Epilogo

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La familia se había agrandado, Dömin y Fili eran más que felices con su cuatro hijos. Claro que al nacer fueron llenados de regalos y bendiciones por parte de los elfos, hombres y enanos. Lady Galadriel y el Señor Elrond los fueron a visitar para poder conocer a esos misteriosos y milagrosos hijos que ellos habían tenido, entonces Lady Galadriel entendió que la maldicion podría seguir existiendo pero a ella no le importaba porque sabiendo eso hizo que su vida sea más alegre con la llegada de sus hijos, luego vinieron Bain, Sigrid y Tilda...¿qué habrá sucedido con ellos? Bain conoció a unas hermosa muchacha en Esgäroth, una de sus amigas con quien cayó rendido a sus pies cuando está creció y si mal no lo recuerdo están esperando su primer hijo, claro que ellos se casaron con una maravillosa fiesta a la cual Dömin pudo concurrir antes de que su salud empeorará por el embarazo, Sigrid conoció también a un hermoso hombre cerca de las fronteras de Rivendell, si un elfo, y por el amor que se tenían uno por otro muy pronto se casaron y aquel elfo decidió vivir como mortal junto con su amada esposa en La Ciudad del Valle y de la pequeña Tilda se supo muy poco pero se rumoreaba que vivía en Gondor hasta que Dömin junto con Filliniel la fueron a buscar a aquellas tierras y se encontró que estaba por casarse con un hermoso hombre, entonces supo que era mejor dejar a aquella niña con el hombre que amaba solamente si prometía mandar cartas a sus hermanos, y así fue como siguieron viviendo los Hijos de Bardo, el cazador de dragones.

Con respecto a los niños al ser pequeños eran muy traviesos, en especial los gemelos Falin y Filan que siempre estaban metidos en líos a diferencia de Filani que se mantenía dulce como lo fue su hermana mayor quien le enseñaba como ser una verdadera princesa como guerrera porque Filliniel era esa una de las cosas que más amaba, poder pelear junto a sus padres y familia. Fili era uno de los más felices al tener nuevamente unos niños con quienes poder disfrutar su vida, siempre que él trataba de dormir o descansar los gemelos venían y lo despertaban para poder jugar a las peleas como solían hacerlo en las tardes. A medida que crecían se podía notar los rasgos de sus padres, Filan y Falin eran idénticos a su padre, con aquellas trenzas y cabellos ondulados amarillos como el maíz pero a excepción de su hermana más pequeña ella tenía el mismo cabello que su padre pero poseía todos los rasgos de su madre, los ojos verdes como los de ella con una fisonomía muy parecida. Estos tres niños crecieron y se hicieron más fuertes cada vez guiados por sus padres, combatiendo entre sí y en las guerras que vendrían con las enseñanzas y genes de unos grandes luchadores como lo eran sus padres...

Ahora las visitas con su tío y primos eran más seguidas, porque después de años cuando los trillizos tenían diez años de edad en una trágica tormenta la casa de los padres de Dömin y Läncee se encendió quemándose toda en su exterior como el interior, por la suerte de Eru la familia se encontraba muy lejos de allí pero al ver aquel desastre solamente en sus ojos pudo verse dolor y pena, sin un hogar adonde ir se dirigieron hacia Erebor donde tal vez los reyes de aquel reino les brindarían su ayuda para combatir aquella desgracia, al escuchar los testimonios de Läncee, su hermana no pudo hacer nada más que abrazar a su hermano agradeciendo que ellos se encontraban bien, el pequeño Lincën estaba agotado por el viaje solamente y eso era perfecto pero Lancën no se encontraba con ellos por su repentina decisión de irse a vivir a Rohan donde la otra parte de su familia vivía allí. Este siempre mandaba cartas hacia su familia que se quedaría a vivir en Erebor donde el rey Thorin había aceptado que ellos se quedarán en ese reino hasta que lo desearan o si lo deseaban también hasta el fin de sus largas vidas. Lincën eligió por fin vivir en la Casa de Durin porque había quedado maravilloso de todo lo que los enanos producían, sus riquezas y mujeres...

Unos años después de que todo esto pasara la eterna princesa de Erebor con el amanecer, Dis la abuela y madre termina sus días en la Tierra Media...pero a pesar de aquella pena el rey y la reina vivieron felices por muchos años, porque su hermana le había encargado que hiera lo que su corazón anhelara y eso haría, sus hijos eran su mayor orgullo porque uno de ellos ahora se convertiría en el próximo sucesor de la corona de Erebor, así es Thirin el primogénito de ambos sería el rey y para ello necesitaba de una reina pero este no decidió casarse hasta que encontrara a la enana especial en su vida y lo hizo muchos años después de ascender al trono como su padre, siempre teniendo la supervisión y consejos de el. Por otro lado su hermano Tharin se había casado con una hermosa enana de la ciudad de Dale con quien había tenido una hermosa hija a la cual llamó Aisth y luego de su primera hija tuvo a dos niños colocándoles los nombres de sus antecesores a los cuales admiraba sin tener conocimientos previos de ellos, fue así que los llamo Thror II y Thrain III. Y sus padres por fin pudieron vivir en paz como tanto Mëlanie deseaba desde el primer momento en el que se casaron, disfrutando de su esposo como una reina debía de hacerlo con su rey.

The Hobbit (Nuestra Historia) [2da Parte]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora