Lo que veo me da asco, me sorprende que no esté tan horrorizada como pensé estarlo, un trozo de carne arrugada a la que parece que le arrancaron trozos de una capa de piel, es lo que parece el rostro de Hank, un simple trozo de carne.
-Gracias.- Se le escucha decir aún con la respiración entrecortada pero sin la interferencia de la máscara.
-Hank esto es...
-¡NO!.- Kevin me interrumpe al entrar a la habitación con el tanque de oxígeno.- ¡¿Qué le hiciste?!.- Deja el tanque en el suelo y corre hacia nosotros para revisar a Hank.- Por favor no hagas esto, te lo ruego, quédate con nosotro, ¡Quédate conmigo!.- No veo sus lágrimas pero sé que está llorando.
-Kevin, ya no me necesitas, cuida bien de Debby y saca a esta chica de quede aquí.- Hank me señala y termina su última frace.- Ella no es la misma mujer que buscabas, es mejor...
-¿Hank?.- Kevin pregunta y no obtiene respuesta.- ¡No!
-Kevin...
-¡¿Por qué lo hiciste?!
-Él me lo pidió, yo solo hice lo que él quería.
-¡¿Por qué no me esperó?!
-Su muerte era inevitable, él sabía que todo esto iba a pasar.
-Esto es tu culpa.- Me dice después de levantarse y antes de irse, detrás de él escucho el estruendo de la puerta cerrarse y veo la luz de todas las velas extinguirse, lo único que escucho es a Debby llorando en algún lugar del refugio.
Quedé en medio de la oscuridad, con el cadaver de un querido amigo, escuchando el llanto de una niña la cual lo admiraba. Las únicas personas en las que confío deben odiarme, Kevin no quiere ni verme y debe pasar lo mismo con Debby.
Entiendo por qué me odian pero yo también he perdido gente, esto me hace recordar a Shelby, Will y Alex, todos murieron por mi culpa y ninguno lo merecía, ahora yacen bajo tierra, lo peor de todo sería que sus familias no se han enterado y cuando salga de aquí, porque voy a salir de aquí, tendré que ser portadora de tan malas noticias. No sé cómo se los voy a decir "Señor, Señora, su hijo está muerto", desde que llegué no paro de ver gente morir, yo soy la única que ha sobrevivido la semana; no le estoy prestando atención a las necesidades vitales de un ser humano común, supongo que porque prefiero estar al pendiente de que mi vida corre peligro, sobrevivir es lo escencial.
Recuerdo las muertes de mis amigos y cómo sucedieron: Shelby murió por seguirme hasta el estacionamiento, las criaturas la devoraron frente a la puerta; Will se sacrificó para salvarme, escuché sus gritos de dolor y agonía desde no muy lejos; y Alex fue atacado por una criatura cuando pensamos que ya estaban todas encerrada, lo vi morir frente a mí y sé que no pude hacer nada para evitarlo, pero la culpa me carcome porque no intenté salvarlo.
Ahora que lo pienso, todos tienen algo en común, yo no conocía bien a ninguno de ellos; a Alex lo conozco desde los 13 y Shelby quizás desde los 10 y nunca me importó su existencia, a Will lo conocí digamos una hora antes de su muerte, de él solo tengo recuerdos de su demacrada forma física y su nombre, jamás llegué a conocerlo realmente. Con Hank pasa todo lo contrario, Kevin y Debby han estado con él 30 años, esa es una larga amistad y yo, una chica que conocen desde hace poco menos de una semana, llega y le quita la máscara. Kevin no tiene por qué culparme, pero es cierto, yo no debí ser quien le quitara la máscara, debieron ser ellos porque son su familia.
Pienso en salir del refugio a buscar a Kevin pero no puedo bajar el acantilado yo sola, no sé dónde está Debby pero creo poder encontrarla. Comienzo a buscar por todo el refugio y por alguna razón se me ocurre ver por la ventana, Kevin está ahí sentado al borde del rico; mi primera idea es salir y hablarle pero no sé cómo reaccione estando ahí. Mientras pienso qué hacer, mis piernas me conducen a la puerta y al mirar me encuentro girando la manija de la puerta.
-Hola.- Le digo sin controlar mis palabras.
-Hola.- Me contesta y ya no se oye tan molesto.
-Ya te dije que él me lo pidió.
-Lo sé, todos tenemos el mismo deseo, quitarnos esta horrible máscara.
-Si ya no hay radiación, ¿Por qué siguen con ellas?
-Porque....- Se detiene por un segundo y piensa bien lo que va a decir pero responde.- no lo sé, supongo que porque no queremos arriesgarnos.
-Y si por alguna razón se quitan la máscara y ven que no pasa nada, ¿Saldrían a la superficie?
-No, ya te dije que la luz no nos permite salir.- Comienzo a acercarme, tal vez demasiado rápido.
-Pero si hubiera una forma de que ustedes no...- El acantiladome interrumpe cuando estoy a punto de caer al vacío, pero una fuerte mano me detiene en el aire.- ..., gracias.- Le digo por heberme salvado por milésima vez.
-Mira por dónde caminas.
-Hay mucha oscuridad, a penas puedo ver. Volviendo al tema, lo que quiero decir es que no me siento bien sabiendo que hice algo que tú o Debby debían hacer, yo no soy nadie para llegar y...- Kevin me interrumpe levantando la mano para que me detenga.
-Entiendo.
-Entonces...
-Sabía que Hank iba a morir, no quería que fuera de esta manera pero creo que tengo que agradecerte, hiciste algo que yo no hubiera tenido las fuerzas para hacer, gracias.
-..., de nada.- Un silencio hinunda el momento en el que ambos nos quedamos viendo el vacío.
-Te llevaré a casa.- Kevin interrumpe el silencio para decir lo que he estado esperando escuchar desde que llegué.
-¿En serio?
-Si, ya basta de posponerlo, no es justo que yo te mantenga en este infierno. Nos vamos en unos minuros, es lo que tienes para disculparte con Debby y conseguir su perdón.- Se levanta y enciende la luz, luego me extiende la mano.- ¿Vienes?
-Claro.- Al fin puedo estar feliz, me voy a casa...