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Capítulo 64

Capítulo 64
Abigail

La organizadora del evento asignada por la división del Castillo Ballyseedee, se acerca a mi madre. Desde aquí puedo notar su rostro lleno de preocupación y angustia, cosa que no me parece adecuada, ya que se supone que esta debe mantener la calma en todo momento pase lo que pase, y buscar las mejores vías de solución, o eso es lo que supongo deben hacer, quizás estoy algo equivocada al respecto.

Mamá asiente ante las afirmaciones de la joven y esta se retira del lugar, no sin antes ofrecernos una sonrisa a todos. Sea lo que sea que esté sucediendo, me tiene sin mucho cuidado, ya que después de todo, estoy felizmente casada ante Dios y el mundo y para eso estamos aquí, lo que debió ser perfecto, ya lo fue, todo lo demás es puro accesorio.

—El maestro de ceremonias se encuentra indispuesto y el suplente está de vacaciones. Están tratando de contactar a una compañía que ofrezca el servicio, pero dice el chico que no hacen viajes los domingos, que en caso de eventos los domingos, salen el día antes y se quedan allí hasta el día siguiente —mamá niega con la cabeza incapaz de creerlo.

—Yo puedo hacerlo —interviene Jaden en la conversación—. Sí, es mejor que tome el control yo, a que venga cualquier otro petiseco desabrido a cubrir este evento.

Sin pensarlo se levanta de su asiento y se acerca a la Wedding Planner para que le pase el itinerario.

—Dios, no hay alguna cámara por allí. Necesitamos grabar esto —le digo a Jordan entre risas. Jaden toma posesión del escenario de inmediato y le pide al DJ que baje el volumen de la música.

—Uno, dos, tres... probando, ¿me escuchan? —pregunta. Las tías de la mesa de al lado responden en coro, si no supiera que no ha tomado una gota de alcohol todavía, diría que llevan muchas horas entre copas, pero supongo que es la alegría del momento que las tiene así—. Les quiero dar la bienvenida a familiares, amigos y relacionados de las familias Turner y King, gracias a todos por su presencia, en nombre de los esposos. Antes de empezar, quiero avisarles que esta noche estoy aquí, solo para poner un poquito de motivación, así que despreocúpense, que no seré yo quien se deshará de todo esto esta noche —dice poniendo sus manos en su ropa—. Como todos han de saber, todas las relaciones tienen sus anécdotas y estoy seguro de que J y April no se libran de tenerlas también, por ello, esta es la oportunidad que tenemos para desenmascararlos delante de todos ustedes y hoy queremos empezar por las personas que han hecho posible que todo esto sea digno de un cuento de hadas, así que, qué esperan para subir los señores Turner —se enciende la algarabía en las mesas, sobre todo en la de las tías—. Por cierto, les informo, que la mesa más animada de la noche, tendrá un regalo especial, cortesía de los novios de por parte de este servidor. Papá está agarrado de mano de mamá, mientras espera que Jaden le de la palabra.

—Buenas tardes a todos, gracias por hacer el esfuerzo y estar aquí compartiendo el día feliz de nuestra niña —oh Dios, me hará sonrojar—. Sé que muchos tuvieron que apartar mucho tiempo en su agenda, pero les damos las gracias porque la presencia de cada uno de ustedes es importante para Abigail y Jordan. Y como dice nuestro querido maestro de ceremonias recién estrenado, todos nosotros conocemos alguna anécdota sobre estos chicos y la verdad es que yo no me libro de ello. Hace ya bastante tiempo, Jordan y Abby, fueron a visitar a este viejo a su casa, en plan de “amigos”, según ellos. Yo nunca les creí, sin embargo, quise darles el beneficio de la duda, pero todo se quebró cuando este vejete, con mucha dificultad, escuchó mucho movimiento en el área de la cocina y como padre precavido al fin, bajé a ver qué sucedía allí, díganme valiente, pero sí, lo hice. No podía quedarme con la curiosidad. Cuando llegué allí a buscar un vaso de agua para tomarme mis medicamentos, no fue una sorpresa, verlos más cerca de lo que estarían un par de amigos, a menos que esté dándole respiración boca a boca —cubro mi cara con ambas manos. Dios, ¿Cómo dice eso delante de todos?—. Sin embargo, sentí alegría porque durante mucho tiempo extrañé ese brillo en sus ojos que hace tiempo no veía, fue como volver a resurgir, volver a descubrir algo distinto en ella, y eso me hizo feliz. Quiero decirles chicos, que tienen todo mi apoyo en este proyecto de vida que están llevando juntos, el matrimonio es como un viaje en avión, hay momentos de paz, pero siempre llega la turbulencia aunque sea por unos instantes, solo hay que aprender a manejarse y la soportaremos y superaremos, eso se logra con la comprensión. El primer paso para el que persista el amor es eso, comprensión, si eso está, todo lo demás viene por añadidura. Así que a tomar el timón como los buenos capitanes que son —mamá no habla, supongo que se sintió representada por las palabras de papá, además no creo que tenga mucho que decir, el comienzo no fue el mejor, así que es mejor dejarlo de esta manera.