Capítulo 22

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Me aparto ligeramente. Nos miramos y sonreímos.

Álex: ¿Entonces te quedas?

Valeria: ¡Álex!

Álex: Vale, vale, no pregunto más, que era una broma, tonta, no te enfades.

Valeria: No me enfado.- pasa una mano por el entrecejo, no me he dado cuenta que lo estoy funciendo.

Álex: Así mejor.

Valeria: ¿Seguimos corriendo?

Álex: Tenemos que esperar a que venga mi hermano...

Valeria: ¿Lo habíais organizado?

Álex: Sí, no mates.- dice encogiéndose y protegiéndose con los brazos.

Valeria: No te voy a matar, hoy no.

Álex: ¿Va a ser una cosa de esas que cuando menos me lo espere zas?

Valeria: Puede ser que sí, puede ser que no.- vemos como aparece la figura de Marc, en unos segundo llega hasta nosotros.

Marc: ¿Lo habéis arreglado?

Valeria: ¿Pero cómo se te ocurre dejarme con el colgado de tu hermano?

Álex: Eh que sigo aquí.

Marc: Importas poco.

Álex: Pues muy bien.- se acerca Marc y le da una colleja que suena bastante, en ese momento Álex echa a correr y Marc lo sigue. Yo no paro de reírme, estos dos son únicos. Animan hasta a un muerto. Álex ya vuelve aunque sigue corriendo y Marc andando.

Álex: Creo que la bala ha sido más rápida que la hormiga.

Valeria: Álex 1, Marc 0.

Marc: A ver quién es más rápido pensado.- Marc se acerca a Álex y le da otra colleja.

Valeria: Va parar la pelea de collejas ya, que quiero seguir corriendo.- pasan de mí, así que sigo corriendo, poco después los dos están corriendo a mi lado. Cuando nos cansamos volvemos para casa. Cada uno de va a su casa a ducharse. En la ducha recapacito lo que me ha dicho Álex, puede ser que me quiera y que en poco tiempo se haya enamorado de mi. Yo no sé si estoy enamorada de él, pero tengo claro que me gusta, me encanta y quiero que sea parte de mi vida.

Mi madre aún no ha ido a ver a Roser desde que llegó, creo que va siendo hora de que hablen, de todo lo que pasó y se pidan perdón. Se me ha ocurrido un plan.

Valeria: Mamá subo a mi habitación que estoy un poco cansada.

Mamá: Vale hija.

Cuando estoy en mi habitación le mando un mensaje a Roser, Roser ayudame creo que he metido la pata, ¿puedes venir a mi casa? Al momento recibo respuesta de Roser, estoy un poco nerviosa. Suena el timbre. Supongo que mi madre abre, yo bajo las escaleras, sin darles tiempo a hablar.

Valeria: Mamá, Roser, Roser, mamá, creo que va siendo hora de que habléis y solucionéis vuestras diferencias, y yo no me voy a mover de aquí hasta que lo hagáis.- las dos están quietas la una frente a la otra, de repente Roser abraza a mi madre y mi madre la abraza a ella.

Roser: Siento mucho lo que pasó, no tendría que haberte distraído, lo siento.

Mamá: Roser con el paso del tiempo me he dado cuenta que no fue culpa de nadie, si no que pasó y como lo que pasó pasado está...

Roser: Te he echado de menos.

Mamá: Yo he echado de menos todo esto y a ti y a los niños y a Julià y ver a mi hija feliz...

Roser: Ahora tendremos que ponernos al día, ¿qué tal con...?- le hago señas por detrás para que no siga hablando.

Mamá: Nacho y yo nos separamos.- Roser enmudece de repente.- Vamos pasa al salón y hablamos.

Me vuelvo a mi habitación oyendo como Roser le pide perdón a mi madre como si no hubiese un mañana, ahora solo queda que mis padres entren en razón y vean que no pueden estar el uno sin el otro, que no solo les uno yo, si no que el amor que se tienen el uno por el otro es mucho más fuerte que lo que haya pasado para que se vayan a divorciar, porque no me creo que en dos días que yo he pasado aquí ellos se quieran divorciar.

Hola chicas, mis vacaciones han acabado y volveré a subir normalmente cada día. Gracias por leer y votar 😘😘😘💙.

La chica de CerveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora