Capítulo 27: Locura primaveral.

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Tres meses, tres meses de entrenamiento, trabajo en las oficinas, más entrenamiento, más trabajo en la oficina. Su madre aún no ha vuelto, la había llamado y ella aseguró que quedará en la casa de un viejo amigo unos días más.

Koron había mejorado en la cocina, la otra vez preparó unos increíbles rollos de salmón agridulces, ¿desde cuándo había tenido la manía de cocinar? Aseguró una vez más que la pequeña Koron es el ser más raro que había conocido, y eso que ambos son de la misma raza.

También se ganó otro oficio, ser niñero...

Flashback

–¿Trunks, estás en casa?– preguntó la mujer de ojos azules al cruzar el umbral de la gran fachada de la corporación.

–Oh, hola Videl– contestó con naturalidad a pesar de verla por primera vez en su casa –¿A qué se viene tu visita?

Ella sonrió alegremente y mostró al híbrido unos papeles la cual describían un documento –Me han aceptado en la universidad– explicó con prosperidad.

–Vaya, felicidades Videl– congratuló contento por el triunfo de la mujer.

–Pero no he venido a eso...– continuó pero sin dejar de tener aquella radiante sonrisa en sus labios –Voy a ir a la universidad por las tardes y voy a necesitar que cuides a Pan– rogó colocándose frente al híbrido –Por favor.

Trunks dudó unos segundos ¿en serio tendrá que cuidar a otra niña? Ya es suficiente con Koron, no va a resistir cuidar a otra saiyajin. Pero no tuvo opción, también deseaba relacionarse con la pequeña y tal vez podrá adoptar habilidades paternas. Una imagen de él junto a Koron cuidando a Pan lo hizo ruborizarse levemente y sonreír como un tonto, se imaginaba a ambos como padres en un futuro.

–Por supuesto que lo haré– contestó con una gran sonrisa sólo por aquella vaga imagen en su cabeza.

–Muchas gracias Trunks, en serio te agradezco mucho– agradeció la pelinegra dirigiéndose a la salida –Las clases comienzan en una semana, podrás cuidar de Pan desde las 2 hasta las 7 excepto los jueves ya que tiene clases en el dojo– después de mencionar aquello salió de la mansión –Adiós.

–Hasta luego...

Fin del Flashback

Pero valió la pena, se ha hecho más responsable al estar cuidando de la pequeña Pan, y también es bueno para ella ya que él le relata sus memorias con Gohan, así ella sabrá el gran hombre que fue su padre.

También es primavera, él ama la primavera, es su estación favorita. La razón no tiene explicación, raramente en esta estación el se encuentra cómodo y pacífico, nunca supo porqué pero tampoco pretende saberlo, sólo quiere dejarlo así y disfrutar la calma y alegría de aquellos hermosos tres meses.

Seguro estarán pensando qué habrá sucedido el día de San Valentín... No diría que Trunks no la ha pasado todo el día junto a Koron pero al parecer no fue como esperaba...

"Mirai me dijo que este día tenemos que pasarla juntos, entonces ¡Vamos a entrenar!"

Sinceras palabras de la saiyajin aquel día, Trunks lanza siempre un cansado suspiro al recordar aquel momento. Ha comenzado a pensar que no debería presionar a Koron y dejarla ir, pero al repasar eso una parte suya le grita: ¡Idiota!

Ahora, por suerte, está en un estado pacífico; descansando en el césped fresco rodeado de pequeñas flores de trébol bañadas por la luz del sol. Mamoru y Oliver a su lado, charlando de temas alegres sin dejar que el silencio se apodere de alguno de ellos. Las jóvenes y dulces risas de la pequeña Pan jugando junto a Koron en el prado, saltando y carcajeando por todas partes hasta dejarse caer sobre el suave pasto.

¿Existen los finales felices? -DBZ Fanfiction-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora