Capitulo 17

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Ahsley se levantó de la cama a media noche, no podía conciliar el sueño, salió de la cama y bajó a lo que antes había visto que era la cocina, tomó de la alacena un vaso y se sirvió un poco de agua.

-¿problemas para dormir?.- preguntó una voz detrás de ella y se giró rápidamente asustada.

-perdón.- agregó Velkan riendo leve al ver que la menor se había asustado.

-Tonta, me asustaste.- le golpeo con suavidad el hombro.- Si, no pude dormir.- dijo ella mientras reía un poco.
Miró a la más alta reír leve otra vez.

-¿y tú?, ¿que haces despierta?- preguntó mientras terminaba su vaso de agua.

-escuche ruidos de un gato en la cocina.- bromeo, Ahsley sonrió y le sacó la lengua.

-Tampoco podía dormir, me toma algo de tiempo acostumbrarme a una cama que no es la mía.- se sirvió un vaso de jugo del refrigerador.

Ahsley se recargó en la barra de la cocina mientras veía a la mayor beber.

-¿Quieres ver algo genial?.- agregó la más alta con un brillo en sus ojos, la menor sonrió.

-si quiero.- dijo.

-Ven.- invitó la más alta mientras salía de la cocina y la menor le seguía.

-¿a donde vamos?, ¿Vas a raptarme? o algo así-bromeo.

La mayor entró a un cuarto.

-será mejor que eso.- agregó, la menor se sonrojó. -¿Que?.- expresó apenada mientras la mayor le tomaba la mano y la adentraba a la habitación algo obscura.

-Ve..Velkan.- tartamudeo al notar que al parecer la mayor no bromeaba, le soltó la mano, Ahsley no podía ver nada.

-¿Velkan?- preguntó más nerviosa y las luces se encendieron, eran luces tenúes, el cuarto aun seguía un poco obscuro y se podía ver las lucesillas que formaban en el techo un cielo estrellado.

-lo siento no ayaba el interruptor.- rió la mayor dos metros lejos de ella.

La menor estaba sorprendida, aquel lugar era muy hermoso.

-wow.- dijo suavemente mientras caminaba viendo todo el lugar, había un sillón verde esmeralda, junto a el un tocador con retratos y algunas cosas de valor, en el techo habían cascadas de viento de cristal era lo que hacía que el techo tuviera un toque estrellado, aparte de que las lámparas tenían un manto de leves agujeros que complementaban el techo formando dichas estrellas, a un costado de lado derecho había un perchero, era de esos que utilizan para colgar la ropa en los desfiles de modas, tenía igual algo de ropa colgada en ella, habían esculturas de hadas y algunos seres mitológicos.

-este es el cuarto favorito de mamá.- agregó mientras Veía a la menor. -ella y yo lo decoramos.- dijo a la chica que se acercaba al buró y le daba giro a un reilete con el dedo.

-es hermoso.- dijo Ahsley, cerca de ella había un tocador viejo de Vinil.

-¿Has escuchado a lana del rey?- preguntó la mayor mientras sacaba un vinil de uno de los estantes de junto.

-eh escuchado algo de ella.- agregó la chica y miró a la mayor acercarse al aparato para poner aquel Vinil.

-la mirada de la menor fue atraída por una foto la cual tomó, en ella había una niña en el retrato, tenía el cabello corto hasta el hombro y no pasaba de unos 8 años.

-¿Eres tú?- preguntó sorprendida, Velkan miró a la chica mientras la canción comenzó a sonar y se acercó a ella.

- Hey, ¿como llego eso ahí?- intentó arrebatar la foto pero la menor no se lo permitió.

-eras adorable. - dijo en un tono de voz meloso.

-hey, no seas malcriada y dame la foto. -  Velkan comenzó a reír, ella y se negó.

-no lo haré, quiero verla un poco más- dijo entre risas mientras la mayor la tomó de la cintura, la menor se sonrojó volviendo la mirada a la mayor ya que la había abrazado por detrás.

-suelta.- dijo Velkan en todo suave, mientras le miraba, Ahsley casí dejó caer el cuadro pero Velka lo sujetó antes de y le soltó la cintura.

-dijé que lo soltarás pero no hablaba tan en serio- bromeo, Ahsley río nerviosa. -boba.- dijo al ver que la mayor jugaba con ella.

Velkan sonrió.

-no tengo la culpa de que te veas tan adorable.- dijo.

Ahsley miró a otro lado apenada buscando una escusa para cambiar de tema.

-¿son yukatas japonesas?- preguntó al ver la ropa que estaba colgada en el perchero.

-son de mamá.- Veía a la joven tomar la ropa.

-prúebatela.- se acercó a ella y le ayudo a ponérsela por encima de la ropa.

-se te ve muy bien.- agregó la mayor haciendo que la menor se mirara al espejo y le veía, Ahsley estaba sonrojada.

-espera.- dijo y tomó del buró una adorno, era una peineta con una flor de cristal, un adorno para el cabello, se acercó a la menor y se lo puso.

-perfecto.- agregó, le tomó la mano y caminaron unos pasos hacia el centro de la habitación.

-my lady.- hizo una reverencia con caballerosidad.

-my lord.- Ahsley le siguió el juego, Velkan se acercó y puso una mano en la cintura ajena y con la diestra tomó la mano izquierda de la joven, Ahsley puso su mano derecha en el hombro de la mayor y comenzaron a bailar lento y suave al ritmo de la balada.
Así estuvieron unos segundos mirándose la una a la otra hasta que Velkan comenzó a acortar distancia, se detuvo mirando a la menor a los ojos como si pidiera permiso para continuar y Ahsley accedió acercándose a la mayor hasta que sus narices se rozaron y podían sentir el respirar de cada una.

-¿Ahsley?- una voz las hizo detenerse y se alejaron, ambas miraron a la puerta, se separaron unos pasos la una de la otra.

-aquí estabas.- dijo Vanessa apareciendo frente a la puerta que se había quedado abierta.

-¿por que estás vestida así? Me levanté y no te vi en la cama.- atacó con preguntas la recién llegada.

- ¿Qué estaban haciendo?- preguntó al ver que no contestaban.

-nada.- ambas dijeron a coro.

-Ahsley bajo a beber agua y yo no podía dormir, así que le mostraba la habitación favorita de mi madre.- agregó Velkan con naturalidad.

-oh, ¿enserio?- se dio el lujo de observar el lugar.

-Velkan tiene una foto de ella cuando era niña.- dijo Ahsly riendo mientras se quitaba la yukata.

-hey, mucha información.- rió la mayor.

-¿enserio? Quiero ver.- estaba emocionada la recién llegada.

-claro que no.- rió la mayor.

-¿que? ¿pero por que no?, Ahsley si pudo verla. -hizo berrinche.

-Por que Ahsley es una malcriada.- dijo Velkan con una sonrisa.

-oye.- achicó los ojos la menor y le sacaba la lengua mientras se quitaba la yukata.

-yo quiero ser una malcriada, dejame ver.- insistió.

-no.- rió la mayor y Ahsley no pudo evitar reír igual.

-no es justo.- se cruzo de brazos.

VELKANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora