Capítulo 24

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Amy

El camino en coche me lo he pasado cantando las canciones de la radio y se me ha hecho muy corto. A la mitad del camino paramos en un restaurante al lado de una gasolinera y comimos una pizza que sabía a plástico. Alex ha estado casi todo el viaje revisando su móvil con cara preocupada, pero cuando le preguntaba que pasaba me decía que no era nada importante y me sonreía. Me he obligado a pensar que me lo contará después. Hace media hora que hemos llegado al campus y ya me he duchado. Estoy tumbada en la cama ojeando una revista de moda y Alex ha salido. Me ha dicho que había quedado con unos amigos y yo ni siquiera le he preguntado si podía acompañarlo. Me suena el móvil y alargo la mano para cogerlo.

-¿Amy?_ preguntan al otro lado del teléfono.
-¡David!_ exclamo y me siento con las piernas cruzadas_ ¡Te echaba de menos!
-Yo también_ confiesa con su voz dulce y tranquilizadora_ ¿Cómo lo habéis pasado?
-Súper bien_ contesto y se me dibuja una gran sonrisa en la cara_. El concierto fue fantástico David, al próximo tendrás que venir.
-No creo que Alex quiera_ comenta riendo y río yo también.
-¿Y a ti? ¿Cómo te ha ido?_ pregunto y me masajeo el muslo derecho.
-Bien, un poco aburrido pero bien_ confiesa_ ¿Puedes quedar ahora?
-Sí_ le digo_, Alex ha quedado con unos amigos y yo me aburro.
-¿Me paso ya?
-Sí, te espero.
-Hasta ahora Amy.
-Hasta ahora David.

Y cuelgo. Me miro al espejo y decido que con esta ropa estoy bien. Estoy un poco cansada por el viaje pero quiero contarle a David todo lo que ha pasado. Cojo un peine del cajón del baño y decido hacerme una trenza. Después voy de nuevo a mi cama y espero a que mi mejor amigo venga a recogerme. ¿Le molestará a Alex que quede con David? No, es mi mejor amigo no un extraño. Además, él se ha ido y me ha dejado sola. Mientras que él no esté con Mandy todo irá bien.

-¿Se puede?_ preguntan al otro lado de la puerta, yo digo que sí y me levanto_ ¿Vamos?
-Vamos_ le digo sonriendo. Salgo de la habitación y cierro la puerta.
-He visto antes a Alex_ comenta desviando la mirada.
-¿Sí? ¿Dónde?_ pregunto interesada mientras bajamos la escalera.
-En la sala principal, en los sofás_ murmura.
-¿Vamos allí?_ pregunto con una sonrisa y veo como mi amigo se tensa.
-No creo que sea buena idea Amy_ me dice sin mirarme.
-¿Qué pasa?_ me siento un poco confundida y me paro.
-Estaba con la pelirroja.
-¿Con Mandy?
-Sí, y con Wendy.
-No me lo puedo creer_ me quedo muy sorprendida con esto. Mi novio me dijo que había quedado con sus amigos no con sus "amigas"_ ¿Qué hacían?
-¿Vamos a la cafetería? Tengo ganas de comerme un dónut_ dice él cambiando de tema rápidamente.
-Ve tú si quieres, yo voy a ir a la sala_ bajo la escalera corriendo y David me sigue de cerca murmurando frases como: "No sé por qué se lo he dicho", "Alex me va a matar" o "Amy, seguro que todo tiene una explicación". Cruzo el pasillo a paso ligero y llego a la sala. Me asomo a la puerta buscando a Alex. En un principio no lo veo, y David llega junto a mí. Me agarra del brazo suavemente para que nos vayamos pero yo entro un poco más, y entonces lo veo. Está sentado en el sofá azul marino, con Mandy en su regazo y Wendy sentada justo a su lado. ¿Por qué siempre lo pillo con la puta pelirroja?
-Amy..._ susurra David y me coge del brazo. Yo me suelto y una oleada de celos me recorre cuando entro en la sala directa al sofá azul. Wendy me ve y se le dibuja una media sonrisa. Le toca el hombro a Mandy para que se gire y cuando lo hace también me ve Alex.
-¿Pero tú eres gilipollas o qué te pasa?_ le espeto a Alex alzando la voz y le cruzo la cara con una bofetada cuando me paro delante de él_ ¿Y tú que miras pelirroja? Con ese pelo, que parece que te han prendido fuego. ¿Qué te crees?
-Me creo la favorita de tu novio nena_ murmura sonriendo y Wendy se levanta del sofá y se coloca a su lado.
-Amy vamos_ dice David que ha venido hasta donde estoy y ahora me coge del brazo.
-¡Que no!_ grito y vuelvo a dirigirme a Mandy. Le doy una bofetada que no se esperaba y se frota la mejilla mientras Wendy se coloca delante de ella._ Sois unas zorras_ les espeto y me coloco delante de Alex_ Y tú, _ lo señalo con el dedo índice_ si te quieres ir con esas, vete. No tengo nada que hacer con alguien como tú.
-Nena, tengo una explicación para esto_ Alex me agarra la mano y se la acerca a su boca. Yo la aparto y veo el dolor en sus ojos. Pero me da igual. Es un estúpido.
-Guardátela para ti, yo no quiero oírla_ le espeto y cuando estoy a punto de irme, Alex me coge en brazos y comienza a caminar con David detrás diciéndole que me baje y conmigo pataleando.
-¡Suéltame capullo!_ le grito dando puñetazos en su espalda.
-David vete_ le ordena a mi mejor amigo girándose.
-No me pienso ir.
-¡Que te vayas!
-No voy a dejar a Amy sola.
-¡Señor Thomson!_ llama Alex a un hombre gordo con gafas de pasta y un traje marrón_ David quería hablar con usted_ mi amigo se sorprende y el profesor se acerca a él. Alex me coloca bien y sigue caminando hacia la escalera. Noto las miradas de todo el mundo puestas en nosotros. Yo sigo dando puñetazos en su espalda cada vez con menos fuerza y Alex avanza más rápido a cada paso que da.
-¡Suéltame!_ le grito cuando llegamos a la habitación. Hace lo que le digo y a continuación cierra la puerta.
-Tengo una explicación para todo esto Amy_ susurra colocándose a mi lado. Yo me aparto de él rápidamente y él me sigue.
-Déjame en paz_ le grito y me apoyo en la pared.
-No es lo que piensas_ se pone justo delante de mí y me arrincona contra la pared. Coloca los brazos alrededor de mi cuerpo para que no pueda salir y yo intento encogerme más y más pero él se acerca y no puedo hacer nada.
-¿No has oído lo que te he dicho?_ grito de nuevo, y escapo por debajo de su brazo. Entro en el baño rápidamente y cierro la puerta. Él la golpea, primero con fuerza y después más suavemente.
-Por favor Amy_ susurra y oigo como se deja caer en el suelo_ Joder, me he dejado llevar...
-¿Te has dejado llevar?_ grito desde el otro lado de la puerta_ ¿Quiere decir eso que es tu favorita?
-¡No! Claro que no_ gira el pomo de la puerta pero la he cerrado_ Joder Amy, me estaba chantajeando y no tenía otro remedio.
-¿Por qué te chantajeaba?_ pregunto un poco más calmada.
-Porque ella conoce mi pasado y sabe que yo no quiero que lo ande contando por ahí_ me confiesa y me dejo caer en el suelo.
-Cuéntamelo.
-No Amy_ murmura.
-Vale_ me levanto del suelo y giro el pomo de la puerta. No se abre, Alex se levanta esperanzado del suelo y por fin puedo abrirla. Se acerca a mí para besarme, pero yo lo esquivo. Voy a por mi bolso y meto la ropa que me pondré mañana y cojo algunos libros que me harán falta.
-¿Dónde vas?_ pregunta con voz de estar asustado.
-A la habitación de David.
-¿Y su compañera?
-Hoy no está, además, a ti no te importa.
-Sí que me importa, eres mi novia.
-Eso habrá que verlo_ le espeto y ante su cara de sorpresa abro la puerta y me voy.

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