casi corrí, a la salida. Nada, absolutamente nada se sentía a mis espaldas, el miedo de que estuviera tras de mi se esfumo.
Mis pies se encontraban resbalando constantemente sobre la nieve a medida que avanzaba, la vista se me nublo anunciando la llegada de lagrimas. Sabia que nada de esto era buena idea, venir fue el error mas grande que pude haber cometido. Mire a mis alrededores, estaba perdida. El peso de un cuerpo me derribo sobre la fría nieve en un momento de debilidad. Apenas pude divisar la figura de quien se trataba. Harry.
-Jess- su respiración era agitada, estaba sobre mi, apenas unos centímetros eran los que separaban nuestros rostros- no... te puedes ir- recargo su cabeza sobre mi hombro para tomar aire- lo prometiste, lo prometimos- otras de mis dudas se aclararon, el no se olvido de nuestra promesa-En el día en que volvamos a encontrarnos, no importa cuando y donde, si nuestras almas siguen siendo una...
-A pesar de la distancia y el tiempo que alguna vez nos separo- seguí con apenas un hilo de voz y con el nudo en mi garganta aun mas grande.
-el día en que nuestros cuerpos se vuelvan a encontrar, ese día lucharemos contra todo y todos- miro mis labios y luego mis ojos- Jess, todo este tiempo...desde la primera vez en que nos dijimos cuanto nos amamos, ha sido mas el tiempo en que estuvimos separados del que vivimos y disfrutamos de nuestro amor y simplemente no lo soporto.
-Yo tampoco puedo soportarlo, Harry- negué con la cabeza- haberte dicho que no te amo fue el peor error que pude cometer en mi vida- sentí mis mejillas arder y las lagrimas deslizarse por ellas.
-No llores- limpio mi rostro con el pulgar de sus dedos-Nose- se aparto sentándose de cuclillas a un lado con su mirada perdida- si has olvidado nuestra promesa, pero te puedo asegurar que yo no, hace un momento- señalo a la cabaña- cuando apareciste allí no lo podía creer, parecía casi imposible. Pero ahora que se que eres tu no te volveré a dejar ir, pude darme cuenta de la falta que me has echo estos años y no puedo permitir...- apoyo sus codos sobre ambas piernas- volver a alejarme de tu lado, no se lo que pienses, pero nada delo que digas o hagas hará cambiarme de opinión.
Negué con la cabeza- Harry, tu no deberías estar diciendo esto- dije mientras me acercaba a el- porque yo fui la que se alejo de ti, yo fui la única culpable y si alguien debe de prometer nunca mas volver dejarte ir, soy yo- tome su rostro con ambas manos y uní nuestros labios, se que era un poco apresurado, pero simplemente no podía resistir ni un segundo mas sin sentir su contacto. El beso era dulce pero a la vez escondía la desesperación en el, la desesperación de un amor sin alimentar. Por mas días, meses, años que pasen Harry siempre será el amor de mi vida, el único con el que quiero estar, el único que puede hacerme sentir como nadie- te amo- susurre sin separar nuestros labios.
-Te amo- su mano tomo de mi cuello intensifico el beso, una lagrima se me escapo, una lagrima de felicidad. Por primera vez podía llorar sin estar triste, por primera vez después de tanto tiempo pude comprender lo estúpida que fui ¿Y si lo perdía? no tengo palabras para agradecer de que sea el quien en este momento me este besando. Nos separamos juntando nuestras frentes mirándonos fijamente a los ojos, otra risa volvió a escapar de mis labios pero esta vez mas fuerte, mordí mi labio inferior tratando de ocultar una carcajada. Al ver la misma felicidad en el comencé a reír aun mas acompañada de Harry. Este era mi momento, nuestro momento, porque pude comprender que la única vida que puedo vivir sin temor a perder es junto a el. Pude comprender que la única felicidad era a su lado, el tenia todo lo que me hacia falta. Tenía razón ha sido mas el tiempo que estuvimos separados del que vivimos nuestro amor y aun así ese sentimiento sigue aquí, y es mas fuerte que nosotros.
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No tenia tanta inspiración, lo siento. Prometo mejores.
Graciasss :)
