Capítulo XI: 'quiero vivir el momento...contigo.'

752 58 4
                                    

-Le he dado el trabajo a Ainhoa...-dijo su abuela seria.

-¿Qué? Te dije que no la metieras en esto...a ella no-dijo antes de marcharse enfurecido.

-¿Puedo hablar con él?-pregunté sintiéndome mal.

-Ves cielo, seguro que a ti te hace caso...-dijo dedicándome una sonrisa de apoyo.

Lo busqué por toda la casa y no estaba. Salí a la calle y tampoco estaba como de costumbre con su guitarra.

Dude por un instante antes de dirigirme a donde creía que estaría. Entonces me di cuenta de que lo seguía conociendo y de que mi Eric no había cambiado tanto como las personas decían, seguía refugiándose en nuestro lugar cuando tenía problemas y si os digo la verdad eso me enamoraba más de él.

Llegué silenciosamente y me senté a su lado admirando la belleza de este lugar que tanto había extrañado.

-¿Qué haces aquí?-preguntó enfadado.

-Quería explicarte las cosas...-dije mirando al frente.

-No quiero escucharte Ainhoa...

-Me da igual te lo voy a explicar de todas formas...-dije intentando parecer una cabezota.

-¿Por qué te empeñas en estar a mí alrededor?-preguntó mirándome a los ojos.

-No lo hago aposta, necesito ese trabajo si quiero estudiar...-dije mirándole seria- me he recorrido toda la ciudad buscando uno y todo el mundo me daba la espalda...-le expliqué- y cuando Ana me contó esto dudé mucho en hacerlo porque sabía que me odiarías más de lo que ya me odias pero lo necesito y tú ni nadie va a hacer que no cumpla mis sueños...

-Yo no te odio...solo...-dijo sin poder hablar.

-Déjalo es mejor así, no digas algo de lo que luego te arrepientas Eric...-dije haciendo una mueca.

-¿Sabes lo qué significa esto?-preguntó dolido-Significa volver atrás, significa volver al pasado, significa volver a ser el inseguro de mierda que era...-dijo con los ojos brillantes.

-¿Por qué dices eso?-pregunté triste...-yo no significo tanto para ti, tú no me necesitas...-dije dolida.

-A lo mejor significas más de lo que piensas pero soy un orgulloso de mierda como para reconocerlo...-dijo haciendo que en mi interior se revolviera algo.

-Pues sabes prefería a mi Eric el inseguro antes que al orgulloso de mierda...-dije levantándome para irme.

-Espera...-dijo cogiendo mi mano...-¿Por qué tengo esta dependencia a ti?-preguntó mirando mis ojos a pocos centímetros...-te necesito pero no quiero hacerlo...

-Y yo te sigo queriendo y no quiero hacerlo, es sencillo...-dije soltándome de su agarre para salir corriendo.

Cuando ya estaba a unos pocos metros de él me derrumbé, lo hice...hice lo que me prometí no hacer pero es que este amor por él me podía. Y me sentía débil porque ahora él sabía que todavía es el culpable de que como él dice yo siga siendo una insegura de mierda pero que más me da eso si yo le quiero a él puede doler mucho...pero es un dolor bonito.

Puedo parecer masoquista pero prefiero este dolor que cualquier otro, prefiero esta sentencia de muerte que cualquier otra...prefiero esta vida sin él pero con su amor.

***

Habían pasado unos días desde entonces. Estuve escondiéndome de Eric porque no quería darle explicaciones, no quería que volviera a ver a la Ainhoa de antes...a la que le daba todo igual si al final del camino estaba él.

Y puede que sea una cobarde pero no puedo enfrentarme a lo que sé que nunca tendré.

Pero hoy no era día de pensar en problemas, hoy era día de pensar en mí y solo en mí. Habían comenzado las fiestas de mi pueblo...y como Ana me decía esta noche tiene que ser tu noche.

Estábamos vistiéndonos y arreglándonos para la ocasión. Era sábado y iríamos a bailar a una zona con DJ y todo eso.

Ana eligió mi atuendo para salir, ella siempre me ayudaba a hacerlo y en parte la había echado de menos por eso, ya que para la ropa soy un desastre. Era sencillo pero a la vez elegante.

Era un vestido rojo de un solo hombro que se ajustaba a mi cuerpo. No era súper pegado por lo que era cómodo a su manera. Y como no unos taconazos negros de diez centímetros pero no os preocupéis que en mi bolso iban mis bailarinas porque no iba aguantar ni la mitad de la noche.

El maquilla también era sencillo pero intenso. Y el pelo me lo rizo y me gustaba como me quedaba.

Ana bajo y yo estaba intentando tranquilizarme porque no sé porque estaba nerviosa. Quizás cuando me había enterado de que Eric estaría con nosotros.

Baje las escaleras poco a poco como podía hasta llegar abajo donde me esperaban Max y Ana.

-En serio Nueva York ha hecho una obra de arte contigo...-dijo Max sonriendo.

-Gracias...-dije con una sonrisa tímida.

Estábamos ya en la fiesta cuando llegaron los chicos y nos saludamos. Estaba bailando con un chico que no conocía pero me había sacado a bailar cuando vi como Eric estaba ya con mis amigos en la zona donde ellos estaban bailando. Levantó la cabeza y sus ojos se encontraron con los míos y de mis ojos miró a mi compañía e hizo una mueca.

Después se me quitaron las ganas de bailar con el chico, me disculpé y me acerqué al grupo de mis amigos.

-¡Me encanta esta canción!-dijo Ana llevándose a los chicos a bailar a la pista.

Quedándonos Eric y yo solos, uno frente al otro, mirándonos a los ojos...ajenos a lo que pasaba.

-Veo que no pierdes el tiempo...-dijo en mi oído.

-Si tú lo dices...-dije secamente.

-Lo entiendo, cualquiera perdería lo que fuera con ese vestido...-dijo sonriendo...-Estas preciosa...-dijo mirando mis ojos.

-Tú tampoco estas mal...-dije con media sonrisa.

-Esta noche voy a tener que estar vigilando...-dijo sonriendo.

-¿El qué?-pregunté curiosa.

-Lo que creo que aún es mío...-dijo tomando mi cintura para poder quedar a pocos centímetros de mis labios.

-¿Q-qué haces?-dije nerviosa.

-¿Cómo que que hago?-preguntó con su sonrisa encima de mi cuello- Estoy enseñándote como todavía mi cuerpo se amolda al tuyo, como te pones nerviosa solo con sentir mi tacto, estoy mostrándote que no soy tan orgulloso como crees...y puede que mañana me arrepienta de esto...pero quiero vivir el momento...contigo-susurró en mi oído.

Estaba tan nerviosa que no podía contestar todo lo que me había dicho.

¿Dónde está el Eric de hace unos días?

Cuando estaba abrazada a sus hombros sentí una mirada encima de mí, abrí los ojos y me encontré con alguien que si no lo veo no lo creo.

Me separé de Eric y no deje de mirarle.

-¿Qué pasa?-preguntó Eric mirando hacia la misma dirección que yo.

-¿Dani?-dije sonriendo.

-Morena soy yo...-dijo mientras me abalanzaba a sus brazos.

CONTINUARÁ...

La casualidad más bonita de mi vida (II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora