No te enamores de mi, te haré daño.

Capítulo 17

A veces creo que hay cosas que no están bien.No entiendo por qué la vida se complica tan seguido. Sé que todo es en base a sacrificio y pruebas difíciles, pero no tiene sentido que todo sea negativo.

Hoy me entero de que mis padres se van a divorciar. Eso era de esperarse, y es que, esa relación ya estaba muerta.

Me quedo tranquila en mi habitación, que últimamente se ha convertido en mi lugar celestial, y de repente Max entra con cara de preocupación:

-Hola Dar.

-Hola...

-¿Qué piensas de todo esto?, de que nuestros padres se vayan a separar

-Nada.

-¿Nada?... ¿Por qué estás tan despreocupada de todo?

-¿A caso eso es algo que debería preocuparme?

-Claro que sí. Ya no seremos una familia...

-Hace tiempo que dejamos de serlo.

.-Eso dolió; pero no entiendo por qué te comportas como que nada importa. ¿Desde cuándo te volviste así?

-Por lo que veo, me importa más que a ti. ¿No te das cuenta que si nuestros padres decidieron separarse es porque existe un motivo que les impide ser felices juntos? Por Dios Max!

-No lo había pensado así, pero insisto en que no te pareces a mi hermana.

-Si vas a ponerte dramático, será mejor que te vayas y me dejes sola.

Max se pone de pie, me observa unos segundos y se marcha. Decido luego empezar a leer "Ciudades de Papel" de John Green y me desconecto de todo. Celular apagado, comuniqué en casa que no me pasaran llamadas ni visitas. No me interesa ver ni hablar con nadie. Me siento mejor como estoy.

****

Estos días he estado tranquila, o eso intento. No sabía que las cosas se pudieran complicar tanto y ahora comprendo que el dolor jamás es una carga ligera de llevar. Mónica y yo hemos estado distanciadas, y con Daniel ni se diga. Creo que me están dejando despejar la mente de todo lo que crea que me hace daño, pues dije que no quería hablar con nadie, no sólo porque considero que mis problemas son míos, sino que también he aprendido a ser mi propia amiga y consejera. Me parece que después de todo, Aron ha entendido que no le puedo corresponder y admito que hasta lo he extrañado, o tal vez no a él, sino la contrariedad de nuestras conversaciones (eso lo hacía divertido).

Ya en esta semana presentaré mi tesis en la universidad. Verdaderamente han sido días difíciles, pero gracias a Dios he salido adelante. Espero no llevarme más sorpresas y tampoco desilusionarme más de otras cosas. Creo que Max tiene razón al decir que ya nada me importa. Será más fácil después de todo dedicarme sólo a mí y a mi bienestar aunque suene egoísta.

Me encuentro de camino a la universidad a recoger unos papeles que necesito para organizar la presentación de la tesis. Paso por la cafetería, compro un helado y me siento a observar las parejas que hacen cosas cursis y sus falsas declaraciones de amor; observo las fotos que se hacen para publicar en las redes sociales, y que más adelante borran porque uno de los dos falla. Suena cruel, lo sé, pero es lo típico de hoy.

-¿Necesitas compañía?

Me quedo en silencio observando a Alex. Noto que está muy cambiado físicamente, pero su actitud sigue siendo la misma de cuando lo dejé.

-Bueno, ¿Te quedaste muda en este tiempo que tenías sin verme, o tomo ese silencio como un "NO"?

-Me da igual lo que pienses. Si te quieres sentar hazlo.