Next To You.

Capítulo 13.

Narra Erin.

Me miro al espejo durante varios minutos analizando si realmente llevaré esto puesto al cumpleaños de Emily. Seguro que todas las chicas irán vestidas perfectas y yo... bueno, yo soy yo.

Supongo que tampoco debo quebrarme la cabeza pensando en si estoy bien así, al fin y al cabo, el cumpleaños es de Emily, ella es la que debe destacar sobre los demás.

- Erin, ¿estás lista? -Dice Jayden entrando a mi habitación. -Ay va, estás...

- ¿Horrible? Lo sé, no sé por qué me he puesto un vestido. -Digo suspirando frustrada y él ríe.

- No, estás preciosa, en serio. Pero sí tengo que reconocer que me sorprende que estés usando un vestido.

- No es la primera vez que me ves con un vestido.

- Es la segunda. -Dice y yo sonrío.

- ¿De verdad que me queda bien? -Pregunto insegura y él asiente con la cabeza.

- Te queda perfecto. Lo prometo. -Me río y él me sonríe. -Bueno, ¿y a qué esperas para que te lleve a esa fiesta?

- Nada. Ya estoy lista. Vámonos.

- ¡A la fiesta! -Dice fingiendo estar emocionado y me río mientras lo sigo bajando las escaleras.

- Te hace poca gracia tener que dejarme ir a ese bar, ¿eh? -Digo para molestarlo y él gruñe.

- Mientras que ningún chico se acerque a ti, estaré bien.

- Estaré con Peter.

- Pues me cago en Peter.

- Que idiota eres.

- Déjate de bobadas, ¡a la fiesta!

- ¿Cuántas veces vas a repetir eso? -Pregunto con diversión.

- Las que hagan falta para asumirlo.

Me río y él sonríe levemente.

Narra Jayden.

Después de un camino en silencio con algunas risas sin motivo por parte de Erin, llegamos a la entrada del bar y Erin baja del coche.

- ¿Me pasas a buscar después? -Dice y yo asiento con la cabeza.

- Sí, no te preocupes.

- Vale. Adiós.

- ¡Adiós, pórtate bien!

Me enseña el dedo corazón y me río. Hoy está más guapa que de costumbre, motivo de más por el que no la voy a dejar sola.

Cojo el móvil y llamo a Devon.

- ¿Jayden?

- Devon, he dejado a los hermanos de Erin con mi madre, ¿estás listo?

- ¿¡Ya vienes a buscarme!? ¡Joder, no he encontrado ninguna camisa que me quede bien!

- Has sonado como un marica.

- Lo sé, pero de todas formas he mentido, a mí todas las camisas me sientan de miedo.