El VIRUS [En Edición]

Capítulo 4

Apesar de lo que había sucedido nadie parecía afectado, sólo Arzalea, no dejaba de llorar, pero sus lágrimas ocultaban algo más que sólo tristeza. Repentinamente se paró de donde estaba y caminaba furiosa hacía donde me encontraba.

-Tú - dijo señalandome furiosa - Tú tuviste la culpa de lo que paso.

-No es cierto- y me moví lejos de ella.

-Si hubieras ido rápido por las medicinas que necesitaba Nicole nada de esto hubiera sucedido- se notaba que estaba molesta y triste.

-Ahora me vienes a gritar, pero hace unas horas ni siquiera le hablabas a tu amiga- le reproché con el mismo tono que estaba usando.

-Mald...

-¡Basta!- gritó mi mamá - Compórtense o sino todos terminaremos como Nicole, Odri ve a empacar y date prisa. - no usó nada de tacto al mencionar a la recién fallecida.

Sin contestar, fui directo a mi habitación, llena de furia aventé todo lo que había sobre mi tocador, traté de controlar mi agitada respiración,mis pulsaciones estaban aceleradas, poco a poco me fui tranquilizando y cuando el enojo se fue comencé a empacar.
Saqué una mochila y escogí lo más indispensable, 7 blusas, 3 jeans, otro par de tenis, ropa interior y por supuesto artículos de higiene personal, me senté en la orilla de mi cama y miré mi alrededor con nostalgia, jamás volveríamos eso era algo que tenía muy claro, pero mi mamá aparentaba lo contrarió, estaba sumida en mis pensamientos que no escuché cuando llamaron a mi puerta.

-Pase- dije con voz cansada.

-Hola, se que no me comporté muy bien cuando estabamos en la farmacia, pero vengo a ofrecer disculpas - no esperaba que fuera el chico que nos había amenzado y no podía creer que se disculpara, definitivamente el mundo se puso de cabeza -Por cierto me llamo Chris.

-Yo soy Odri- hablé amistosa.

-Lamento lo de tu amiga- y me dio un abrazo, no se lo correspondí porque no tenía la suficiente confianza para hacerlo
-Esta bien, creó que no podíamos ayudarla - y lo alejé de mi, su mirada desmostraba confusión por mi repentino cambio- Tengo que empacar- le dije cortante.

-Te esperamos abajo- dio media vuelta y salió dejandome sola con mi única compañía el silencio y las bocinas de los autos.

Esperé un poco más antes de ir con los demás, cuando bajé me encontré con todos en la sala, al parecer hablaban de algo de suma importancia, no entendía nada de lo que decían y nadie se percataba de mi presencia, hasta que mi voz los sorprendió.

-¿De que hablan?- pregunté frunciendo el seño.

-Hija esta ciudad no es segura, es por eso que debemos movernos e ir a Los Ángeles, ahí esta ubicado una de las zonas seguras, además de que tenemos una casa a las afueras de esta ciudad- siempre sabía que decir o que hacer era como si todo lo tuviera minuciosamente planeado.

-Iremos en los dos autos, Mary, Nicholas, Arzalea y Evan iran juntos y los que restan vendran conmigo, Mary yo guiaré y por ninguna razón deben detenerse, salgan rápido y sin hacer ruido.

Algunos llevaban comida y otros ropa, sin olvidar nada, cogimos las mochilas y  en total silencio trotamos hacía los autos.

Todos salimos sin hacer el menor ruido y moviendonos lo más rápido que podíamos, tal y como lo había dicho mi mamá, su plan estaba hecho a la perfección y la organización fue increíble. Nos percatamos que la calle empezaba a quedar desierta,a excepción de las criaturas come carne.
Me senté de copiloto, dejando a Lucas y Chris en la parte de atras, apenas entró mi mamá, encendió el auto y sin esperar más arrancó, rumbo a la autopista. Por el espejo retrovisor podía ver el carro de Mary que nos seguía de cerca. Nos dirigímos al centro de Nueva York, ya que era la única ruta que nos llevaría a la salida de la ciudad.
El tráfico era horrible, las calles estaban llenas y ningun auto se movía, algunas personas desesperadas tocaban el claxon sin cesar y los riudos se hacían cada vez más insoportables.

-Maldición- soltó mi mamá por lo bajo.

-¿Hay otra ruta o alguna desviación cerca?- preguntó Lucas irritado por los sonidos provenientes del exterior- Mierda, callense de una maldita vez- gritó sacando la cabeza por la ventana.

Lo que recibió a cambio fueron unos insultos de parte de los choferes molestos.

-Lucas calmate, todos estamos desesperados pero tratamos de controlarnos- dije dándole una mirada severa por el retrovisor.

-La próxima salida esta a dos cuadras, pero con este tráfico tardaremos mucho en llegar- dijo mi mamá- Saldré a ver que es lo que sucede, regreso en un momento.

Y abandonó el vehículo dejandonos solos y en un silencio incómodo.

-Entonces...¿ Tienen una casa en Los Ángeles?- habló Chris tratando de romper el silencio.

-Aja- respondí sin darle importancia a su pregunta

Otra vez nos quedamos en un silencio incómodo y esta vez nadie hacia algo por romperlo, mi vista bajo por lo que sucedía en la calle, nada parecía tener relevancia, hasta llegaba a ser aburrido observar a través de la ventana, Lucas no dejaba de moverse en su lugar y Chris parecía perdido en su mente.
Todo era igual, al parecer el caos no se habia hecho presente, unos sonidos en particular llamaron mi atención, se escuchaban lejos, pero aun asi traté de distinguirlos, eran unas sirenas, un instante después los ruidos eran ensordesedores y desconsertantes, baje mi ventanilla, asomé un poco la cabeza y vi que los militares comenzaron a matar a las personas que se encontraban en las calles, metí mi cabeza y miré a mi amigo.

-Estan disparando- murmuré aterrada.

-¿Quienes estan disparando? - preguntó Lucas confundido.

-Los militares y les disparan a las personas que estan afuera- dije elevando la voz, y recordé que mi mamá estaba ahí afuera- ¡Mi mamá sigue haya!, debemos ir por ella- intenté abrir la puerta, pero fue en vano, ella nos había dejado encerrados.

-Ella estará bien, pronto volverá y nos iremos - habló Chris calmado.

Pero sus palabras no lograban convencerme, sentía que algo estaba mal.

-Lucas ayudame a abrir la puerta- le dije suplicante.

-No, debes calmarte y esperar, confía en ella después de todo es igual de astuta que tu- dijo nervioso, pero me regaló una sonrisa tranquilizadora.

Pero lo que vi por la ventana me dejó completamente helada, mi mamá estaba parada en la esquina y un soldado caminaba hacia ella con paso firme y decidido, al parecer ella no se había dado cuenta de esto, tenía que evitarlo cuanto antes.

-Ayudenme a bajar- dije ansiosa.

-No- respondió Chris con tono autoritario.

-Por favor- sentí mi rostro calentarse ante la impotencia

-Odri no y deja de insistir - dijo Lucas enojado e irritado.

Podía sentir las lágrimas acumularse en mis ojos y mi cara rojo de ira, sin poder evitarlo exploté.

-Joder, date cuenta de lo que sucede de una jodida vez, observa por la maldita ventana y veras porque quiero que me ayudes- y señalé por el vidrio mientras lloraba.

Cuando volteé sus rostros estaban pálidos, se habían quedado helados.
Unas fuertes punsadas hicieron que me llevara las manos a la cabeza, me sentí mareada y todo lo que escuché antes de caer en la inconsciencia fue un disparo.

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Preguntas:

¿Quienes creen que logren sobrevivir?

¿Hasta el momento que personaje es su preferido?

Dejen sus comentarios, su opinión es valiosa para mi.