Ana preparó dos maletas, mientras tomaba un vaso de café a las cuatro de la madrugada, miraba su pasaporte para ver que todo estuviera en su lugar.
-Ryder!,aquí.-me dijo desde su cuarto, yo estaba tirado en un sillón.-mira, estaremos en Londres, luego en Italia, pasaremos por Venecia, y terminaremos en Mónaco, ¿entendéis?.-dijo con un monton de hojas.
-espero y este Ender...-murmuré.
-¿que dices?.-me pregunta dirigiendo su mirada a mi.
-¿yo?!, ehh, no,nada.-dije retrocediendo, y golpeandome con las maletas de atrás.
-sera un largo viaje...-suspira Ana...
Media hora después vamos en un taxi de camino al aeropuerto, Lucy y Ethan no podrán ir, lo cual sera mejor para mi, pero malo para ella, bueno por que cuido menos gente y malo, por que son sus amigos.
Una vez en el aeropuerto, antes de abordar, una pequeña hola de reporteros nos ataco antes de subir a un avión privado de la editorial, en el subirian el señor Maxwell, el dueño y director, Ana, la autora del libro, y Miller Kisov , el promotor del libro por parte de Rusia.
Después de saltarse el flash de camaras y preguntas por parte de reporteros, al fin estamos en el avión de camino a nuestro destino, Londres...
-la gira sera algo corta, pero benefica para todos.-dijo el señor Maxwell, tomando de su Martini, el señor Maxwell vestía siempre de un traje sencillo de negro, con su corbata azul, era joven y tiene buena condición, el señor Kisov era ruso, rubio de ojos castaño, y su mentón se notaba elegantemente a su atuendo, nada caro, si no mas bien una chaqueta gris acompañada de una gorra negra, para no llamar la atención de los paparazzi, Ana solo llevaba una polo de blanco y su chaqueta negra, con lentes oscuros.
-espero que no hayan ataques.-dijo Kisov con su acento de Rusia.
-debemos tener mucho cuidado a la hora de las entrevistas,tendremos un horario rígido, al llegar nos instalaremos y nos prepararemos para la entrevista.-dijo el señor Maxwell.-ah y por cierto, no me digan señor Maxwell, me hace sentir viejo, diganme Max, claro, en privado.-dijo giñando un ojo.
-perdona Max, pero tendremos un serio problema.-dijo Miller mirando su celular.
-Kisov, ¿nuestro abogado estara en camino?.-dijo Maxwell.
-eso espero, tendra que estar haya para mañana.-dijo poniéndose su manos libres.
-Ana, tu deber preocuparte por estar bien, hablar fuerte y claro, y nada malo pasara.-dijo Kisov.
Veamos, tenemos a dos demonios altamente peligrosos detrás de nosotros, se acerca una casi guerra entre ángeles y demonios, y el cree que es así de facil cuidarla, claro.
-bien, dejemos el trabajo de lado un rato.-suspiro Maxwell.-pregunta miller, ¿eres ruso o estadounidense?.-dijo arqueando una ceja, dejando iluminado su café ojo derecho.
-mi padre es ruso, mi madre estadounidense, de no ser así, no tendría este nombre, no me gustan los nombres de Rusia.-dijo cruzando sus brazos sentado.
-¿y que hay de ti Anderson?.-Maxwell poso su mano izquierda en su barbilla.
-no mucho que decir, nunca pense llegar a publicar esto, sería algo que no le tomaría mucha importancia.-dije mirando la ventanilla derecha del avión.
Como todo avión privado, del lado izquierdo de Ana estaba Kisov, mientras que Maxwell estaba de frente de ellos.
Con un elegante tapiz rojo, decoraciones vintage, y de otras cosas más, se conformaba el avión que nos llevaría por casí toda Europa.
Justo al aterrizar, un ambiente de incertidumbre me invadió, temor, me revolvía el estómago.
Ana al entrar al aeropuerto noto mi estado y se alejo un poco de la gente para poder hablarme, claro, si no parecería una loca hablando a la nada.
-¿estás bien, Ryder?.-preguntó retocando su maquillaje.
-si, solo que siento que sera diferente...
Como la entrevista sera dentro de dos días, Maxwell les dio permiso a los dos de pasearse por todo Londres, claro con cuidado de no cometer alguna estupidez, Ana se tomo fotos con Kisov en el big ben, luego en un restaurante, parques, muchos lugares....agotador.
Un larguísimo rato después, cada quien en su habitación de hotel, claro en uno elegante y comodo, Ana se encontraba tirada en su cama.
-parece hecha de nubes.-dijo Ana recostada en la enorme cama blanca.
Miraba por la ventana como comenzaba a llover, por lo poco que se, era típico este clima en Londres.
-Ryder, te noto extraño.-me pregunta mirandome.
-es que....cuando estabas dormida, un día antes de llegar apareció un ángel extraño, que nunca vi, se llamaba Ender, dijo que nos ayudaría a protegerte y si tenemos suerte, lo veremos está noche.
-okey...que?.-dijo con una mueca, le explique mejor y como vestía, le pareció raro, y extraño a la vez, pero lo tomo con un poco de calma.
Llego la noche y como siempre, silve al viento una canción para llamar a mi "amigo ", el llego y se presento a Ana, le parecía extraño pero le explico su propósito, e hicimos un plan.
Llego el día de la entrevista y estabamos más que nerviosos, sentarse en una mesa, junto al dueño de la editorial y al promotor, enfrente de mas de 1900 gentes, y sin exagerar, te podrías desmayar.
Actuaria como su guardaespaldas, estaba parado atrás de Ana, respetando su espacio, ella puso de excusa a Maxwell que me ocuparía, el no se nego, mientras Ender estaría de brazos cruzados mirando de lejos, la entrevista esta por comenzar.
Mientras el promotor daba una breve explicación ante el micrófono de la editorial y su exitoso libro, miraba en busca de señales de peligro, como la entrevista era cerca del bigben, note un francotirador y le avise señalando al reloj a Ender.
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Publiqué puntual, deben darme un premio por eso *le apuntan con una pistola*, ok no, y seguiremos con capítulos cada vez mejores , y nunca ,nunca escribire más de 950 palabras, lo se , soy peor que maléfica xD, muchas gracias por ayudarme y darme animos para escribir, son las mejores personas del mundo , no olvides seguirme para saber de ángeles guardianes y de otras más historias, debo darte gracias por tomarte tu tiempo para leer esto,os quiero mucho.-walrider(la impuntual), exacto, ámenme así bitches, te odio karen d:
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Ángeles Guardianes© [RE EDITANDO]
ParanormalSer un ángel no es nada fácil, mucho menos cuando te envían a cuidar a un humano, debes cuidarle hasta su último día de vida... Muchos ángeles cuidamos a nuestros humanos, aunque algunos mueren antes de tiempo, en accidentes o incluso ellos lo hace...