Años sin hacer nada (Tema lesbico)-completo-

(50) All what she wants is another babe

Renata me dijo que me operara los pechos. Que si Vanessa había estrenado look era hora de hacer lo propio. Le dije que, obvio, era una pendejada. Me gustan mis pechos del tamaño de los mamuts, además si Vanessa quería una tetona pues ya estaba claro una más de las razones de nuestro fallido amor. A todas nos da risa. Risa y algo, porque fue tal el morbo por el nuevo look que el jueves me acompañaron por las últimas cosas importantes al departamento para verla. Y sí, nos abrió ella y de manera radiante, fresca y juvenil. Renata, que es la más entrada en modas de las tres, en cuanto la vio se desvivió en piropos. Y Vanessa, que siempre ha sentido una simpatía particular con Renata, le contestaba toda risueña. Hasta Mafer salió diciendo que se veía muy bien. Y se han de imaginar que eso no me ayudó a sentirme pocamadre. 

Total que esa misma noche sentadas en la sala del departamento de Renata conjeturamos las cosas. "Es mejor que cada quien ande en sus ondas ahora, Cass, total te evitas el trámite del papeleo y todas esas chingaderas que torturan a los casados". Pero con Vanessa sigo teniendo compromisos. Está Rudi, a quien seguiré viendo los sábados por la tarde para las reuniones en el parque y también seguiré haciendo los pagos del departamento porque nuestro contrato se vence en diciembre y no es onda dejarla con todo el peso económico, sobre todo porque aún no se ha colocado. Y sentí un poco de compasión con Vanessa, es bueno que cambie, que intente ser una chica nueva, que salga si eso ayuda. Me quedé en silencio pensando todas esas cosas pero cuando reaccione a la conversación alrededor ya estaban planeando una fiesta de bienvenida.

El papá de Renata es un señor adinerado. Así que ella regresó a vivir el loft que compró la familia. En la mejor zona de la ciudad con unas ventanas enormes (me encanta ver las ventanas en la noche, con todas las luces de la cuidad como luciérnagas). Los inquilinos tienen a su disposición dos terrazas para cada edificio, el A y el B donde, si se separan con tiempo, y no hay mucha ocupación se hacen las fiestas. Al día siguiente Renata ya había publicado en FB una invitación para una reunión tranquila en su terraza. Les pedí que no fueran a etiquetar nada, para evitar mal entendidos con Vanessa. En realidad yo no sé qué festejábamos. ¿Terminar la relación más trascendente de mi vida? ¿Fracasar? ¿Echar por la borda seis años? ¿Sentirme mejor? ¿Simplemente queríamos peda y ya? opté la última opción, no había nada qué festejar, simplemente queríamos tomar y desestresarnos.

De mi trabajo sólo invité a Pablo para que fuera con su novio, Carolina que no hace otra cosa que hablar de pedas y sexo, y por curiosidad, así, enorme curiosidad a la nueva jefa, Francine. Le pedí amablemente a Mafer que no llevara a Alexis. Prefirió no meterse en pedos y me dijo que yo sabía lo que hacía. Yo sé que a lo mejor me estoy viendo muy infantil al desplazar a Alexis de mi vida después de habérmela cogido un par de veces, pero es que su reacción me provoca una intransigencia perversa. Mi mente irresponsable quiere culparla a ella de todo (y sabemos que no es cierto). Además se la ha pasado mandandome mensajes por cel. Sigue sin gustarme la reacción que tuvo Mafer cuando la invitó a vivir con ella y no sé traigo feelings extraños, onda quítate. 

 Pero la mala suerte estaba conjurando desde antes. Se vinieron unos vientos violentos alrededor de las ocho y media de la noche y Renata y yo tuvimos que subir (ella con los tubos en la cabeza) para acomodar las mesas de nuevo porque el aire las había estado moviendo bien cabrón. Las flores estaban todas deshojadas ya, el cielo compensaba a relampaguear. "Es un mal presagio" le dije mientras movía la mesa para los quequitos. Uno de sus amigos estaba conectando el karaoke. "Claro que no, no te pongas Nereida" "No, guey, pero es que estaba el solazo y ahora relámpagos. Quizás no debí de haber dejado a Vanessa" "Cállate ya, guey (se reía) que se nos hace tarde, además, te recuerdo que te dejaron" Sí, cuánta verdad en una frase. Ni modo mi fiesta ya estaba ahí, con lluvias o relámpagos. Mi nueva vida. Cassandra, la soltera. Party on, pasen.