Kings and Queens.

Helvegen.

-Muy bien... Rescatemos a Tadashi y salgamos de aquí. Este lugar me pone los pelos de punta- dijo Merida bajando de Enya y mirando el panorama que todos tenían enfrente.
-No solo hemos venido a eso- habló Jack cansado y mirando a Hiccup.
-Ya saben que estamos aquí- dijo el castaño mirando el movimiento de las personas.
-¿Y cuál es el plan?- preguntó Eret directamente con Hiccup.

Mientras ellos hablaban Jack y Merida seguían perdidos en el panorama, era tan tétrico o aún mas de lo que se habían imaginado. No había ni una sola señal de vida natural y mucho menos de alguna luz, era como si en ese lugar siempre fuera de noche.
Aparte de las fuerzas que Pitch tenía ahí, también estaban algunas de Drago aunque de él aún no había alguna señal.
-Realmente es como venir a algún tipo de infierno- dijo Kristoff uniéndose a ellos.

-Mer, tú y yo nos adelantaremos para buscar a mi hermano- indicó Hiccup subiendo en Chimuelo -Los demás estén listos, en cualquier momento vendrán por nosotros-
-No demoren tanto en regresar- contestó Kristoff preocupado.
-Lo intentaremos... No arriesguen su vida si no es necesario- sonrió el castaño y después se marcho con Chimuelo mientras que Merida lo seguía con Enya.

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-¿Disfruta la fiesta, alteza?- preguntó una mujer a Elsa.
-Bastante, gracias... Tenía tiempo que no pasaba un rato como éste- rió la albina.
-Su padre estaría orgulloso, logró unir a Arendelle con otro reino al final de todo, aunque no con el Norte- rió otro hombre que se encontraba presente.
-Yo siempre creí que Berk era un mejor partido con respecto a alianzas y los hombres- se burló la mujer.
-¿Los hombres?- preguntó Elsa comenzando a reír -Gracias por sus palabras... Ojalá fueran momentos mas pacíficos para celebrar esto- siguió diciendo.
-Oh, no tema. Pronto todo terminará para bien, sé que ha estado ocupada ayudando-
-Si, lo había estado haciendo- sonrió la albina con nostalgia -Me disculpan, debo salir a tomar algo de aire- dijo con tranquilidad saliendo de la celebración.

Al llegar al jardín respiró profundamente, durante toda el día después del desayuno se había sentido mal, nada que no fuera normal para ella en los últimos días. Necesitaba respirar y armarse de fuerzas para volver a la pequeña fiesta por su coronación.
Observó lo que quedaba de la puesta de sol pensando en Hiccup y sus amigos, era algo que realmente le preocupaba por momentos.

-Tal vez me preocupo demasiado...- se dijo a si misma mirando al cielo con una sonrisa mientras que sus manos permanecían en su pecho.

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Tadashi recobraba el conocimiento para darse cuenta de que seguía en la misma habitación encadenado y con Heather tirada en el suelo frente a él de la misma manera en que había caído tras ser herida por Pitch.

-Heather...- la llamó con voz débil pero no recibió ninguna respuesta.
-Por favor... Di algo- volvió a decir preocupado ante el silencio y el aspecto pálido de la chica.

Molesto y desesperado comenzó a forcejear para intentar liberarse pero su debilidad era conciderableme en ese punto. Se detuvo con resignación escuchando a la gente de aquella construcción gritar cosas casi incomprensibles para él.

-Sabes que no podrás salir, Tadashi- se burlo Dagur entrando a la habitación.
-¿Qué haces aquí?- preguntó el azabache molesto.
-Pitch me dio la tarea de terminar la agonía de Heather, pero parece que ya no es necesario- habló de pelirrojo mirando a la chica en el suelo -Es una lástima- sonrió.
-Te ves fatal, Tadashi... Alégrate, tú hermano está aquí y regresarás a casa. No te molesta hacerlo solo ¿Verdad?- dijo Dagur mirando a Tadashi con una sonrisa frívola y después salió del lugar.

-¿Hiccup?- se preguntó Tadashi a sí mismo mirando hacia la ventana algo lejos de él.

-¡Hiccup! ¡¿Cómo planeas saber dónde esta tu hermano?!- gritó Merida al castaño mientras exploraban los alrededores de la construcción.
-Tendremos que entrar, ahora que todos han salido es el momento- contestó el ojiverde haciendo que Chimuelo descendera un poco.