Justo en el blanco.

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-Ahora ya no piensas lo mismo de mi ¿Cierto?- preguntó Merida sin dejar de mirar a Elsa hablando con Dracula. -No es eso... Conozco a Hiccup desde hace mucho tiempo y sé que esas cosas son difíciles para él, y aunque me sorprende lo que acabas de contarme, no cambia en nada mi idea sobre ti- sonrió Flynn relajado.
-¿Crees que deba hablar con ella?- cuestionó la pelirroja torciendo la boca.
-Mejor deja que ella lo haga, debe tener muchas cosas en la cabeza ahora mismo- contestó el chico señalando con su mirada a Ragnar en brazos de Hiccup.
-Tal vez deba irme- dijo Merida con tristeza.
-O tal vez debas quedarte y celebrar conmigo ya que eres mi acompañante- Flynn intentó animarla invitandola a bailar con el resto.
La pelirroja sonrió y rodando los ojos aceptó la invitación del chico.

*/*/*

-¿Eres... Eres mi padre?- preguntó Rapunzel perpleja por tantas emociones al mismo tiempo.
-Supongo que es muy tarde para admitirlo ¿No?- sonrió Easter acercándose a ella.
-Un poco... Pero supongo que jamás es muy tarde para algo- dijo la rubia con los ojos cristalinos observando cada detalle del hombre frente a ella.
-Te ha ido bien... Eres esposa de un príncipe- el azabache tomo un cadejo del cabello de su hija sonriendo.
-Lo que cualquier chica del bosque desearía- sonrió Rapunzel dejando caer unas lágrimas.
-Mi flor dorada...- murmuró Easter al tiempo que abrazaba a la rubia con fuerza.
-Papá...- sonrió la chica abrazandolo con mas fuerza y comenzando a llorar.

-Que hermosa escena, en serio- dijo Once ler figiendo un tono de llanto.
-A mi me parece que en verdad lo es- rió Elsa con ternura.
-Sabía que no podría resistirse a conocer a sus nietos- sonrió triunfadoramente Dracula.
-Son un par de bebés hermosos- suspiró Elsa.
-Tal vez tanto como Ragnar- rió Hiccup junto con los demás.
-Hablando de eso... Él debe ir a dormir, regreso en unos minutos- habló Elsa con seriedad y tomando a su hijo para marcharse.
-¿Todo bien, alteza?- preguntó Dracula al castaño mientras ambos miraban a la albina retirarse.
-Ya deberías saberlo- contestó Hiccup rodando los ojos y volviendo a la celebración.

El resto de la noche fue toda una celebración; tras un par de horas mas las sospechas de Hiccup se hicieron realidad cundo Tadashi anunció su boda con Heather mientras que Rapunzel bailaba y disfrutaba de las historias que su padre y sus tíos le contaban a ella y al resto de sus amigos. Hiccup permanecía sentado en su trono hablando y bebiendo por la felicidad de su hermano mientras veían a Elsa bailar con mas entusiasmo que otras veces en el centro con Astrid y algunas otras chicas, por el rostro tan sonrojando y desaliñado de la albina se podía adivinar que había bebido lo que era demasiado para ella pero parecía divertirse con ello.

Al otro día Elsa se encontraba en un salón leyendo documentos de Arendelle y cuidando de Ragnar intentando alejar sus pensamientos de su pelea con Hiccup por la noche, cada que lo recordaba se apartaba de su escritorio para cargar al bebé o acercarlo a la ventana por un momento. Desde su discusión, no había hablado de manera formal con el castaño, él tan solo había optado por salir temprano por la mañana a despejar su mente con Chimuelo y no había vuelto desde entonces. Se comportaba como un chiquillo nuevamente.

-Muy bien, Ragnar, solo falta que mamá redacte una carta y podremos estar juntos toda la tarde- sonrió la albina dejando al bebé en una pequeña cuna.
-Disculpe, alteza, la princesa Merida Dunbroch ha pedido una audiencia con usted- interrumpió una mujer desde la puerta.
-Las audiencias son cuando Hiccup está aquí y en el salón del trono...- contestó Elsa con voz seria sin dejar de escribir.
-La pidió a solas, alteza- insistió la mujer.
-De acuerdo... Dile que pase- suspiró la albina.

Merida entró nerviosa pero decidida dando las gracias a la sirvienta por anunciarla y permaneció de pie unos metros mas atrás de Elsa.

-Déjanos solas, Helga- ordenó la albina.
-¿Me llevo a Ragnar?- preguntó la mujer antes de salir.
-No... Ya ha pasado mucho tiempo con niñeras, gracias- sonrió Elsa y después Helga salió del salón.

Kings and Queens.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora