Kurt Cobain está vivo.

(Capítulo extra) Una cena con Nirvana

Del mueble del pequeño baño, sacó una venda y la pongo con fuerza en mi brazo. Casi no sangra, porque no estaba profunda. Solo es larga, y no deja de arder. Quién sabe por dónde habrá estado esa navaja. Aún sigo impresionada por todo lo que pasó hace unos minutos en aquellas tienda.
Regreso a la mesa, y me siento en mi respectivo lugar. Krist se me queda viendo.
-Estás muy pálida.- Dice dando un sorbo a lo que creo que es jugo de manzana.
-No. Estoy bien.- Digo tensa.
Como la única luz que hay es la de la sala, y a penas alumbra, Dave prende la vela que hay en medio de la mesa con un encendedor de Kiss.
Comenzamos a cenar la "ensalada" de Dave, y a pesar del mal aspecto, tiene un sabor delicioso y un muy buen sazón.
-¿Y a que se debe la cena tan elegante?- Digo tratando de calmar el ambiente.
-Porque... Para todos nosotros es un cambio radical en nuestras vidas. Lo vas a empezar a notar conforme pase el tiempo, ya verás. Y quería hablar con ustedes sobre los conciertos.-
Todos le prestamos mucha atención a Kurt.
-Sobre los conciertos... El primero, como saben, será mañana aquí. No he querido meterme a ver las redes sociales, estoy un poco asustado respecto al tema... Pero bueno. Vamos a tocar lo que se nos venga en ese momento, no tengo planeado nada y no pienso hacerlo. Las cosas van a salir como tengan que salir. María, tú también tocarás. Vas a abrir el concierto, cerrarlo y si quieres tocar alguna canción con nosotros, eres bienvenida.- Los ojos de Kurt, por primera vez, se ven realmente felices desde el día en que lo conocí. No contesto nada, sólo me quedo viéndolo.
-¿Maria...?- Dice interrumpiendo mis pensamientos.
-Si Kurt... Si, si. Kurt si.- Digo con evidentes nervios. Me mira con el ceño fruncido, y sé que probablemente, me de un sermón, de esos que me encanta oír, pero también odio.
El resto de la cena concluye en pláticas de los chicos, que evidentemente están emocionados. Al final pasamos un rato fenomenal todos juntos, y entre todos acabamos de recoger la mesa, pero estoy especialmente callada y nerviosa, y sé que ellos lo notan. Kurt en una ocasión trata de acercarse a platicar conmigo, pero mi excusa es que estoy sumamente cansada, y me voy a mi cama. Finjo estar dormida, pero cuando me aseguro que Evan está dormido, salgo y me siento frente a la gran ventana situada en el comedor. Veo a las personas pasar, los coches y la ciudad viviendo de noche.
¿Y si Axl en realidad tiene razón? ¿Y si en realidad soy una basura tocando, y ellos me lo dicen para que no me sienta así? ¿Y si Iron Maiden y Slipknot, sólo me dejaron tocar con ellos porque son amigos de Nirvana? Estoy dudando. Mucho. No definitivamente no tocaré mañana con ellos. Tal vez debería dejar la guitarra a un lado y dedicarme a cualquier otra cosa. Parece estúpido, pero las palabras de Axl me afectaron mucho. Siempre he admirado a Axl, y aun que se que no suele agradarle mucho a las personas por lo que me han contado últimamente, su música es increíble. Pero esta vez cruzó la raya.
Trato de que mis sollozos no se escuchen, y me seco constantemente las lagrimas con mi suéter, es como si hubieran agarrado en un puño todos mis sueños y los hubieran hecho pedazos.
Escucho como una puerta se abre, y por instinto sé que es Kurt. Pero me hago la dormida, ahí mismo en el piso. Sé que está parado en frente de mi, y escucho como se sienta.
-Se que estás despierta.- Dice su ronca voz. Abro los ojos, pero no lo miro.
-¿Qué pasa?- Dice con el ceño fruncido.
-No tocaré mañana con ustedes.- Parece no impresionarle.
-¿Qué pasa?- Repite, carraspeando.
-Nada, Kurt nada.-
-¿Por qué no vas a tocar, entonces?-
En ese momento volteo a verlo. Trae puesta una camiseta de Leadbelly. Sus ojos me miran hasta lo más profundo de mi, y me vuelven a entrar ganas de llorar. Me tapo la cara con las manos, pero el quita una de ellas, y envuelve mi mano entre las dos suyas.
-No estabas así cuando saliste, y Evan tampoco está como suele estar. ¿Qué pasó en la tienda de guitarras?-
-No tiene nada que ver con Evan.- Digo en un sollozo.
-¿Entonces?-
-No te voy a decir Kurt.- Sigue mirándome con el ceño fruncido.
-¿Se pelearon?- Me impresiona lo mucho que a Kurt le importa. Nadie se había interesado nunca tanto por mi.
-De verdad, no tiene que ver con Evan.-
-No voy a obligarte a que me digas. Pero o lo hace tu, o lo hace Evan.-
-No vayas con el. Por favor.-
-¡Entonces dímelo tú!-
-¿Courtney va a ir a los conciertos?-
-No. Pero no me cambies el tema... Espera, espera. ¿Tiene que ver con ella?- Dice extrañado.
-No.-
-Sólo dime.- Dice acomodándose en su lugar. Yo suspiro.
-Es que... Fuimos a la tienda, y nos encontramos a alguien. Es todo.-
-¿Pero a quien carajos vieron para que los dos estén así?-
-Kurt no tiene importancia. No me hagas decirlo.-
-Voy a ir con Evan...- Dice amenazante.
-¡Kurt por dios! ¡No tiene importancia! ¡A Axl! ¡Axl Rose! ¿Feliz?- Vuelvo a hundir la cabeza en mis piernas. Escucho la voz de Dave entrando a la sala, y una vez más siento como se sienta en frente de mi.
-¿Qué pasa aquí?- Dice soñoliento.
-Dave, cállate. ¿Qué? No me digas que están así porque el idiota no quiso firmarles un disco...- Dice Kurt medio en broma medio en serio.
-No Kurt. No fue eso.- Digo más tranquila.
-¿Están hablando de Axl? ¿Cierto?- Vuelve a decir Dave.
-En serio, cállate. ¿Qué les dijo?-
-Yo... Me acerqué a decirle que su música me gusta mucho... Y el... Empezó a reírse, y... A Evan le dijo que era "el aborto fallido de Cobain"...- No digo más. Kurt se ríe.
-¿Por qué te ríes?- Me siento un poco ofendida por su reacción.
-No, no. Espera. ¿Y por qué estás así?-
-¿Te estás riendo de mí?-
-No. Me río de ese idiota.-
-Ah...-
-Deja de decir tan pocas palabras y dime qué más dijo.- Los dos miran con atención.
-Pffff, me volteo la jugada. Le dije que su música era genial, y él dijo que la mía era basura. Me aconsejó dejar la guitarra y ponerme a hacer otra cosa. Y que ustedes... Nada más me dan esa oportunidad poro lastima.- Suelto un sollozo.
-¿Y tú te lo crees?- Dice enojado.
-No lo sé.-
-¿Entonces... Crees que no sirves para la guitarra? ¿Y por eso Iron Maiden y Slipknot te invitaron a tocar? ¡Nunca invitan a nadie!-
-¡Por eso! ¿Y si lo hacen por lastima?-
-¿Qué?- Dice riendo. -Jamás se arriesgarían a perder público poniendo a tocar a una niña que no lo sabe hacer. En serio, escucha lo que estás diciendo María.-
-Es que... Nada.-
-¿Es que que?- A este punto de la conversación, Krist y Evan también están sentado en el suelo con nosotros?
-¿Evan por qué carajos no me contaste lo de Axl?- Le reclama Kurt.
-Por qué no era importante.-
-¿Ah no? Mira como está ella, y mira cómo estás tú.-
-Kurt déjalo. Le pedí que no te contara.- Digo tímida.
-Dios me vas a hacer explotar. ¿Por qué no me lo ibas a decir?- Kurt está enojado.
-¡Por qué sé que tu relación con Axl no es la mejor!-
-¡Exacto! Es mi relación con el, no tiene que meterse con ustedes.-
-Bueno pues sus palabras ya están dichas. ¿Qué piensas hacer?-
-No sólo hizo eso, te quedaste en un "es que"...-
-Kurt ya deja el tema. Igual no podrás hacer nada al respecto.-
-¿Ah no? En este momento localizo al bigotón ese.-
-Kurt basta.- Digo tratando de levantarme del suelo. Pero el toma mi brazo, mi brazo herido. Y obviamente suelto lo que creo que es un grito de dolor. Me mira con ojos de pistola, y se levanta al mismo tiempo que yo.
-Como te estés metiendo algo...- Dice más para el que para mí, y levanta la manga de mi suéter. Y claro que no se encuentra con lo que él esperaba, sino con la herida de la potente navaja.
-¿Qué te pasó?-
-¡Felicidades! ¡Lo descubriste sin que yo tuviera que hablar!- Digo sarcástica.
-¿Qué? ¿Esto te lo hizo Axl?-
-Mmm, veamos. ¿Sus secuaces cuentan como él mismo?-
-Hijo de puta. Dave, contáctalo e invítalo mañana. Comerá con la cuchara grande.-
-Ufff, claro que si.- Dice Dave negando con la cabeza. Y se levanta.
-¿Tú por qué carajos no hiciste nada?- Kurt le grita a Evan.
-A ver, a ver, me acabo de enterar. Más bien, ¿María por qué no me dijiste nada?-
-¿Le vas a reclamar? Se supone que ibas para cuidarla, ¿y no te enteraste de esto?-
-¿¡Pueden callarse los dos?! Le pedí a Evan que se alejara para hablar a solas con Axl, y cuando estaba sola su secuaz me tomó.-
-¿Te echaste algo?-
-No.-
-¿Estás loca? Sabes dónde pudo haber estado ese cuchillo? Ven acá.- Kurt me toma del otro brazo y me jala hasta su habitación. Hace que me siente en una de las camas, y Evan se sienta a mi lado. Unos segundos después Kurt regresa con una botellita de quién sabe qué, y empieza a echarla por todo mi brazo.
-Duele.-
-Claro que duele.- Dice indiferente.
-No seas tan rudo.- Digo tímida. El está concentrado en mi brazo.
-Y así concluimos, en que tú no vuelves a salir sin uno de nosotros tres a la calle.-
-También quiero privacidad.- De repente me penetra con sus ojos.
-Siempre que sales, o estás comprando droga, o estás con tipos que conoces en lugares extraños, o te pasa esto. Olvídalo. Te recuerdo que ahora nosotros somos responsables de ti.- Regresa la mirada al brazo.
-Te recuerdo que así conocí a Evan.-
-Igualmente lo hubieras conocido.-
-Tu también me ocultas cosas, Kurt.-
-No era necesario que lo supieras.-
-No era necesario que supieras lo de Axl.-
-No empieces...- Me quedo callada. Y noto que Evan se siente culpable.
-Vas a tocar mañana.-
-Ah...-
-¿Ah? ¿Eso vas a decir?-
-¿Qué?-
-¿Tomaste algo?- Dice llevándose al baño de regreso su botiquín.
-¿Qué? ¡No! Estoy distraída, no seas paranoico.-
-Ya. Váyanse a dormir, mañana tienen un día largo.-
-No tengo sueño.- Evan empieza a jugar con mi cabello.
-Ve a dormir, no será excusa para no asistir al concierto.-
Me levanto de la cama, y observo a Kurt.
-Gracias por todo Kurt.- Digo seria.
-Ven acá.- Dice extendiendo los brazos.
Me da un fuerte, reconfortante y cálido abrazo. De esos que solo él sabe dar. Acaricia un poco mi cabello.
-Buenas noches, descansa.- Digo sonriéndole.
Los dejo a solas, y cuando voy de regreso a mi habitación, también les deseo buenas noches a Dave y a Krist, quienes no se ven muy felices. Y me dicen que mañana tienen que charlar conmigo.
Me acuesto en mi cama, volteando hacia la pared. Minutos después Evan también está en su cama, y apaga la luz.
-Abrazas más a Kurt que a mí.-
-Soy cociente de ello.-
-¿Estás enojada?-
-¿Qué? No. Sólo quiero decir que él me abraza más que tú.-
-Ah. Él te abraza, no tú a él.- Los dos reímos.
- Buenas noches Evan.-
-Buenas noches.-
Nos quedamos en silencio un rato.
-¿Sigues despierta?- Dice susurrando.
-Si.-
-Mañana, después del concierto, ¿quieres salir conmigo?- Se que me sonroje, pero ni él me ve, ni yo a él.
-Claro.- Digo sonriendo para mis adentros.
-Hasta mañana.- Dice, y noto que está feliz.
-Descansa.-
Logro quedarme dormida, y tengo un sueño extraño, en el que Axl mata a Kurt en medio de un concierto, y despierto en medio de la noche, alterada. Muy alterada. No podría con algo así. Si le pasa algo a Kurt... No. No quiero imaginar. Logró volverme a dormir...

HOLAAA. Recuerden que su opinión  y comentarios me importan mucho. Gracias por leer.