The Hobbit (Nuestra Historia) [2da Parte]

Capitulo 11 Un dia especial

El desayuno constó como siempre con grandes fuentes de comidas pero solo para los reyes de Erebor y algunos de sus amigos. Después de la coronación muchos volvieron a sus hogares junto con sus familias, Gloin, Oin, Dori, Nori, Ori, Bombur, Bifur y Bofur entre ellos, mientras otros como Balin y Dwalin permanecieron en Erebor con la autorización del rey, aunque muchos de estos pertenecían al antiguo Reino de Moría, donde en él Balin era su gobernador. En la gran mesa estaban Thorin, Dis, Kili, Fili, Dwalin, Balin y Dömin, quienes contaban con la pequeña sorpresa de un viejo amigo...Bilbo Bolsón

-Bilbo-dijo Dömin al ver al hobbit sentado en la mesa
-Hola Domin-dijo Bilbo parándose para recibir a Dömin con una abrazo
-¿Cómo no te vi en la coronación?-dijo Dömin con una leña sonrisa
-Tal vez porque no quería figurar mucho en la ceremonia-dijo con una sonrisa el hobbit
-Me alegra verte aquí-dijo ella con una sonrisa mirándolo

Mientras Dömin se iba a sentar con Fili para poder desayunar, la conversación continuo de cómo todo el pueblo estaba alegre después de la ceremonia, el arduo viaje de Bilbo hacia Erebor nuevamente

-Han comenzado los días del rey bajo la montaña-dijo Balin con una sonrisa mirando al rey
-Eso es lo que dicen-dijo Thorin con una leve sonrisa mirando a Balin
-Al fin lo conseguimos-dijo Dis con una sonrisa hacia su hermano, tomándole la mano-lo que nuestros padres deseaban, lo cumpliste-dijo con un gran sonrisa
-Lo conseguimos juntos-dijo Thorin mirando a Dis para que observará a todos los que estaban presente, para que también felicitara a ellos
-Tienes razón-dijo Dis mirando a sus hijos junto con Dömin y a sus viejos amigos

Luego de unos instantes conversando y desayunando en el salón juntos, todos comían mas que otros el estomago de los enanos es muy grande, aunque para Dömin eso era desconocido porque nunca había visto tal apetito, ella no poseía lo mismo que los enanos tenía muchos rasgos de humana como de enano pero no era una raza completa. Solo que debió tomar grandes decisiones en su vida desde chica como aun lo sigue haciendo, junto con su hermano y su bienestar pero esos pensamiento fueron interrumpidos

-Discúlpenme-dijo Thorin levantándose de su lugar para alejarse de allí
-Sus deberes como rey han de empezar como los suyos de príncipes-dijo Dis mirando a sus hijos, en especial a Fili, quien seria el próximo rey
-Si, madre-dijo Kili parándose con una leve sonrisa en su rostro mirándola
-Nosotros nos retiraremos, mi señora Dis-dijo Balin parándose de su asiento mirando a Bilbo, junto con su hermano haciendo una pequeña reverencia
-Los acompañare-dijo Dis, saliendo son ellos del salón junto con Kili, déjando a Fili y Dömin solos en ese salón
-¿Seguro que deseas ese labor?-dijo Fili tomándole las manos a Dömin
-Si-dijo Dömin con una sonrisa
-Ten cuidado-dijo Fili mirándola a los ojos
-No hay peligros-dijo Dömin dandole un beso en la mejilla a Fili- solo es ayudar a los demás con las armas-dijo mirándolo con una sonrisa
-Me preocupo por ti-dijo Fili con una sonrisa
-Lo se y por eso debes ir con Thorin, mi señor-dijo Dömin levantándose de su lugar mientras Fili hacia lo mismo
-Lo hare-dijo Fili tomándole una mano-luego nos veremos-dijo acercándola a él para darle un pequeño beso en los labios
-Si, pero no tan tarde...hoy es tu cumpleaños-dijo Dömin con una sonrisa- feliz día-dijo dandole un abrazo fuerte a Fili, quien estaba impresionado por el comentario de ella
-¿Como lo supiste? Solo los mencione muy pocas veces-dijo Fili con una gran sonrisa
-Lo sé, pero lo recordé-dijo Dömin mirándolo a los ojos-tengo un regalo para ti-dijo con una picara sonrisa-pero deberás de esperar hasta la noche-dijo dandole otro beso en los labios saliendo de allí

Dömin y Fili salieron del salón en opuestas direcciones, Fili se dirigía al trono donde su tío y hermano lo esperaban con ansia, en ese mismo tiempo Dömin se preparó para comenzar su nuevo trabajo en la montaña como ayudante para los principiantes en armas eso era lo que ella deseaba, aunque con el permiso del rey podía participar en talleres junto a las demás enanas. Ella se había dirigido hacia el interior del castillo, para preparase y comenzar con su pequeño labor con una gran sonrisa se dirigió hacia unas grandes cámaras donde habían brillantes armaduras, pero solamente estaban muchos hombres, quienes tal vez no la dejaría participar con ellos, pero en ese momento cuando Dömin iba a irse de allí Balin sale de esas cámaras