Un viaje de Verano © | Borrador |

Capítulo 26

    Mi mirada se junta con la suya, suspiro aliviada de tenerlo junto a mí. Por fin no tendré que seguir sufriendo por él, o al menos eso creo. Su pulgar se desliza por mis labios haciendo movimientos delicados en éstos, se acerca a mi rostro cuidadosamente, estaba demasiado cerca de mis labios, éstos se rozan con cuidado y cierro los ojos por instinto, en mi mente se viene la imagen de Brian por lo que aparto mi cara rápidamente, no podía hacer esto.

    Axel se disculpa y se levanta para ir a darse un baño en la playa, el calor era muy intenso incluso cuando el sol estaba cayendo para darle lugar a la luna y las estrellas. Imito a Axel y me quito las prendas que tenía sumergiéndome más tarde en el agua cálida y refrescante, puedo notar que Axel está de espalda y se ve muy arrepentido por lo que a hecho, así que me acerco y lo abrazo, el dirige su mirada nuevamente a la mía y sonríe tímido, beso su mejilla y halo de su cabello, se queja y comenzamos a jugar con el agua.

    Comenzamos a nadar a la orilla, me tomó de la cintura y comenzó a girarme, reía sin control hasta que se detuvo, mi vista daba vueltas, estaba muy mareada. Me sujeta con cuidado y me ayuda a no caer al suelo. Mis heridas comienzan a arder y suelto un leve gemido de dolor, me tiro en la arena y comienzo a proporcionarme aire para que el dolor disminuya pero es imposible, una lágrima baja por mi mejilla y Axel se dio cuenta de que no estoy bromeando, me sujeta entre sus manos y vamos directo a un lugar dónde suelen atender los accidentes o emergencias; se encuentran muy cerca de las playas.

    Vuelven a curar mis heridas y regresamos al hotel caminando, después de unos segundos Axel decide hablar:

— Ellie, disculpa por lo que sucedió en la playa, no era mi intensión, yo solo...

— No, no te preocupes, tranquilo —Lo interrumpí antes de que terminara.

— Yo quería hacerte una pregunta —Asentí—. ¿Entre tú y yo puede existir más que una amistad? —preguntó mirándome y espero a mi respuesta.

— Ya es muy tarde —Susurré, lo miré y continué—: Ya tengo una relación con Brian, además prometimos se sólo amigos, lo lamento Axel, pero entre nosotros no puede ocurrir absolutamente más nada que una amistad.

— Tienes razón —Tragó grueso—. Me lo merezco, no debí hacerte tanto daño.

— No Axel, yo ya te perdoné, yo aún creo en ti, pero no hay nada que me haga cambiar de opinión, él está haciendo muchas cosas lindas por mi, él me hace sentir mariposas en el estómago que para ser sincera, se convierten en cuervos, pero el punto es que él me conquistó y no voy a arruinar todo eso por ti Axel, mi amigo. Lo siento, pero no. Las oportunidades se presentan una sola vez en la vida y ya tu tuviste la tuya.

    Se limito a responder, sólo siguió caminando en silencio hasta llegar al hotel, él sabía que tenía la razón y no podía hacer más nada.

— Pero vale la pena luchar por lo que uno quiere —Rompió el silencio que había entre nosotros antes de abrir la puerta de la habitación de nuestro hospedaje.

    Nos encontramos con Brian y Erick sin camiseta, haciendo experimento con la comida, creando mezclas con la misma, pero el resultado es asqueroso, al parecer no tienen nada que hacer. Me uno al grupo y comenzamos a recoger el desastre que había armado, Axel se une al igual que yo y comenzamos a limpiar el lugar.  Al finalizar a Nicky le comienza a dar un ataque de antojos, quería muchas cosas a la vez, por lo que decidimos pedir unos postres.

    Dejé caer todo mi cuerpo en el sofá y tomé el celular local que tenía la habitación, marqué el número de la cocina y pedí el mejor postre que tuvieran el día de hoy, lo suficiente para cinco personas.