Capítulo cuatro.

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"Matthew Espinosa y Felicite Wells, acaban de confirmar su relación con un post en Instagram. La pareja, quienes se conocieron este año durante la filmación de "Afortunada Coincidencia", gracias a Jamie Tam, la mejor amiga de Felicite, se lucieron muy felices en las playas caribeñas. Ambos están tomándose unos días libres antes de que la gira de promoción de la película los haga viajar de un lado a otro. Estos dos no parecen tener suficiente del otro."

El mundo debe estar confabulado en mi contra o algo por el estilo. ¿Por qué justo ahora tenía que salir esa noticia? ¿Por qué ahora que estoy tratando de olvidarlo?

Cielos, incluso se me dificulta respirar.

- No lo vale, Summer. – me asegura Aaron, notando mi reacción ante la noticia. – Lo olvidarás por completo, me encargaré de eso.
- Gracias, Aaron, eres el único en quien puedo confiar. – él me mira con ternura y acaricia mi mejilla suavemente. Desearía amarlo con tanto fervor como él a mí. – Ya sobrevivimos dos años, él no puede arruinarlo todo.
- Esa es la actitud, Summer. – dice sonriente. – Ahora, termina ese café y luego iremos a dar un paseo.
- Pero si ya iremos a caminar en la tarde. – me quejo, no soy una chica que guste de hacer ejercicio.
- Podemos ir antes y en la tarde ir a tu casa a ver una película.
- Necesito terminar unos bocetos, podemos ver la película mientras hago eso.

La tarde con Aaron transcurre rápido, como siempre que paso tiempo con él. Me hace reír tanto que me duele el estómago y mis mejillas se adormecen.

Podría estar con él, pero en este momento, con la repentina irrupción de Matthew en mi día, mi cabeza no hace más que recordarme todo lo ocurrido con él.

Bien hecho, corazón, gracias por volver este día un martirio.

- Gracias por una tarde maravillosa, Summer. – dice Aaron mientras nos acercamos a la puerta. – Espero poder verte antes de que cumplas 50, porque últimamente solo puedo hacerlo una vez a la semana y eso sólo es si no me cancelas por alguna tarea o presentación. – río. – Es cierto, incluso mis seguidores están reclamándome porque no has aparecido en ningun video desde hace un mes.
- A penas acabe el semestre, tendré tiempo de nuevo. Y no eres el único que recibe quejas, mis seguidores también me amenazan porque no subo videos contigo.
- Bueno, tendremos que ver alguna forma de solucionar eso. – dice, mostrándome esa sonrisa que ha iluminado mis días desde hace dos años.
- Tal vez la próxima semana. – le sonrío y él toma una de mis manos. – Siento no haber ido a verte la semana pasada.
- Tranquila, entiendo que seas tan dedicada a tu carrera. – toca mi nariz con su dedo índice al hablar. – Me gusta eso de ti.
- Me gusta que te guste. – lo abrazo y le doy un beso en la mejilla a modo de despedida. – Te llamaré antes de que acabe la semana. Estoy segura de que podré encontrar algunas horas libres para ir por un café o grabar algo.
- Perfecto. – dice sonriente y me devuelve el beso. – Hasta pronto, Summer.
- Hasta pronto.

Los días siguientes transcurren tan rápido que cada atardecer le ruego al sol que no se oculte. Siento que el tiempo está corriendo, pero no es nada fuera de lo normal, desde que entré a clases me pasa eso. Sin embargo, ahora estoy más sumergida en trabajos que antes. Eso, en cierta forma, es bueno, así no tengo tiempo de escuchar las nuevas noticias sobre Matthew y su novia.

Un sábado por la mañana, mientras ordeno un poco mi cuarto para grabar un nuevo video con Aaron, encuentro un álbum de fotos que no había visto desde que me mudé a Londres. Tiene fotos de todo tipo y, en su mayoría, de recuerdos que quería conservar de mi tiempo en Los Angeles.

Mientras voy pasando las paginas, no me sorprende no ver ninguna con Matthew. Me encargué de deshacerme de toda evidencia que me vinculara con él, antes de venir a Inglaterra. En su lugar, coloqué las últimas fotos que tenía con Melanie y con Aaron, prometiéndome que jamás volvería a sentirme mal por él.

Vaya, como cumples tu promesa, Summer.

Me quedo viendo la última foto por unos segundos y luego me decido a cerrar el libro. Lo dejo sobre mis piernas el suficiente tiempo para notar que algo sobresale de la última pagina y lo saco rápidamente.

Me arrepiento en el segundo que veo su rostro.

Es una foto de Matthew.

- ¿Summer, estás lista? – pregunta Aaron dese el pasillo y guardo la foto en el álbum lo más rápido posible.
- ¿Qué demonios me pasa? Es Matthew, el mismo que me rompió el corazón hace dos años, el mismo que supuestamente pregunta por mí todos los días a pesar de tener novia. 

No merece que piense en él, merece que lo olvide por completo.

Capítulo de casi medianoche para todas ustedes, nenas hermosas! Gracias por leerme, son extraordinarias!
Las amo!

Cuando te vuelva a verDonde viven las historias. Descúbrelo ahora