Ascender.

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AVISO: este capítulo tiene contenido sexual explícito y un poco de violencia. Lean bajo su propio criterio y responsabilidad :3 listo ¡Lean!

Hiccup y Elsa habían vuelto por la noche recobrando la calidez que tenían antes de que la albina fuera encerrada.
La gente en el campamento se veía agotada pero optimista, mas al ver llegar al futuro rey, eso les daba bastante ánimo para seguir.

-Te dije que mandarlos solos serviría- dijo Valka a Estoico con una sonrisa mientras veían a ambos chicos acercarse.
-Tú siempre tienes la razón- respondió el hombre besando su mano.
-Ya era hora de que regresaran... Los esperábamos mas temprano- dijo con gran entusiasmo Tadashi abrazando a Hiccup.
-Nos entretuvieron un poco en el camino... ¿Haz estado bebiendo?- preguntó el castaño a su hermano con una sonrisa.
-Tanto como el rey lo ha permitido- respondió el menor.
-Ohh... Debe ser bastante entonces...- dijo Hiccup caminando con él hacia los demás.

-¿Qué tal la boda, Elsa?- preguntó Astrid a la albina dándole un plato con comida.
-Muy seria- rió la chica -En realidad extrañaba esa clase de celebraciones- volvió a decir con una sonrisa melancólica -¿Todo bien en el frente?- preguntó para cambiar el tema.
-Es terrible... Llevamos algo de ventaja, pero obtenerla es... Bueho, ya sabes, es una guerra- sonrió Astrid con tristeza.
-¿Extrañas a Arya?- preguntó Elsa nuevamente con una sonrisa.
-Muchísimo... Sólo espero que Gobber y Anna cuiden bien de ella- contestó la rubia recuperando el brillo en su mirada.
-¿Porqué viniste y dejaste a Arya sola?-
-Antes de ser madre fui jinete y guerrera, Elsa. Así somos en Berk, peleamos por nuestros hijos- dijo Astrid mirando a la chica con una sonrisa -Debo dormir, mañana será difícil- volvió a decir poniéndose de pie.
-Descansa, Astrid- se despidió la albina mirando a su amiga entrar a su tienda seguida por Eret.

*/*/*

-¿Así fue la primera vez que saliste a pelear?- preguntó Elsa acostada de lado mirando hacia las sombras del fuego dentro de su tienda.
-No... No estabas tú- contestó Hiccup recostandose detrás de ella y besando su nuca.
-¿Tienes miedo?- preguntó nuevamente liberando un pequeño suspiró al sentir la mano del chico recorriendo sus piernas.
-Contigo aquí, no- respondió con voz ronca el castaño. En ese momento no tenía intenciones de responder aquel cuestionario con lujo de detalle e hizo que ella lo entendiera llevando por fin su mano hasta su entrepierna. Sonrió al darse cuenta de que la chica había arqueado un poco su espalda ante aquella acción y besó su cuello para dar inicio a un juego con sus dedos que comenzaría a volver loca a Elsa.

Elsa cada vez arqueaba mas su espalda liberando ligeros suspiros y gemidos, logró emitir uno mas fuerte al sentir justo detras de ella la erección de Hiccup. No supo porque en ese momento el recuerdo de que Anna estaba embarazada y lo que Astrid había dicho llegó a su mente

-Hiccup...- logró decir con su respiración agitada -Quiero intentarlo de nuevo-
-¿Cómo?- preguntó el castaño deteniendo sus besos y caricias.
-Quiero intentar de nuevo- repitió la albina girando un poco para mirarlo.
-De acuerdo... ¿Te molesta si empiezo ahora?- sonrió Hiccup besandola con fuerza y recuperando el juego que su mano llevaba a cabo entre sus piernas.

Dejó de besarla para alzar un poco una de sus piernas y poder introducirse en ella. Comenzó a embestirla con calma, disfrutando de lo bien que se sentía estar con ella de esa manera, mas dos veces en el mismo día. Sus movimientos fueron subiendo de velocidad haciendo que Elsa se aferrara con fuerza a las cobijas y reteniendo gemidos en su boca, pero eso no era lo que él quería así que con rapidez y un poco de rudeza cambió de posición a la chica quedando sobre ella.
Comenzó a moverse con mas fuerza y rapidez a medida que la albina movia su cadera, sin embargo aún no lograba que dejara salir ruido alguno de su boca mas que suspiros. La sujetó con fuerza de una de sus piernas con una mano para profundizar sus embestidas mientras que con la otra se sostenía de la pequeña cabecera sintiendo como Elsa se aferraba a su espalda rasguñandola y mordiendo su hombro para evitar hacer ruido pero le fue imposible. Por fin había llegado a su límite y soltó un pequeño grito seguido de varios gemidos que estaban volviendo loco a Hiccup.
Elsa hizo que se detuviera para girar hasta quedar a horcajadas sobre él, no esperó ni cinco minutos para que el ritmo que llevaban hace interesantes volviera, se movía con rapidez mientras que Hiccup la tomaba con fuerza de la cadera para intensificar sus movimientos mientras la miraba con la vista totalmente nublada de placer.
Desesperado, volvió a hacer que Elsa quedara debajo de él y continuó con el mismo ritmo de antes pero con mas fuerza. La albina se sujetaba con fuerza de él y las cobijas mirando por momentos la sombra de ambos y sin poder aguantar cualquier tipo de sonido en su boca.
Pronto ambos sintieron un gran calor acumulandose con fuerza acompañado de descargas eléctricas, sus cuerpos reaccionaban por inercia acelerando el ritmo de los dos hasta que esa pequeña explosión complementaria de placer llegó a ellos. Elsa sintió la erección de Hiccup tensarse dentro de ella justo en su último orgasmo que vino acompañado de un grito suyo y otro mas ronco de él, sintiendo como la esencia del castaño la invadía en su interior.
Tras unos minutos ambos recuperaron el aliento y se permitieron dormir, sabían que podían continuar de esa manera toda la noche, pero les aguardaba un día incierto y difícil para el cual debían descansar.

Kings and Queens.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora