No corregí errores ortográficos. Antes de que juzguen.
- Les dejo una foto del John que yo me imaginó cada vez que escribo algo de él. ¿Quién se imaginan ustedes cuando lo leen?
Fer llegó de su larga jornada exhausta encontrando a Emma dormida en el sofá, la manta que la cubría estaba a medio tirar en el piso, y con suma ternura la arropo. Fer la observó por unos minutos, sus rasgos ya no eran los de aque chica dulce é inocente, ahora con esas ojeras tan profundas y su ceño más fruncido que nunca aparentaba una edad un poco mayor de la original, su semblante al dormir ya no era de la Emma despreocupada, si no de una persona distinta, a Fer le dolía, ese mal nacido la había dejado tan frágil, herida y humillada. Fr se juraba que cuando se lo olviera a topar le arrancaria las bolas.
El timbre del apartamento la sacó de sus pensamientos, Emma se removió y abrió lenta y con pesadumbre los ojos, parecían lozas en lugar de párpados.
- ¿Quien? - Dijo la pelirroja.
- Vengo a entregar un paquete a la señorita... Emma - Fer abrió, cuando Emma escucho eso se incorporó como pudo, le dolía bastante el costado - Sólo tiene que firmar aquí - Fer se abrió paso para que su amiga pudiera firmar.
- Gracias - Le susurró al chico y lo vio descender por el ascensor.
- Abrelo, Abrelo, ¿Qué será? - Dijo Fer más entusiasmada que Emma.
- Trai una tarjeta - La tomó y se quedó con la boca abierta cuando leyó lo que decía.
Soy el causante de su dolor en estos momentos, espero y este humilde obsequio pueda perdonar lo ocurrido.
E.W.
Emma rasguño la caja y con un poco de ayuda de Fer la pudo abrir, ambas se miraron con la boca abierta y sin poder pestañear. En la caja estaba un IPhone último modelo color blanco, de un derrepente empezó a sonar y el la pantalla ya aparecía un nombre registrado.
Ethan
- Responde - Le animó Fer. Emma sacó con manos torpes el móvil y se lo llevo a la oreja cuando aceptó la llamada.
- Ho-Hola - Tartamudeo un poco pero compuso al instante sus nervios.
- Espero no verla molestado, Emma - Su voz sonaba tan perfectamente correcta, elegante, y acentuada.
- No, para nada - Fer estaba más emocionada que ella queriendo saber que le decía.
- Se que su móvil se perdió y me tomé el atrevimiento de darle uno, tengo su número y tiene el mío, sólo digo, si necesita un amigo con el cual charlar.
- Le agradezco y lo tomaré en cuenta - El sonreía ampliamente al otro lado de la línea, desde que su mujer murió jamás ninguna mujer le había llamado la atención como Emma lo había hecho.
- Tenga una buena mañana - Se despidió.
- Usted igual - Terminó la llamada.
- Emma, ese hombre es tan sexy.
- Fer - Se ruboriso al acordarse de el.
- No lo puedes negar - Alzó las cejas divertida.
- Sólo quiero concentrarme en esto - Señaló su barriga que aún no se notaba.
- Si ajá, iré a dormir para concentrarme - Se burló. Emma rodó los ojos sonriendo.
En realidad ella no quería saber nada de hombres o tener una relación aun estaba bastante afectada por lo de John. En ése momento recordó a su padre, no le había dicho sobre su embarazo. Suspiró y tomó su nuevo móvil, presionó los números en la pantalla y espero a que respondiera.
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Dulce llegada
RomanceEl amor mas profundo e incondicional, el de una madre. Registrada en SafeCreative Código: 1507194668133