Enséñame [EDITANDO]

espérame

Cerré los ojos por un momento sin darme cuenta de a qué hora me había quedado dormida. No fue hasta que Finn tocó mi hombro que me desperté.

-ya llegamos Rachel- susurró y me levante toda mareada. Me senté por un momento viendo como Finn bajaba del auto y me abría la puerta. Volteé hacia Marley y ella sonreía como tonta

-hasta aquí los puedo dejar, pero me dice que Finn que conocen por aquí

Miré a mi alrededor para ver que estábamos fuera de la escuela

-si, muchísimas gracias, en verdad no sé que hubiéramos hecho sin ti- dije saliendo del auto

-sé que tú hubieras hecho lo mismo por mí Rachel- sonrió mirando a Finn. Por supuesto que no lo haría. Ni loca la subiría en un auto con Finn otra vez

Nos quedamos ahí solos viendo como Marley se marchaba. Nos miramos por un segundo pero bajé la mirada empezando a caminar. Me incomodé.

-¿qué?- le pregunté volteando hacia atrás para verlo

-nada, solo que estas toda dormida y traes el cinturón marcado en la cara- dijo sonriendo levemente

Inmediatamente me pasé la mano por la cara comprobando lo que decía -me da igual. ¿Quién me va a ver a estas horas?- encogí los hombros

-yo- dijo sonriendo caminado a mi lado. Lo miré sonriendo -entonces...¿vamos a tu casa primero?

-no, tú ve a la tuya y yo a la mía. Te veré al rato a ver si sigo viva

-¿no tenías permiso de ir?

-no, y lo peor es que no saben que me echaron de las cheerios y todo eso. No sé que voy a hacer- me estremecí por el frío

-mi mamá tal vez también se está preguntando por qué no he llegado de "comprar" o lo que sea que le haya dicho y por qué llegare sin Sam y sin la camioneta pero no creo que me mate. Tampoco creo que te maten a ti.- dijo pasando su chamarra por mis hombros

-gracias- le dije sintiendo como su aroma me rodeaba

Caminamos hacia mi casa al parecer y al entrar a mi calle casi me desmayo. Me iban a matar. Me Iban a decir que me odiaban y que ya no me querían o algo así. Me iban a decir lo desconcertados que estaban de mí o peor me iban a dar un sermón.

-¿por qué caminas lento?- dijo volteando para atrás al ver que ya no seguía su paso

me senté en el jardín de la casa junto a la mía muriendo de pánico.

-no te van a matar Rachel- susurró sentándose junto a mi

-me duelen los pies, ya no los aguanto. No se ni que estoy haciendo con mi vida. Estoy siempre jugando. Ya no sé ni quién soy a veces Finn -sentí como las lágrimas se amontonaban en mis ojos- hoy puse en riesgo a mi mejor amiga ¿quién hace eso? Si mis papás se decepcionan de mi entonces todos lo harán, porque se supone que tus padre son los últimos ¿cierto? y ya lo logré. Ahora todos están decepcionados de mi

Yo lloraba mientras él me abrazaba

-yo no estoy decepcionado de ti- susurró acariciando mi espalda

-ni si quiera me conoces- le dije afirmando lo que me había dicho antes

-pero no importa porque sabes algo, nos podemos conocer. Si tú quieres

-no lo presiones- le dije riendo al ver que en verdad quería salir juntos

-pero es que no te entiendo a veces. Eres toda dura conmigo pero te desplomas así, como ahorita y me dejas consolarte. Pero luego me dices que no podemos estar juntos y de igual manera te irrita que hable con Marley

-no me irrita- mentí

-si lo hace. Ya no te mientas ni me mientas a mi. Yo sé lo que sentimos aunque todos digan que solo jugaste conmigo. No me importa porque al menos, si lo intentamos, no nos quedaremos con la duda de lo que pudo haber sido, o de lo que se pudo haber sentido. Mínimo lo intentaríamos ¿y quién sabe? Tal vez seamos algo real

Me quedé mirándolo confundida, si lo quería, quería eso de lo que hablaba y aveces pensaba en Finn, más de lo que quisiera pero no podía. No podía porque sería demasiado. Lo que habíamos pasado, mentira o como fuera, yo si lo llegue a querer, de verdad y no quería que se repitiera porque ahora no sólo estarían sus sentimientos en juego si no los míos también.

-di algo- dijo nervioso

-es que no sé qué decir. Ya no quiero que me echen la culpa por hacerte sufrir o tener a Sam odiándome o a Santana y a Puck detrás de nosotros. Solo quiero que mi vida sea tranquila como antes, ya no quiero los ojos de todos sobre mi, ya no quiero llamar la atención. Quiero que se ocupen de su vida antes que en la mía

-¿entonces no quieres estar juntos?

-no si quiero, pero no puedo. No puedo hasta que todo en vida este estable ¿sabes? Solo no te alejes. Si en verdad quieres esto solo espérame

-esta bien- se veía en sus ojos lo que causaba en él y no sabia si era mejor arriesgarme ahora o dejarlo para después

-lo voy a pensar ¿si? Mañana te digo, ahora ni siquiera se en donde estoy- suspiré riendo ya tranquilizándome

Él asintió limpiando lo que quedaban de mis lagrimas.

No levantamos y lo miré -ya vete, llegó desde aquí

-¿me avisas si pasa algo?

-lo prometo- le dije abrazándolo imaginándome como sería abrazarlo a todo momento cuando quisiera -gracias por todo y por Mercedes

-cuando quieras- se empujo los lentes sonriendo de lado

-bueno, te veo mañana o más bien al rato

Nos despedimos y vi cómo caminaba por donde habíamos llegados para girar a la derecha en dirección a su casa. Caminé hacia la mía enfrentando mis errores. Giré la perilla entrando

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