La tragedia se cierne una vez más sobre los Pevensie, pero, para su fortuna, Aslan nunca los ha abandonado.
-A pesar de mis últimas palabras, debo decir: bienvenidos, Peter y Edmund, hijos de Adán; bienvenidas, Susan y Lucy, hijas de Eva.
-¿Pero qué...? -Edmund fue el primero en romper el silencio-. Tú dijiste que... -intentó continuar, pero las palabras se atascaron en su garganta, como si algo más pesado que el miedo lo detuviera.
-Sé bien lo que dije, Rey Edmund -respondió Aslan con calma, aunque sus ojos dorados parecían atravesar el alma del joven-. Sin embargo, dada la gravedad de lo sucedido, he decidido que no puedo dejar a los reyes de Narnia a su suerte.
-Eso quiere decir que... -murmuró Peter, quien hasta ese momento no había logrado articular palabra.
-Eso quiere decir, Rey Peter, que tú, Susan, Edmund y Lucy sois, de ahora en adelante, los reyes y reinas de Narnia. Gobernaréis junto al Rey Caspian y... la Princesa Regina.
-¿Regina...? -La voz de Susan se quebró al pronunciar ese nombre, como si cada sílaba cargara un peso insoportable.
-¿Quién es la Princesa Regina? -preguntó Peter con firmeza, llenando el vacío que Susan no podía afrontar.
Aslan se giró hacia Susan, y sus ojos leoninos brillaron con una mezcla de compasión y solemnidad.
-Regina es...
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Narnia: El retorno de los reyes (A partir Del 16/11 entra en edición)
Hayran Kurgu-Eso quiere decir, Rey Peter, que tú, Susan, Edmund y Lucy sois, de ahora en adelante, los reyes y reinas de Narnia. Gobernaréis junto al Rey Caspian y... la Princesa Regina. -¿Regina...? -La voz de Susan se quebró al pronunciar ese nombre, como si...
