Cambios

Capítulo 41

Alex

-Ya estoy_ digo abriendo la puerta del coche, que ahora mismo me parece uno de los mejores lugares del mundo por su fabulosa temperatura_ Toma_ añado tendiéndole la comida que acabo de comprar en un McDonald's cercano. Arranco el vehículo y comienzo a circular de nuevo por las calles de San Francisco.

-¿Dónde vamos?_ pregunta mi chica mirando por la ventanilla y veo de reojo que esboza una sonrisilla.

-Al Golden Gate_ le confieso y empiezo a ver el puente a lo lejos. Piso el acelerador suavemente para aumentar la velocidad y en unos minutos estamos allí.

-¿Comemos aquí?_ pregunta sonriendo.

-Sí, pensé que estaría bien algo informal_ me revuelvo un poco el pelo antes de bajar rápidamente para abrirle la puerta a mi preciosa chica.

-Me encanta_ me da un pequeño beso en los labios y me coge de la mano para empezar a caminar.

-¿Dónde nos sentamos?

-Ahí, mira_ señala con el dedo índice el principio del puente y yo sonrío.

-Sí, vamos_ digo avanzando hasta allí_ ¿Tienes frío?

-No, el abrigo ayuda mucho_ esboza una sonrisa y saca las hamburguesas y las bebidas. Me da mi parte y ella desenvuelve lo suyo para empezar a comer pronto. Oigo que su móvil emite un ruidito y lo revisa rápidamente.

-¿Quién es?_ pregunto antes de dar un gran mordisco a mi hamburguesa con queso y kétchup.

-Jules,_ contesta sonriendo_ después le hablaré.

-Vale_ digo encogiendo los hombros y bebo un sorbo de Coca Cola. Me acerco un poco más a mi chica y ella se recuesta un poco sobre mí.

-¿Sabes que te quiero?_ la miro de reojo y veo que tiene la vista fija en las luces del Golden Gate. Siempre me ha parecido algo precioso.

-¿Sabes que yo te quiero más?_ la beso suavemente en la frente y paso mi mano por su cintura para abrazarla. En esta posición nos acabamos nuestra comida y la abrazo un poco más para poder admirar las fabulosas vistas que tenemos delante.

...

-Nos vamos_ digo levantándome y le tiendo la mano para ayudarla a ella también. Su sonrisa es tan bonita que me dan ganas de follarla ahora mismo, aquí en medio de todas las luces del Golden Gate.

-¿Ya?_ pregunta confundida.

-Son las doce de la noche_ digo riendo y la ayudo a incorporarse. La vuelvo a rodear la cintura y nos vamos al coche intentando huir del frío.

Entramos en el automóvil y lo arranco para volver al hotel. Espero que todo esté como lo he planeado. Sí, todo estará perfecto porque yo mismo me he ocupado de hacerlo, espero que a Amy le guste. Noto que se me dibuja una gran sonrisa en el rostro al imaginar lo que pasará ahora. Veo que mi chica me mira de reojo un poco confundida, yo apoyo mi mano en su pierna y ella coloca la suya encima y me la estrecha un poco. Mi sonrisa se ensancha aún más y ella también sonríe. A continuación gira el botón de la radio y consigue que suene Alejandro Sanz con su canción A que no me dejas. Gira la cabeza hacia la ventanilla y la apoya en el frío cristal. Escucho como la tararea en voz muy baja, como si le diera vergüenza que la escuche. 

-Te voy a llevar a la tele_ sugiero riendo cuando acaba la canción.

-Oye, no te rías_ dice dándome un golpe suave.

-Perdona_ hago ver que el golpe me ha dolido y a continuación río de nuevo.

-Mira, ya hemos llegado_ dice quitándose el cinturón.

Aparco el coche y me bajo para abrirle la puerta a mi preciosa chica. Le agarro la mano y entramos juntos en el edificio, saludando a la mujer de la recepción y subimos al ascensor. 

-Un momento_ digo sacando una pequeña venda azul de mi bolsillo_ Ponte esto en los ojos.

-¿Para qué?_ pregunta confusa.

-Tú pontelo_ le cubro los ojos con el pañuelo y se lo anudo por detrás. A continuación muevo la mano delante de su cara para comprobar que no ve nada. Me coloco tras ella y la ayudo a caminar por el pasillo, sin dejar de escuchar sus preguntas sobre por qué le tapo los ojos_ Es una sorpresa tonta, no te voy a hacer nada malo_ digo riendo. Abro la puerta de la habitación, la hago entrar y a continuación cierro la puerta. La ayudo a entrar un poco más, justo hasta estar delante del espejo_ Espera_ digo dejándola un momento sola. Me despojo de mi abrigo y de mi camiseta. Ahora solo tengo los pantalones y pienso en quitármelos también. Al final decido que sí y después me revuelvo un poco el pelo. Me acerco a ella y le quito el abrigo para que esté más cómoda_ Ya_ le desato el nudo de atrás y veo como el reflejo del espejo abre los ojos lentamente.

-Alex... Me encanta_ exclama.

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¿Qué es lo que le habrá preparado Alex?