La chica de Cervera

Capítulo 44

Entre los cuatro la mañana se me había pasado volando, pero el bus de Zaira se ha adelantado y se ha tenido que ir, mientras Marc la llevaba a la estación yo he estado con Álex hablando del final de temporada y de mis exámenes. Me traen la comida sosa del hospital, pero como tengo el brazo derecho escayolado tengo que comer con la izquierda. Intento llevarme la cuchara con arroz a la boca, pero se me cae, Álex se ríe.

Valeria: Oye tú no te rías.

Álex: Anda trae que ya te doy yo de comer como a un bebé.-le paso la bandeja y me da de comer. Cuando estamos con el postre entra Marc.

Marc: Uy los tortolitos...

Álex: Marc cállate.

Marc: Uy que agresivo, como se nota que hace mucho que la pistola no dispara balas.-escupo el yogur que me estaba comiendo, mis carcajadas son muy sonoras, Álex me fulmina con la mirada y Marc y yo no podemos parar de reírnos.

Álex: Ya disparará, seguro que más que tu hormiga.

Valeria: Vamos a dejar de hablar de penes que quiero dormir.

Álex: ¿Estás bien?

Valeria: Sí, sí, sólo cansada.

Álex: Vale.-me giro y poco a poco los ojos se me cierran.

Narra Álex

Valeria se ha quedado dormida, Marc y yo nos sentamos en los sillones.

Marc: ¿La quieres?

Álex: Más que a nada, es algo que no puedo remediar, estoy loco por ella.

Marc: Tienes que recuperarla...

Álex: Lo sé, es mi mujer, para mi es la mujer perfecta, con ella quiero tener mis hijos, envejecer con ella, celebrar las navidades, los títulos, todo.

Marc: Ay hermanito, te has enamorado del todo.

Álex: Lo que siento por ella no lo puedo explicar con palabras, es algo enorme, mejor que cualquier título que pueda haber.-Marc me mira raro.-Sí, mejor que el de campeón del mundo de moto GP.

Marc: Entonces estás muy enamorado.

Álex: Mucho, es que ella es preciosa y lo tiene todo, de verdad no exagero.-mi hermano se acerca y me da un abrazo.

Marc: La vas a recuperar, lo sé.

Álex: ¿Qué hago?

Marc: Lo que te salga del corazón...

Álex: Vale...-salgo corriendo, ya sé lo que voy a hacer.

Narra Valeria

Cuando me despierto mi madre y Marc están en mi cuarto, me extraña que Álex no esté.

Marc: Bona tarda petita. (Buenas tardes pequeña).

Mamá: Hola hija, ¿has dormido bien?

Valeria: Sí, ¿dónde está Álex?

Marc: Ha desaparecido después de que te durmieras y luego ha entrado tu madre, no sabemos donde está el pistolas.

Valeria: Bueno da igual, ya vendrá...

Marc: Sí, no te preocupes.-Marc y yo pasamos las horas hablando hasta que es de noche. Álex no ha aparecido y no creo que lo haga, ya es bastante tarde. Me extraña que no haya venido en toda la tarde, la verdad es que estoy un poco preocupada, le habrá podido pasar algo, Marc me ha dicho que lo va a buscar y me llamará cuando lo haya encontrado. Mi móvil empieza a vibrar, veo que es Marc, lo cojo.

Valeria: ¿Marc?

Marc: Sí, soy yo. El pistolas está en casa, pero me ha dicho que no te puedo decir lo que está preparando, es una sorpresa.

Valeria: Está bien, ¿se puede poner?

Marc: Sí, ahora te lo paso.-escucho varios ruidos.

Álex: Hola preciosa.

Valeria: Hola guapo. Te he echado de menos esta tarde...

Álex: Lo sé, me lo ha dicho Marc, yo a ti también te he echado de menos, pero espero que mañana te guste lo que te voy a llevar...

Valeria: Todo lo que proviene de ti me encanta y lo sabes tonto.

Álex: Lo sé, espero que te guste... Me tengo que ir, te quiero mucho.-no me da tiempo a contestarle porque cuelga.

Me da miedo lo que vaya a traerme mañana, me paso la noche pensando en lo que me va a traer, y la verdad es que estoy nerviosa, pero a la vez tengo miedo.