La chica de Cervera

Capítulo 14

Acortamos distancias, nuestros labios se rozan, se mueven a la vez, ninguno de los dos se atreve a meter la lengua en la boca del otro. Me separo, lo miro y sonrío, él se aleja un poco más y me mira, una preciosa sonrisa sale de sus labios.

Álex: Falta el postre.

Valeria: A ver con que me sorprendes.

Álex: Para empezar cierra los ojos y mira al frente.- hago lo que me dice. Noto como se sienta a mi lado.- Vale, girate hacia mi con lo ojos cerrados.- me giro.- Abre la boca.- hago lo que me dice.- Muerde.- muerdo y por el sabor sé que son fresas con chocolate, estas buenísimas. Me encantan.

Valeria: Me encantan, están riquísimas.

Álex: Son de mis potres favoritos.

Vamos comiendo las fresas hasta que llegamos a la última, se que le gustan así que se la dejo, pero el tampoco la quiere coger.

Álex: Va, cometela, sé que lo estás deseando.

Valeria: Pero a ti te gustan mucho.

Álex: Va, cometela.

La cojo y me la meto a la boca mirándole. Cuando dejo el rabito de la fresa a un lado Álex se abalanza sobre mí. Me besa, roza mi labio con su lengua y la abro. Nuestras lenguas se encuentran y empiezan a moverse juntas, Álex recorre mi boca con toda su lengua. Muerde mi labio lentamente y lo suelta. Sonríe.

Álex: La fresa sabía mejor de tu boca que del plato.

Valeria: Así que lo hacías por eso pillín.

Álex: El otro beso me ha sabido a poco.

Valeria: A mi también, este ha sido uno de los mejores besos.

Álex: Oye, terminamos el juego ese de las preguntas.

Valeria: Vale, empieza tú.

Álex: ¿Cualquier tipo de pregunta?

Valeria: Sí, a mi me da igual.

Álex: ¿Con cuántos te has liado?

Valeria: Liarme de besos con cuatro, y de novios ya te he dicho que dos. ¿Quién es Paula?

Álex: Antes ella me gustaba, empezamos a salir y tal, pero llegó un momento en el que no se fiaba de mi y me montaba broncas por nada y decidí cortar por lo sano, pero últimamente me está acosando y ya no sé como decirle que no quiero nada con ella.

Valeria: La próxima vez que te llame pasamela que me voy a echar unas risas.

Álex: No seas mala, ¿Qué sientes por mi?

Valeria: Esto lo hablé con Marc, creo. A ver tú me gustas mucho físicamente, eres guapo, alto, estás bueno, tus ojos son preciosos y tu sonrisa más. Me gustas, pero yo ni te quiero ni te amo ni nada de eso, porque te tengo que conocer personalmente primero, a ver me refiero a como eres y eso. ¿Y tú por mi?

Álex: Pues eres una chica preciosa, guapa, tus ojos son los ojos más bonitos que he visto, tienes un cuerpo de infarto y tus curvas me gustan más que las de un circuito, pero opino como tú, creo que me gustas pero te quiero conocer más para saber si podemos tener algo y puede durar.

Valeria: Sí, porque yo en Madrid, tú aquí y a veces por medio mundo ya me dirás tú a mi como se hace eso porque madre mía.

Álex: Vale jajajajaja.

Tengo un poco de frío, me acurruco un poco más cerca suyo.

Álex: ¿Tienes frío?

Valeria: ¿Cómo lo sabes?

Álex: Tus manos están mas frías que las de Elsa.- se quita la chaqueta y me la da.

Valeria: Gracias.

Álex: Agradeceme por otras cosas y no por esto que lo hago encantado.

Valeria: Bueno da igual, gracias.

Álex: Eres tonta.

Valeria: Ya, ya lo sé.

Álex: ¿Quieres ir yendo para tú casa?

Valeria: Vale, pero te ayudo a recoger esto.

Álex: No te preocupes que llamo a mi padre y Marc y ellos vienen a recoger ahora.

Valeria: Vale.

Vamos hacia mi casa que está en frente de la suya, cuando llegamos a la puerta yo subo las escaleras y él se queda abajo, ahora soy un poco más alta que él. Me da un pico en señal de despedida, pero no quiero que se vaya.

Álex: Bueno yo me voy a casa.

Valeria: No, quedate, sólo un ratito, por favor.

Álex: Está bien.