Capítulo 32: Un hecho inesperado

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Llegamos con Zadisskkia quien está controlando a sus criaturas infundiendo miedo con gruñidos.

Kevin.- ¿Necesitas ayuda?.- Dice en tono burlón y  Zaddiskkia le responde con otro gruñido.

Hank.- No tienes por qué enfadarte, todo ha salido bien, los machos están ecerrados, y las hambras controladas ¿no?.- Zadisskkia no responde, solo se queda viendo a Hank y luego fija su mirada en Kevin.

Kevin.- ¡¿Qué quieres Zaddiskkia?!, ya hicimos el trabajo, no hay más peligro, deja que sigan con sus cosas.

Yo.- Si ya no hay más peligro ¿Qué sigo haciendo aquí?

Hank.- Ayudarnos, pero eso ya lo hiciste. Kevin, ya vendría siendo hora de llevarla a casa ¿no?

Kevin.- Está bien, la llevaré a casa.- Responde después de un largo suspiro.- Pero primero debemos volver a nuestra casa.

Regresamos al refugio y ayudo a Alex a levantarse para que nos vayamos.

Alex.- ¿Se terminó el sufrimiento?

Yo.- Si.- Le respondo alegre.

Kevin.- No hasta que lleguen a su casa. Prepárense, salimos ya.

Hank.- Iré con ustedes.

Kevin.- ¿Ah?

Hank.- Ya han pasado varios años desde la última vez que vi a Sergei, será una visita gratificante.

Yo.- ¿Quién es Sergei?

Kevin.- El jefe de la construcción.

Hank.- Es un buen hombre, no le falta carácter ni humildad.

Kevin.- Está bien, ya vámonos.

Debby.- Adiós Casey, espero ver..., espero no verte otra vez.

Yo.- Jaja, yo también pequeña.

Alex.- Bien amigos gracias por su hospitalidad.

Hank.- Despídete de Debby, de nosotros te despides luego.

La despedida es más corta de lo que esperaba. Al salir Kevin nos baja uno por uno hasta el suelo y seguimos andando muy tranquilamente, es raro ver a Kevin tan calmado.

Kevin.- Pronto estarán en casa, con sus familias, pero que quede claro que no podrán hablar de lo que pasó con nadie.

Yo.- Ya Hank me lo dijo, no te preocupes, no diremos nada. ¿No es así Alex?

Alex.- Ah, si.

El ruido de una roca callendo capta mi atención.

Kevin.- ¿Qué fue eso?.- Reacciona al instante sacando los cuchillos de sus botas.

Hank.- Porbablemente una rata. Recuerda que enjaulamos a todas las criaturas.- Dice despreocupado.

Yo.- ¿Pero estamos seguros de que los enjaulamos a todos?

Hank.- Si, y de no ser así, no creo que haya una criatura tan tonta para atacar sola.

Trato de despreocuparme pensando en lo que Hank acaba de decir pero aún siento que nos están observando.

Vuelvo a escuchar otro sonido pero sigo sin detenerme. Kevin también parece haber escuchado el mismo sonido y se detiene para asegurarse.

-¿Qué pasa?.- Le pregunta Hank molesto antes de que la criatura salte detrás de nosotros.

La criatura salta sobre Kevin y comienza a morderlo por todas partes, Kevin se lo quita de encima con un movimiento feroz. La criatura se incorpora rapidamente y ataca lo primero que ve, lo cual es la pierna de Alex, él cae y comienza a gritar.

-¡Auxílio!, ¡ayudenme!.- Alex no para de sufrir.

No puedo hacer nada, si me acerco la criatura me mata y si no lo hago, matará a Alex. Por suerte Kevin interviene clavando un cuchillo en la espalda de la criatura, ésta gruñe de dolor y muerde el tobillo de Kevin como venganza. Kevin cae al suelo pero antes de poder levantarse la criatura se acerca más al torso de Alex y le muerde las costillas. Los gritos del chico de 17 años se vuelven más profundos e intensos cuando la criatura se acerca a su cuello y le muerde la clavícula.

Al fin Kevin se levanta y hala a la criatura por el cuchillo que siguen en su espalda. El cuchillo desgarra la piel y se desprende, esto le da tiempo a la criatura para acercarse a la cara de Alex y arrancarle al oreja con los dientes. No puedo imaginar el dolor incesante que debe estar sintiendo Alex en este momento.

Kevin se harta de las herramientas y decide acabar con la criatura con sus propias manos, la aparta de Alex y le sujeta la cara, comienza a presionar con toda su fuerza, yo aprovecho el control de Kevin sobre la criatura y me acerco a Alex para tratar de consolar su dolor.

-¿Estás bien?.- Le pregunto pero no obtengo respuesta.- ¿Alex?.- Pongo mi oido en su pecho pero no oigo nada, tomo el cuchillo y lo pongo bajo su naríz pero no se empaña, ya me asusté. Trato de reanimarlo presionando su pecho pero no pasa nada.- Vamos Alex, no puedes morir ahora, no puedes morir así, no aquí, no puedes morir tan cerca de la orilla, ¡Alex despierta!.- Sigo tratando de reanimarlo y al final llego a la conclusión de que está muerto, mis manos ya están llenas de sangre y mi ropa se ensucia más cuando rompo en llanto sobre el cuerpo sin vida de un buen chico que murió sin haber logrado cumplir sus sueños.

-Casey.- Escucho la voz de Kevin acercarse a mí, me seco las lágrimas antes de mirarlo y luego voltear para ver a la criatura cuyo cráneo ha sido aplastado por Kevin.- Estamos a salvo.

Mi único instinto es levantarme y abrazarlo, necesito consuelo, no porque Alex fuera tan amigo mío, sino porque si no hubiera sido él tal vez sería yo o Hank quienes estaríamos en el suelo cubiertos de sangre sin rastro de respiración, y también porque sé que si no hubiera venido aquí para empezar esto nunca habría pasado.

-¡Oigan!.- Hank capta nuestra atención.- ¿Podrían ayudarme?

Vamos con él, está en el suelo, su silla fue volteada durante el enfrentamiento. Kevin devuelve la silla y a Hank a su estado original.

Kevin.- Hey, ah..., tenemos un problema.

Yo.- ¿Qué pasa?

Kevin.- El tanque de oxígeno de Hank está... tiene una fuga.

Hank.- Ese no es un problema grave. Ha pasado muchas otras veces, volvamos a casa para cambiarlo luego de llevar a Casey con Sergei.

Kevin.- Si, sobre eso..., no creo que a Casey le moleste volver al refugio una vez más.- Me hace una seña para que lo secunde.

Yo.- Ah..., si, no me molesta, de hecho, sí deberíamos regresar al refugio, creo que olvidé algo.

Hank.- Como ustedes quieran.

HangmanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora