Capítulo 54

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Aparca el coche y subimos en el ascensor, no nos olvidamos a Alva. Nos miramos con lujuria, la verdad es que hay ganas, llevamos a palo seco por lo menos 5 o 6 semanas. Álex se acerca, me agarra por la nuca y me besa descontroladamente. Las puertas del ascensor se abren y nosotros salimos sin despegar nuestros labios. Al principio nuestros labios se rozaban, pero ahora nuestras lenguas se buscan. Cuando llegamos a nuestra puerta Álex abre con su llave. Seguimos para adentro y cerramos. Nuestra ropa vuela por la casa. Cada vez hay menos ropa que nos molesta. Una vez que hemos subido a nuestra habitación cerramos la puerta y le ponemos el seguro, no queremos interrupciones de la perrita o de quien quiera que sea. No me he fijado como ha quedado el cuarto, aunque ahora es lo que menos me importa.

Álex me quita la ropa interior, y yo le quito a él su bóxer. Saca un preservativo de la mesilla y se lo coloca. Se pone encima mio y me besa por todas partes, el cuello, los pechos y hasta el ombligo. Me besa en los labios mientras entra en mi. Los dos gemimos del placer, nos besamos y nos deseamos con fuerzas hasta que ya no podemos más y los dos llegamos a lo más alto, no a la vez, pero llegamos.

Álex me besa y me tapa con la colcha. Me retira un mechón de pelo de la frente. Nuestras respiraciones ya vuelven a la normalidad.

Álex: Eres maravillosa Val, no por esto sino por todo.

Valeria: No digas tonterías anda, no me seas cursi.

Álex: Cada vez que te piropeo soy un cursi, pues ya no te voy a decir nada.- pone morritos de enfadado, yo los atrapo con un beso.

Valeria: ¿Qué haría yo sin mi niño cursi?

Álex: Pues nada...

Valeria: Ay mi tontorrón.- le beso.

Álex: Ay mi tontita.

Valeria: Hemos estado tres semanas sin vernos y me han parecido meses. Te he echado muchísimo de menos.

Álex: Y yo a ti, pero así la pareja se hace más fuerte, eso me lo ha dicho mi hermano para que te lo dijese porque se lo dijo a Zaira y se enamoró de la frase.

Valeria: Pero a mi no me enamoran las frases a mi me enamoras tú con el día a día y con cada una de tus acciones.

Álex: Oh que mona mi niña.- le beso. Necesitaba algo así después de mucho tiempo sin vernos pensé que la chispa no estaría.

Valeria: Te quiero mucho larguirucho mío.

Álex: Y yo pequeñina.

Nos quedamos un rato más en la casa nueva. Nos vamos cuando Alva llega a nuestro cuarto y rasca la puerta, cogemos mi maleta y nos vamos a mi casa dando un paseo. Cuando llego están mi madre y Roser hablando. Álex llama a Marc para no estar nosotros tan solos.

Marc: ¿Ya le habéis dado a la zambomba?

Valeria: Ay cuñi si tú supieras todos los instrumentos que hemos tocado, la zambomba, las maracas, los bombos...

Marc: No quiero detalles.

Valeria: No preguntes.

Álex: Marc vas a perder como la vaciles.

Marc: Torre humana dejame hablar con mi cuñada. ¿Qué tal Zaira?

Valeria: Me ha dicho que te diga que está bien, que te echa de menos y que la llames a la noche, a las 10 o así.

Marc: Vale.

Valeria: Y que te quiere mucho.

Álex: Mi novia es una paloma mensajera de novios.

Marc y Valeria: Será idiota.

Marc y yo chocamos las manos y nos reímos de nuestra compenetración. La cara de Álex es genial, está entre asombrado y celoso. Me levanto y me tiro encima suyo.

Valeria: Tontito mío, tu hermano y yo sólo somos amigos y cuñados, nada más, no te pongas celoso.- le susurro en el oído.

Álex: Lo sé, estoy muy tranquilo, es que te quiero y no quiero perderte.

Valeria: No lo harás a no ser que hagas una idiotez.

Álex: Que no va a pasar.

Marc: Me he perdido.

Valeria: Pues buscate.

Álex se ríe de lo que he dicho aunque me parece penoso, porque es muy malo. Me recuerda a mi y mis amigas en clase, nos lo decíamos cuando nos perdíamos en clase, así nos reíamos, que triste.

La chica de CerveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora