Ana se arrepintió de haber dicho eso, quizás no era el momento, pero quería estar con él, quería abrazarlo en la calle, besarlo sin que nadie dijese nada... Pero ya estaba dicho, Christian por otra parte sintió alivio de que ella también pensase igual que él. Pero no podía abandonar su trabajo, su familia... Almenos no ahora.- Déjalo, yo no quise decir eso... - Ana se abrazó a si misma comenzaba hacer más frio.
- Hey, Anastasia... Estaremos juntos, veremos el modo de estar juntos, ya lo veras. Pero ahora mismo, tanto tu como yo, no podemos abandonar a nuetras familias. Pero te prometo que en un futuro, todo el mundo sabrá que tu eras mía.
Dio dos pasos de gigante y la envolvió entre sus brazos. Y por si ya, el momento no era romántico en ese mismo instante comenzó a nevar.
Estaban volviendo al coche, ya que hacía mucho frío y era insoportable estar en la calle. La nieve caía dejándolo todo blanco a su paso.
Ya dentro del coche Christian encendió la calefacción, giró a ver a Ana, tenía la mirada perdida, se abrazaba a si misma y temblaba un poco. Se acercó a ella y le planto un beso en la mejilla.
- Te quiero, Srta Steele.
Las navidades pasaron tranquilas, pero por culpa de la familia el Sargento y la soldado no se pudieron ver, aunque siempre que podían llamaban. Para el año nuevo, gracias a Elliot y Kate, las dos familias la pasaron juntos. Y aunque Ana y Christian querían mantener distancia para disimular un poco su relación, era imposible no encontralos juntos como lapas.
- Quiero comenzar todos los años contigo, Anastasia. - Susurro Christian.
Todos hablaban y estaban ansiosos, por el año que venía.
- Y yo quiero acabarlos contigo, Christian. - Estaban felices.
Los dos estaban en su propia burbuja de enamorados, Ray y Carla estaban felices por sus hijas, las dos habían encontrado el amor de su vida. Pero les preocupaba que Ana le dijeses a Christian que estaba en la Marina, porque quizás a este no le gustase que ella estuviese metida ahí, con todo esos hombres. Ignoraban a que se dedicaba Christian, pero pensaban que era algún abogado de los Ángeles o algo parecido.
- ¿Que es lo que se están diciendo la parejita? - Dijo Kate por detrás suyo, haciendo que Ana se asustase.
- Yo...Nosotros... Nada... - Contestó Anastasia, intentando disimular un poco.
- Ya, y yo me lo creo. ¿Acaso me crees tonta? - Kate, sin duda había estado bebiendo un poco más de la cuenta.
Por suerte Elliot se dió cuenta que Kate estaba incómodando a la pareja y se acercó a ellos.
- ¿Que pasa aquí? - Preguntó mientras agarraba a Kate de la cintura.
- Están susurrando... Cosas guarras. - Le dijo a Elliot.
Este se rio tan fuerte, que llamo la atención de sus padres y los de las Steele, aparte de otros invitados.
- No, nosotros no... - Dijo Christian, claramente avergonzado.
- Tranquilo, hermano Kate ha bebido un poco, pero ya saben los borrachos siempre dicen la verdad. - Les guiño un ojo y se llevó a su novia a la cocina.
- Debo disculparme por el comportamiento de mi hermana, lo siento. - Ana estaba claramente sonrojada, Kate le había echo pasar uno de los momentos más incómodos.
- Yo también debería disculparme, por lo que de Elliot, lo siento. - Los dos se rieron.
- ¿Me acompañas a las cocina a por agua? - Preguntó Ana.
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La amo, Soldado
RandomAño 1976, acaban de aceptar a las mujeres en la marina. Anastasia Steele una joven que acaba de graduarse en la universidad, quiere cumplir el sueño de su padre, que esta a punto de morir. Ella se alistara en la marina, como una de las primeras muje...