Capitulo 2.

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Saliendo de su transe se dispuso a salir lo mas rápido que pudo de la habitación por que si ella se daba cuenta de que la había estado espiando aunque no fuera su intención lo iba a matar, bajo las escaleras y se sentó en el sillón a esperar a la joven. 

Eliza escucho un ruido, pero lo ignoro ya que de seguro había sido su imaginación, se puso un pantalón azul y una blusa blanca de tirantes, unas sandalias celestes con blanco, se dejo el cabello aun mojado suelto que le llegaba hasta la cintura y salió de su habitación en busca de su maestro. Lo encontró en la sala viendo las fotografías de su familia. 

¿Quiere algo de tomar? Tengo té y café.- Dijo tímidamente. 

Un café con leche por favor.- Dijo sonriendo mientras tenia la imagen de la joven desnuda en su cabeza. 

Está bien.- Respondió yendo al otro lado de la casa. 

Voy contigo.- Le dijo tomándola del brazo y caminando a su lado. 

Llegaron a la cocina y la joven se dispuso preparar café para ambos, saco un paquete de galletas y las puso en una pequeña charola en medio de la mesa donde el maestro ya estaba acomodado en una silla. 

Ya está el café.-Dijo Eliza poniendo las dos tazas en la mesa y sentándose frente a su profesor. 

Tú si sabes preparar café, si yo lo hubiera hecho seria un asco. Dijo sincero tomando una galleta y metiéndola en su boca. 

Gracias...- Dijo nerviosa. 

Y cuéntame, ¿qué te gusta hacer?, ¿cuántos años tienes?, ¿cuál es tu color favorito?, lo que sea, conozco mas o menos bien a todos mis alumnos, pero a ti no, ¿te caigo mal o algo por el estilo?- La cuestiono cambiándose de silla para estar al lado de ella. 

No, usted me caí muy bien, es solo que soy un poco tímida y emmm me gusta leer novelas, tengo 16 años, mi color favorito es el azul, por eso hice que mi madre pintara la casa de ese color, y usted ¿qué me cuenta?- Dijo tratando de sonar más calmada, aunque el corazón le latía a mil ya que su profesor estaba muy cerca de ella. 

Tu también me caes muy bien, aunque casi no te conozco, en fin, tengo 22 años, pero en casi un mes cumplo 23, también me gusta leer, pero no novelas de amor ni cosas de princesas, sin ofender claro, me gustan más los libros de acción, aventura, terror y mi color favorito también es el azul, ¿quieres saber algo más de mi?- Dijo con esa sonrisa que tanto le gustaba a la muchacha. 

Si, ¿cuándo cumple años? tal vez le pueda da un regalo... Y emmm... ¿tiene novia?- Le pregunto más nerviosa que nunca. 

Cumplo años el 11 de Noviembre, no tengo novia.... ¿y tú?- Pregunto bastante interesado? 

Yo cumplo años el 14 de Marzo y no, no tengo novio... Ni siquiera he dado mi primer beso.- Dijo lo último bastante avergonzada. 

¿Qué?, ¿lo dices enserio?, pero si tu eres muy linda, no puedo creer que nadie te haya besado.- Dijo totalmente sorprendido. 

Yo si lo creo, es que nunca he tenido novio y pues como soy muy antisocial nunca lo tendré.- Dijo encogiéndose de hombros y bajando la cabeza. 

Estoy seguro que en menos de lo que esperas tendrás tu primer novio y tu primer beso.- Le dijo el profesor tomándola suavemente de la barbilla levantándole la cabeza para que lo viera a los ojos. 

Ella se puso más roja de lo que estaba y se separo bruscamente, lo cual hizo que el maestro se riera en voz baja para no hacer sentir peor a su alumna y pensó que ese era el momento perfecto para preguntarle lo que lo ha estado carcomiendo de curiosidad los últimos meses. 

¿Te gusto?- Soltó de pronto mirando los ojos verdes grisáceos de la joven muchacha.

Si lo pregunta para burlarse de mí como lo hicieron todos mis estúpidos compañeros del colegio, no, usted no me gusta.- Dijo molesta levantándose de la silla.

No pensaba burlarme, me parecía muy tierno… Aunque solo es un rumor.- Respondió un poco desanimado debido a la que le dijo la muchacha.

Ah bueno y si me gustara, ¿qué?- Dijo tratando de ocultar su vergüenza.

No sé, dímelo tu.- Le dijo con su hermosa sonrisa acercándose a ella.

Yo… no sé, bueno usted es solo mi “amor platónico” por así decirlo…- Le contesto bajando la mirada para no encontrarse con los ojos cafés de su profesor.

Entonces, ¿podemos ser amigos?- Así que solo me ve como su “amor platónico”, eso debe cambiar, pensó él

Por mi no hay problema.- Dijo emocionada sentándose de nuevo frente a la mesa.

Okay. Y ¿te caí bien ese tal William? El chico nuevo.- Pregunto curioso.

Si, supongo, no lo conozco muy bien, pero parece buena persona.- Respondió ella.

Já, lo dudo…- Susurro el profesor.

¿Qué?- Pregunto Eliza al no escuchar lo que el dijo.

No, nada. Oye si vamos a ser amigos ¿Por qué no vamos a comer al centro comercial el Viernes después de clases?, vamos, yo invito o ¿crees que soy muy viejo como para invitarte a salir?.- Dijo sonriéndole tiernamente para que ella aceptará su propuesta.

Para nada, solo eres 6 años más grande que yo.- Respondió rápidamente ya que a ella no le importaba la edad de su maestro.

¿Eso es un sí?- Pregunto satisfecho por la respuesta de su alumna.

Pues si mi  madre no se niega, supongo que si.- Le dijo con una tímida sonrisa.

Excelente, entonces…- Se detuvo cuando escucho que su celular estaba sonando y lo sacaba de su bolsillo para contestar.

Hola, Sí, soy yo… ¿Dónde?, voy enseguida.- Dijo antes de colgar la llamada.

Me encantaría seguir conversando contigo esta tarde, pero tengo que irme, nos vemos mañana.- Dijo mientras caminaba asía la puerta.

Hasta mañana…- Respondió la muchacha sin razón ya que el profesor ya había salido de la casa.

Luego de que el profesor se fuera Eliza fue a la cocina a limpiar lo que había ensuciado y a preparar de comer para que cuando llegara su hermano ella solo le tenga que calentar la comida y servirle, cuando termino comió un poco y guardo el resto en el refrigerador. Subió a su cuarto y comenzó a hacer su tarea, una vez que termino se dispuso a leer una de sus novelas, el tiempo paso rápido y cuando miro al reloj noto que ya casi era hora de que llegara su hermano así que bajo a la sala a ver televisión en lo que llegaba su hermano.

Hola enana.-  Dijo su hermano abriendo la puerta.

Hola, ¿quieres comer?- Pregunto sin voltearlo a ver.

Claro, pero antes, quiero presentarte a alguien.- Dijo amable haciendo que la joven volteara a ver asía donde estaba su hermano y atrás del había una muchacha delgada, bonita, de alrededor de 19 o 20 años, cabello rubio y los mismo ojos de su profesor, lo cual le pareció coincidencia.

Ella es Samanta mi… novia.- Dijo nervioso caminando de la mano de aquella muchacha.

Oh… Hola Samanta, soy  Elizabeth, pero puedes decirme Eliza, soy la hermana Daniel.- Dijo saludándola cortésmente.

Hola Eliza, tu llámame Sam, espero que nos llevemos bien, ¿podemos ser amigas?- Dijo sonriendo tiernamente.

Por mi no hay problema y, oye, ¿nos hemos visto antes?- Pregunto Eliza tratando de recordar porque ella se le hacía tan familiar.

Seguro que si, Sam es la hermana menor de el profesor Alberto de tu colegio, seguro la viste con el alguna vez.- Respondió Daniel.

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El de la foto es Alberto!

Bajo La Lluvia...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora